«Obviamente el gobierno va a festejar que bajó la inflación que éste mismo subió, era del 25,5 por ciento en diciembre, van a inventar que eso es culpa del gobierno anterior cuando en realidad estamos en el mismo valor de mediados del año pasado», analizó Juan Valerdi.

«Está claro que en la Argentina no hay competencia, que hay mucho monopolio, oligopolio y 8,8 mensual es un exceso absoluto, o sea que no hay nada que festejar», cuestionó.

En ese sentido explicó: «Ese 8,8 por ciento obedece más a lo que tiene que ver con los alimentos y bebidas que efectivamente dejaron de subir, pero porque las empresas no están vendiendo, están teniendo problemas incluso con vencimientos en las mercaderías, sus stocks, por más que redujeron la producción. Los colegios y un montón de cosas subieron un 35 por ciento con lo cual un poco sí han dejado correr esos precios regulados, pero no todo lo que ellos decían a las empresas energéticas, a las mismas que les prometieron a través del Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) que se podían llevar todos los dólares y no traerlos de las exportaciones que se den. Entonces está claro que el gobierno quería obtener una inflación por debajo del 10 por ciento, ahora seguramente va a aflojar esas tarifas para la suba y se va a poner como piso esta inflación y no va a seguir bajando».

Asimismo, sostuvo: «Efectivamente el gobierno quiere manotear dólares de donde sea y en eso ha hecho bastante hincapié en que sean del lavado internacional, pero los lavadores en general necesitan cierta estabilidad para lavar sus fondos entonces como no está claro que esto que están haciendo Javier Milei y Luis Caputo pueda llegar a quedarse por un tiempo largo, no están viniendo, sí lo están haciendo algunos capitales especulativos, pero estos necesitan ganar en dólares».

«Me cuesta pensar cómo puede irle mal a Caputo sin que le vaya mal a Milei, pero si lo tienen que usar de fusible seguramente va a ocurrir», expresó. También consideró: «Claramente no vienen dólares y mucho menos de las inversiones porque las verdaderas que tienen que ver con un plazo mediano, largo consideran que lo político, social y económico en Argentina es explosivo, no tiene ningún tipo de estabilidad».

Por último, habló sobre los créditos hipotecarios: «No recomendaría de ninguna manera endeudarse en este contexto absolutamente impredecible y no consumir nada durable que no sea urgente o indispensable porque en valores en dólares está más caro que en la mayoría de los países del mundo», concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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