En la Champions League, el Real Madrid siempre se erige como el equipo a batir. Y para la Casa Blanca, el rival a vencer es invariablemente aquel dirigido por Pep Guardiola. La jerarquía, la mística y el impresionante historial de títulos son atributos que vinculan al Merengue con el DT catalán. Sin embargo, el destino, caprichoso en su naturaleza, ha situado a Guardiola en el lado blaugrana de la historia, al haber nacido a 50 kilómetros del Camp Nou. El azar los ha emparejado nuevamente y, tras el 3-3 en el Santiago Bernabéu, el galardonado entrenador tiene ante sí la chance de eliminar al Real Madrid por cuarta vez.

El año 2011 marcó un hito histórico, al enfrentar por primera vez al Barcelona y al Real Madrid en semis de Champions. Para añadir más intensidad, en los bancos de suplentes se encontraban dos de los entrenadores más destacados del siglo XXI, con una rivalidad personal latente: Pep Guardiola y José Mourinho. «En esta sala, él es el jefe absoluto. El amo absoluto», había declarado Pep, en respuesta a algunas críticas por parte de «The Special One». En el terreno de juego, el Barsa arrasó. En el Santiago Bernabéu, Lionel Messi protagonizó una de sus noches legendarias para llevar la serie 2-0 a favor del Culé. Posteriormente, en el Camp Nou, el empate 1-1 aseguró la clasificación del Blaugrana para la final de Wembley.

Uno de los mayores desafíos de Guardiola en el Bayern Munich fue conquistar la Liga de Campeones. A pesar de su dominio abrumador en la Bundesliga y de exhibir un juego que cautivó a todos, el camino de los Bávaros hacia la gloria siempre se detuvo en las semifinales. En la temporada 2013/14, la primera de Pep en Alemania, sufrió quizás la eliminación más dolorosa de su carrera. Después de caer 1-0 en el Bernabéu, optó por un atrevido 4-2-4 en el partido de vuelta en el Allianz Arena (una formación que solo había utilizado una vez, con resultados negativos, ante el Dortmund). «Ha sido un error monumental. Me equivoqué», admitió tras una derrota por 0-4 que quedará grabada en la historia.

Real Madrid y Manchester City han sido dos de los equipos más destacados en los últimos cinco años. Uno, dominando en La Liga. El otro, reinando en la Premier League. Por esta razón, no sorprende que, durante los ocho años de Guardiola en Inglaterra, se hayan enfrentado en la Champions en tres ocasiones, hasta la presente edición. El primer encuentro fue en los octavos de final de la temporada 2019/20, con dos victorias que permitieron a los Ciudadanos avanzar al Final 8 en Oporto. En el segundo enfrentamiento, en las semifinales de la temporada 2021/23, se repitió la desdicha: después del 4-3 en el partido de ida y el 1-0 a favor del City a dos minutos del final, Rodrygo llevó la serie al tiempo extra y Karim Benzema la sentenció.

Guardiola prepararía la revancha con una exigencia extrema. La semifinal de la temporada 2022/23 representaba la oportunidad perfecta para la redención de Pep: el Manchester City no tenía rival en Inglaterra, Guardiola había encontrado la efectividad en un nuevo sistema táctico (3-2-4-1) y contaba con Erling Haaland como el goleador que siempre había anhelado en Manchester. En el partido de ida, logró un empate 1-1, en España. En la vuelta, los Ciudadanos dieron un espectáculo deslumbrante: un contundente 4-0 con un juego vistoso, lo que les permitió acceder a su segunda final de Champions (la cuarta de Pep) y acariciar la Orejona.

«Prefiero jugar la vuelta en casa por razones obvias, pero ser favorito con el Real Madrid, el rey de esta competición, no lo sé. El favorito será el que juegue mejor. Tomamos bien el empate. Es buen resultado», analizó Guardiola, luego del tremendo 3-3 de la ida, en el Santiago Bernabéu. Lo pudo ganar. Lo pudo perder. Lo empató. Y definirá la serie en el Etihad, en donde no pierde por Champions desde el 2020 y, por Premier League, hace un año y medio. ¿Le será suficiente para superar al Merengue? Deberá estar lo más cerca de la perfección posible. Y una vez fuera de carrera la Casa Blanca, el Manchester City se erigirá como el gran candidato.

En cuanto a los números, Pep tiene un historial ampliamente favorable ante el Real Madrid, el cual justifica la preocupación del Merengue por volver a enfrentarlo en Champions. De 24 partidos, Guardiola ganó 13 duelos (9 en Barcelona y 4 en el City), empató seis y perdió cinco. Además, sus equipos marcaron ¡50 goles!, frente a los 31 que le convirtió la Casa Blanca. ¿Podrá Pep sostener su dominio ante el Merengue o los de Carlo Ancelotti ganarán la pulseada?

• 2011 – Semis: 2-0 en el Bernabéu y 1-1 en el Camp Nou.

• 2014 – Semis: 0-1 en el Bernabéu y 0-4 en el Allianz Arena.

• 2020 – Octavos: 2-1 en el Bernabéu y 2-1 en el Etihad Stadium.
• 2022 – Semis: 4-3 en el Etihad Stadium y 3-1 en el Bernabéu.
• 2023 – Semis: 1-1 en el Bernabéu y 4-0 en el Etihad Stadium.
• 2024 – Cuartos: 3-3 en el Bernabéu y vuelta en el Etihad Stadium.