Al menos ya son dos los gobernadores que sostienen que el lema del presidente Javier Milei «No hay plata» se empezó a sentir en el mantenimiento de las rutas nacionales que atraviesan sus territorios y pidieron administrarlas a través del cobro de peajes. Pero además, en Río Negro y Neuquén los mandatarios giraron proyectos a sus legislaturas para cobrar peaje en sus rutas provinciales. Argumentan la caída de fondos de Nación.

El viernes pasado, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, mandó un proyecto con el cobro de peajes en todas sus rutas provinciales pavimentadas. La Legislatura provincial lo tratará este jueves. Frente a la polémica, porque incluía rutas como el circuito chico de Bariloche, el Ejecutivo local agregó este martes una adenda en la que excluye a las rutas turísticas de la provincia.

Pero además, a Weretilneck se sumó Rolando Figueroa, gobernador de Neuquén, con el foco en Vaca Muerta. El oficialismo neuquino también presentó un proyecto de ley para poder «evaluar la instalación de peajes en la Ruta Provincial 67, Ruta Provincial 51 y Ruta Provincial 7 que son de alto tránsito de vehículos y acoplados pesados de las operadoras de la actividad hidrocarburífera», dice el proyecto presentado el pasado 4 de marzo.

En medio de la búsqueda de peajes locales, este martes le pidieron a Vialidad Nacional la transferencia de algunas rutas que surcan sus territorios. «La actual situación nacional de ajuste pone en riesgo la capacidad operativa de Vialidad en Río Negro y lo mismo sucede en Neuquén. Junto a Rolando Figueroa solicitamos al Gobierno nacional el traspaso de las rutas nacionales a las provincias», aseguró Weretilneck en sus redes.

«Si no nos ocupamos nosotros del mantenimiento y las obras que necesitamos, nadie lo va hacer. Si seguimos así, en los próximos años el deterioro será mayor y la conectividad dentro y fuera de las provincias, inviable», añadió el mandatario patagónico.

Desde Neuquén, habló Rubén Etcheverry, ministro de Infraestructura: «Le solicitamos a Vialidad que nos permita poder mantener las rutas nacionales que están en territorio nacional, donde tenemos problemas de peligro y más de 20 muertes por año en Río Negro y otro tanto en Neuquén. Y Nación ha fijado esta política de no hacer nada, no invertir y no están en mantenimiento y las provincias quieren tomar cartas en el asunto».

Y aclaró: «Lo que se pretende es que se nos permita cobrar peaje en estas rutas nacionales y a cambio, las provincias con sus respectivas direcciones de Vialidad, se encarguen del mantenimiento y conservación que en algunos casos son muy peligrosas, en algunos lugares con un ahuellamiento que prácticamente no se puede circular. Queremos que nos convoquen para empezar las tratativas y negociar la situación».

En particular se refieren a la Ruta Nacional 22, la 151, y la 40 en el tramo que cruza Villa La Angostura (Neuquén) por el centro. «La situación es muy desastrosa», aseguró el ministro neuquino. Una parte de la carga que sale de Vaca Muerta circula por Río Negro, al igual que la producción de la fruticultura del Alto Valle

Desde Neuquén y Río Negro aclaran que para vehículos livianos neuquinos y rionegrinos no harán el cobro de peaje. «En medianos, de carga, pesados y con patentamiento de otras jurisdicciones si van a tener tarifas diferenciales de peaje según el tipo de ruta y los horarios, se está elaborando la propuesta», remarcó Etcheverry.

El argumento central de los dos gobernadores es la falta de fondos. Río Negro recibe parte de la recaudación de un impuesto a los combustibles y asegura que lleva más de dos años congelado. En 2023, esa provincia recibió un 60% de lo previsto y en el primer cuatrimestre del 2024, un 40%. En total, la provincia tiene 758,7 kilómetros de rutas provinciales pavimentadas.

«Esta semana la Legislatura tratará el proyecto de ley de establecimiento de Contribución de Peaje para garantizar el funcionamiento del Fondo Provincial de Vialidad, destinado a la compra y mantenimiento de equipamientos y rutas. El proyecto no incluye ninguna ruta turística, la idea es incorporarlo en aquellas que están sufriendo un fuerte deterioro como la 65, la 6 y la 69, las más utilizadas en el circuito de Vaca Muerta», aclaró Weretilneck este martes.

«Un peaje que irá destinado a quienes no son habitantes de Río Negro ni de Neuquén», remarcó el mandatario.

Sobre el cobro del peaje en Río Negro, el proyecto establece una unidad base que será el «litro de gasoil grado 3 para la venta al público en el ACA de Viedma». Ese valor se actualizará en forma trimestral, será del 25% de la unidad base en motos, una unidad plena en los vehículos, y de 50% del valor de la base imponible por cada eje del transporte pesado.

Neuquén solicitó los kilómetros de la Ruta Nacional 22, desde el tercer puente del límite con Río Negro hasta el empalme con la Ruta Nacional 40, en Zapala.

También el tramo de la Ruta Nacional 242, desde que nace en el cruce con la Ruta Nacional 40, en Las Lajas, hasta el límite con Chile, en el paso fronterizo de Pino Hachado.

Y, la Ruta Nacional 231, desde el cruce con la Ruta Nacional 40 en la cercanías de Lago Espejo hasta el límite con Chile en el paso Cardenal Samoré.

Y según aseguró el ministro de Infraestructura, también la Ruta Nacional 40 en el centro de Villa La Angostura.

Río Negro solicitó la administración de la Ruta Nacional 22 y de la 151, que va desde Colonia Catriel hasta Cipoletti.

Por otro lado, dentro de sus rutas pavimentadas, Neuquén tiene un proyecto en la Legislatura para el cobro de peaje en: Ruta Provincial 67, Ruta Provincial 51 y Ruta Provincial 7.

Mientras que Río Negro, tiene previsto cobrar peaje en las rutas provinciales 6, 8, 65 y 69, y la 2.