El Manchester City ha publicado su Informe Anual correspondiente a la temporada 2023-2024, un documento que refleja tanto logros sin precedentes como desafíos estructurales que podrían marcar su futuro. En términos financieros, el club alcanzó ingresos récord de 715 millones de libras (900 millones de dólares), consolidándose como líder en la Premier League en términos de generación de ingresos. Este resultado, que superó el récord de la temporada anterior por 2,78 millones de dólares, refuerza el impacto de la planificación estratégica del club, un enfoque implementado desde la llegada del jeque Mansour en 2008.

El presidente Khaldoon Al Mubarak destacó la importancia de la mejora continua en su mensaje anual. «Nuestra obsesión inquebrantable por la mejora constante, dentro y fuera del campo, es parte de nuestro ADN», afirmó. Este enfoque ha sido clave para los éxitos deportivos, entre los que se incluyen la conquista de la Premier League por cuarta vez consecutiva y el triplete de la temporada anterior, sumados al título del Mundial de Clubes y la Supercopa de la UEFA. Estos hitos consolidan al City como un modelo de consistencia en la élite del fútbol.

No obstante, el informe también pone de manifiesto cómo el éxito del City no se limita al plano deportivo. Las cifras económicas son igualmente impresionantes: con un beneficio neto de 93,3 millones de dólares y una reducción de 12,6 millones en salarios, el club ha demostrado una gestión eficiente incluso en una era de inflación y salarios desmesurados. Además, las ventas de jugadores como Julián Álvarez, Joao Cancelo y Liam Delap generaron ingresos por 117,3 millones en las últimas dos ventanas de fichajes, lo que permite al equipo planificar con solvencia el mercado de invierno.

El impacto del club trasciende el terreno de juego. Con una audiencia televisiva global de 694 millones de personas y más de 10.000 millones de visualizaciones en redes sociales, el Manchester City se consolida como una de las marcas más poderosas del deporte. Este alcance global no es casualidad, sino resultado de una estrategia deliberada que combina éxitos deportivos, innovaciones en infraestructura y una conexión profunda con su base de aficionados. La ampliación del Etihad Stadium por 300 millones de libras es una prueba de esta visión, con el objetivo de crear una experiencia única para los seguidores y establecer al Etihad Campus como un destino de entretenimiento durante todo el año.

Sin embargo, el horizonte del City no está exento de nubes. El club enfrenta un juicio por 130 presuntas irregularidades financieras detectadas por la Premier League, cuyo veredicto se espera en 2025. Aunque el impacto inmediato no ha afectado su rendimiento financiero ni su posicionamiento deportivo, el desenlace de este caso podría redefinir su futuro. Dependiendo de las apelaciones y las sanciones potenciales, el proceso podría extenderse por años, generando incertidumbre en torno a su reputación y estabilidad.

En este contexto, el Manchester City demuestra ser un caso de estudio fascinante. Su capacidad para combinar éxito en el campo con una gestión económica impecable es indiscutible. Sin embargo, el desafío será mantener ese equilibrio en medio de la presión deportiva, las expectativas de los hinchas y los riesgos legales que se avecinan. Con una visión estratégica clara y una cultura organizativa envidiable, el City parece estar preparado para enfrentar el futuro, aunque este presente, paradójicamente brillante y complicado, será recordado como una de las etapas más definitorias de su historia.