«Lautaro siempre fue mi delantero favorito”. Acaso esta frase made in Scaloni argumente una de las razones por las cuales Martínez, Lautaro Martínez, fue, es y será citado siempre por el DT campeón del mundo. La otra respuesta, claro, está en lo que hace tiempo demuestra en la elite: nadie puede objetar que el ex Racing es hoy uno de los mejores delanteros del planeta fútbol. Incluso, y aquí lo más destacable, a pesar de sufrir en su propia selección una sequía que a esta altura ya es patrón de un deporte que varias veces es ilógico de toda lógica.

Nadie duda de que los 15 partidos sin convertir en la Selección forman parte de una racha circunstancial, producto de un bloqueo que le daría trabajo hasta al mismísimo Harry Potter, pero que en un futuro cercano volverá a ser lo que fue: el goleador del ciclo Scaloni (hoy es el segundo, con 21, detrás de Leo Messi).

Por si algún desprevenido lo desconoce: Martínez, vale decirlo, apenas tiene 26 años. Todavía su futuro asoma más alentador que su presente.

Con el que le metió ayer a la Fiorentina, el grito 124 en el club italiano, el Toro no sólo alcanzó (y con seguridad superará) a Mauro Icardi como el mayor goleador argentino de la historia del Inter.

Además, en su carrera por el Botín de Oro, igualó con 19 tantos a Kylian Mbappé en el podio de los máximos artilleros de la temporada y está a cuatro de Harry Kane, el inglés del Bayern Munich, y hoy máximo candidato. Top entre los top, sus números ilusionan, son contundentes señales de esperanza de cara a la Copa América 2024. Con él y con Julián Álvarez, la Selección tiene un alto poder de fuego por varios años. Y ni hablar cuando el Martínez de la Scaloneta vuelva a ser mucho más que el favorito del DT…