En una contundente advertencia, el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, señaló que el “esquema de represión” impulsado desde el Ministerio de Seguridad, encabezado por Patricia Bullrich, contra las protestas opositoras podría derivar en consecuencias graves.

Tras los incidentes en el Congreso durante las manifestaciones contra la Ley Bases, Quintela defendió a los manifestantes y advirtió al Gobierno de Javier Milei: “Este esquema de represión no sirve, va a terminar mal. Y esto le va a dar razón a este señor que dice que le quieren tirar un muerto. No. Es que, de esta manera, muertos va a haber”.

El mandatario provincial, quien se posiciona como uno de los principales opositores a la gestión actual, comparó las escenas de violencia reciente con la represión de 2001. “He sido testigo presencial del 2001, cuando les tiraban los caballos encima a la gente. La gente tiene derecho a defenderse ante una agresión de estas características”, declaró en una entrevista con la radio El Destape.

Criticó además los “mensajes cargados de odio” y la estigmatización de los manifestantes, calificándolos de “sediciosos”.

Desde esa postura, el gobernador convocó a la oposición a asumir un rol activo y formar un “núcleo de resistencia” contra las políticas y métodos del actual gobierno. Quintela subrayó la importancia de unir fuerzas para enfrentar lo que considera un comportamiento inaceptable por parte del presidente y su administración.

Operativos policiales y derechos humanos

A raíz de los operativos policiales contra las protestas, varios organismos de derechos humanos, tanto nacionales como internacionales, han expresado su preocupación. Amnistía Internacional y otros grupos han llamado la atención sobre el uso de la fuerza en el contexto de las movilizaciones. Poco después de la votación de la Ley Bases, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) convocó a una audiencia virtual el próximo 11 de julio, en respuesta a una presentación realizada en abril por organizaciones de derechos humanos y sindicatos.

Entre los casos destacados en esa solicitud, se encuentra el del abogado Matías Aufieri, quien sufrió la pérdida de visión en un ojo tras recibir un disparo de bala de goma durante una represión.