Desde la semana pasada, la casa de Gran Hermano se vio revolucionada por la noticia de qué Furia debería dejar el reality por un tiempo a raíz de un problema de salud que debía atender. Al comunicarlo a sus compañeros, la jugadora bromeó con el hecho de que no volvería y todos se conmovieron al respecto.

Al final, ya enterados de la verdad y de que la vuelta a la casa de Furia sucederá en algún momento, Virginia tomó la palabra: «Yo ya estaba llorando pero porque la quiero un montón. Posta. Si hablamos de juego, yo quiero avanzar y obviamente espero que los jugadores más fuertes se vayan a la mierda, pero eso no quiere decir que no quiera a la persona. A Furia la quiero un montón».

Las palabras de Virginia sorprendieron tanto a los participantes cómo a los espectadores, especialmente porque fue una de las que lideró la movida para sacarla de la casa cuando estuvo en el mano a mano con Catalina. Sin embargo, los sentimientos van por otro lado: «Quiero que se vaya en el juego pero si lo hace algún día, que lo haga por la gente. Quiero que salga del juego pero no así, no por algo de salud».