MAR DEL PLATA.- El sol, la temperatura y hasta la cantidad de gente. Todo parece escapado de los mejores momentos del último enero. Un deja vú que está ahí, palpable, con tanta gente entre la arena y el mar. Con los pasillos de carpas de nuevo con vida y agitados en los balnearios, que apostaron a este fin de semana largo y, al menos por este Viernes Santo, tuvieron su buen premio.

Los que se atosigaron desde la madrugada del jueves con viajes en auto de hasta diez horas. También quienes prefirieron una pausa y con más calma se tomaron un día más para salir a las rutas. Todos disfrutaron en las playas y por igual de esta excelente segunda jornada de fin de semana extralargo que se extenderá hasta el próximo martes. Un camino que tendrá de cal y de arena: aquí nomás asoman las lluvias y, es un hecho para el tramo final, también el frío.

“Diez días estuvimos de vacaciones en el arranque de enero y no tuvimos un solo días como este”, reconoce Judith, de Caballlito, que con su esposo y otra pareja vinieron por la revancha de aquel período de descanso que poco permitió disfrutar de la sensación de andar entre las olas.

Los casi 30°C de este viernes son excepcionales para la época y, casi seguro, la despedida real de una temporada que anduvo entre tropiezos, por mal tiempo y cantidad de gente en el inicio del año, y se acomodó entre fines de enero y un buen febrero.

Esta inédita oportunidad de cuatro feriados encadenados, por si fuera poco con esta jornada ciento por ciento de playa, dio oportunidad de facturar los últimos alquileres de sombrillas. Un rubro que tiene un aporte inesperado en medio de una Semana Santa en la que los grandes ganadores suelen ser la gastronomía, alojamiento y recreación, en ese orden.

Desde el Ente Municipal de Turismo se animaron a confirmar que arribaron desde últimas horas del miércoles unos 170.000 turistas. Con esa cifra se alcanza el número más alto que haya logrado la ciudad para esta fecha de Pascuas. Supera, en el caso de Mar del Plata, un 15% lo que se había conseguido hace un año.

La estadística sorprende, pero acompaña lo que se ve en las calles, con un movimiento propio de pleno verano. Por dónde se circule hay autos en doble fila con alguna valija por descargar. Difícil encontrar estacionamiento y paciencia para conseguir mesa para almorzar o tomar un café.

“Tenemos departamento, hace un mes que habíamos decidido venir para esta fecha, pero no imaginamos que nos íbamos a encontrar con tanta gente en la ruta y acá”, aseguran Beto Miranda y su esposa, Ludmila, que viajaron con su hija, su yerno y dos nietos. “Estamos corriendo a disfrutar de la playa”, explica mientras cargan hacia el sector de Varese con reposeras, heladera, sombrilla y dos docenas de empanadas que acaban de comprar por $18.000. “Más barato que en Buenos Aires”, acota.

La imagen de las playas muy concurridas impacta en este arranque de otoño. Las condiciones obligan y también el pronóstico ampliado, ya que no se repetirá un día de estos en lo que queda de fin de semana largo.

Fenómeno turístico

No fue una exclusividad de Mar del Plata. Este muy buen tiempo fue una constante en todo el frente costero del sudeste bonaerense. En todas las localidades balnearias se vive un verdadero fenómeno turístico, con ocupación de servicios de alojamiento con piso del 80%. Superó todas las expectativas, según reconocen en el sector.

Ya en este jueves se había visto muy buen movimiento de gente, con especial demanda en el circuito gastronómico y muy en particular los restaurantes y bodegones que se especializan en pescados y mariscos, cita obligada en esta Semana Santa. Se ofrece una porción de rabas a compartir con una cerveza por $10.000 o, por ejemplo, una picada marinera para tres personas y bebidas por $23.000.

Los turistas aprovecharon y mucho también las atracciones gratuitas que ofrece la ciudad. Además de los circuitos al aire libre, este jueves desde media tarde y hasta la noche se desarrolló otra edición de la Noche del Turismo y la Cultura. Es una propuesta con ómnibus gratuitos y recorridos fijos que permiten hacer escala en museos, casas históricas y otras actividades. Desde Emtur aseguran que, por concurrencia, fue de las más exitosa de las que se hayan realizado.

Para viernes y sábado se ponía en marcha otra propuesta que reúne y expone lo mejor de la gastronomía regional: Street Food. Es una muestra con más de 100 stands con comidas y bebidas, charlas, clases magistrales y degustaciones. Todo en un marco espectacular: los parques de la histórica Villa Mitre.