Si bien Gran Hermano comenzó hace dos meses, no le tomó mucho tiempo a Juliana “Furia” Scaglione convertirse en una de las máximas estrategas de esta edición del reality. Su forma tan particular de jugar ya está bastante desplegada y hasta el conductor de las galas, Santiago del Moro, se lo dejó claro delante de todos en la noche del martes.

Recientemente, mientras estaba entrenando, Juliana mantuvo una charla con Joel Ojeda, otro de los participantes que más tejen dentro de la casa, y esto llamó bastante la atención entre los espectadores. Lo que Furia le reveló a Joel sin dudas dejó varias cosas claras para el afuera.

Sin dar muchas vueltas, Juliana le dejó muy claro a Ojeda cuál es su plan secreto para vencer a los demás jugadores, con el gran objetivo de llegar a la final. Para quienes lo vemos y lo escuchamos todo desde afuera, puede estar bastante claro, pero sin dudas estar adentro es diferente.

Para poder entender lo que reveló Furia, hace falta citar una especie de cruce que tuvieron los dos en la habitación anteriormente, delante de todos. Joel había hecho un chiste y Juliana se lo tomó mal, supuestamente. Esto generó un ida y vuelta bastante tenso que paralizó a sus compañeros.

Por lo que contó luego Furia, ese episodio también fue parte de la manipulación psicológica que intenta aplicar a toda la casa. “No deben entender nada lo que hago. Que te peleo, que me peleás. Que después entrenamos juntos”, comentó orgullosa.

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“Me encanta desestabilizarlos y que no entiendan nada”, lanzó luego Juliana. “Yo la entendí igual”, respondió Joel, dejando clara la diferencia entre su forma de jugar y la del resto de los participantes. “Si, yo decía, ‘que me la siga Joel, que me pelee’”, contestó Juliana.

Esta estrategia tan particular que tiene Furia traspasa la pantalla y enloquece a los espectadores, generando diversas reacciones. Tiene tanto grandes fanáticos como detractores. Esto también quedó en evidencia cuando Santiago del Moro entró a la casa para darles a los participantes las palabras que enviaban sus familiares.

Virginia Demo y Furia Scaglione fueron elegidas por Gran Hermano para una misión, cuya recompensa era una buena cantidad de provisiones y las palabras que sus familiares decidieran enviarles. Esta misión fue cumplida con éxito y cuando el conductor reveló las palabras a cada jugador, la que le tocó a Furia no dejó dudas: “excelente”.

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