River está parado en un punto en el que no estuvo parado desde hace mucho tiempo. Un punto en el que sus propios hinchas debaten día a día en la arena de las redes sociales, la calle online, sobre la mirada sobre el ciclo vigente que conduce un Martín Demichelis que el sábado, antes de la goleada a Central Córdoba de Santiago del Estero por el debut de la Liga Profesional, escuchó desde el túnel, a punto de salir al campo, cómo una parte del Monumental silbó su nombre cuando la voz del estadio lo mencionó. ¿Es un punto de no retorno con una porción del colectivo riverplatense? Eso lo dirá el tiempo, pero en todo caso tal vez la mejor prueba para averiguarlo esté aquí y ahora, en lo que muestre su equipo y en la cintura estratégica que se le vea al entrenador en la Copa Libertadores de América.

Es un punto inédito. Porque es un punto: un punto, apenas uno, es lo que le alcanzará sacar al CARP esta noche cuando reciba a Libertad como para clasificar a los octavos de final de la máxima competencia continental por novena vez consecutiva, pero también para reservar por adelantado el pasaje al primer Mundial de Clubes XL que se desarrollará el año que viene en los Estados Unidos y congregará a los mejores equipos del planeta.

Hay puntos y puntos. Por eso también lo raro de la situación: River fue el único grande que arrancó con el pie derecho la Liga, perdió dos partidos en lo que va del año, el ciclo tiene una efectividad que roza el 70%, de local se hizo casi invencible desde que al Monumental van poco menos de 90 mil personas por juego, ya dio tres vueltas olímpicas en la era y en esta CL está al borde de cumplir sobrado el primer objetivo, pero aún así hay una porción de hinchas disconformes.

Y eso tal vez tenga que ver con lo que hay más allá de los números fríos, con qué partidos ganó, a quiénes, en qué instancias, y con que el equipo aún no mostró garantías en paradas bravas. Pues bien, la Libertadores, la hermosa y traicionera Libertadores, es probablemente la que funcionará definitivamente como un termómetro y la que marcará a fuego en términos populares una mirada sobre el ciclo MD: o la base de los muy buenos registros que tiene Micho se multiplica con una buena performance de CL, o los silbidos que aparecieron el sábado terminarán tapando los logros de esta era si el CARP no da la talla como en los últimos tres años, en los que no pasó de cuartos de final y no se mostró consolidado como un equipo de estirpe copera.

Por lo demás, una buena prueba es la de esta noche ante un Libertad que no tiene margen y debe ir por la épica en un estadio en el que River, con Demichelis al mando, ganó los cinco partidos que jugó por CL. Aunque para el CARP alcance con un empate para pasar a los playoffs, lo que necesita es ganar: sumar los seis puntos que le quedan por disputar es esencial para el objetivo secundario pero no menos importante de terminar lo más arriba posible en la tabla general (hoy aparece quinto en ese ránking, dos puntos por debajo de Mineiro y en la misma línea de Bolívar, Palmeiras y Talleres, con peor DG) para asegurarse definir en casa, con lo que eso representa en este último tiempo, los mano a mano.

Con un equipo que mantendrá la base que obtuvo el propio Demichelis en aquel 2-0 a Nacional hace poco más de un mes, el deté evaluará variantes, especialmente en los laterales: acaso las mejores dos noticias de la goleada a los santiagueños fueron los rendimientos de Sant’Anna y Casco en las bandas. En contraste con un semestre irregular de Herrera y Enzo Díaz, el uruguayo y Milton les pelean un lugar en el 11 que antes veían lejano.

Es un punto importante. La Copa Libertadores, aquella que catapultó a la eternidad al ciclo de un Marcelo Gallardo que desde ayer vuelve a estar sin club y que sigue proyectando su sombra sobre esta era, es la llave para que los silbidos que aparecieron en Núñez se pierdan en el viento.

Franco Armani; Agustín Sant’Anna o Marcelo Herrera, Leandro González Pirez, Paulo Díaz, Enzo Díaz o Milton Casco; Nacho Fernández, Rodrigo Villagra, Rodrigo Aliendro o Esequiel Barco; Claudio Echeverri; Facundo Colidio y Miguel Borja. DT Martín Demichelis

Rodrigo Morinigo; Iván Ramírez, Luis Cardozo, Miguel Jacquet, Matías Espinoza; Iván Franco, Hugo Martínez, Hernesto Caballero, Bautista Merlini; Rodrigo Villalba, Oscar Cardozo DT: Ariel Galeano

El árbitro del partido será Piero Maza (Chile). Lo acompañaran sus compatriotas Claudio Urrutia, como primer asistente; Miguel Rocha, segundo asistente y Manuel Vergara, cuarto árbitro. En el VAR, estará el colombiano Yadir Acuña.

Este partido va a ser transmitido en Argentina por TV a través de las señales de Fox Sports y Telefé. De manera online, vía streaming, por la plataforma de Star+.