SOCIEDAD
La salud de papa Francisco: el nuevo parte del Vaticano indicó que “pasó una noche tranquila”
ROMA.- En medio de un clima de creciente tensión y alarma después de que el martes a las 19.33 locales el Vaticano anunciara que el papa Francisco tiene neumonía bilateral, este miércoles a las 8,12, a través de su canal de Telegram, hizo saber que el Santo Padre “pasó una noche tranquila, se despertó y tomó el desayuno”. Fuentes vaticanas también hicieron trascender que el Pontífice, de 88 años e internado desde el viernes pasado, no está con oxígeno sino respirando en forma autónoma -aunque ocasionalmente podría recibir-, que se levanta de la cama para tomar el desayuno y que sus condiciones cardíacas no preocupan. “El corazón aguanta bien”, dijeron al adelantar, por otro lado, que por la tarde se difundirá un boletín médico.
La información causó alivio. El parte médico de la noche anterior, en efecto, hizo elevar como nunca la preocupación porque confirmó ese agravamiento que muchos temían y la degeneración de una bronquitis mal curada en una neumonía bilateral. Un cuadro clínico “complejo”, sobre todo para alguien como Francisco, de avanzada edad, desde siempre débil a nivel pulmonar, y con frecuentes bronquitis y resfríos en época invernal; el líder de la Iglesia a los 21 años sufrió una neumonía gravísima que lo dejó al borde de la muerte, según él mismo siempre contó, cuando le debieron extirpar una pequeña parte del lóbulo superior del pulmón derecho.
La información médica del martes dejó muy en claro que la situación es ahora complicada. Si bien aseguró que “está de buen humor”, dijo que “los exámenes de laboratorio, la radiografía de tórax y las condiciones clínicas siguen presentando un cuadro complejo”. “La infección polimicrobiana, que surgió en el contexto de bronquiectasias y bronquitis asmática -y que requirió el uso de terapia antibiótica con cortisona-, complica el tratamiento terapéutico”, agregó.
“La tomografía axial computada de tórax a la que se sometió el Santo Padre esta tarde, prescrita por el equipo sanitario del Vaticano y el equipo médico del hospital Gemelli, demostró la aparición de una neumonía bilateral que requirió tratamiento farmacológico adicional”, añadió.
Confirmó así que Francisco llegó el viernes pasado al hospital ya con una situación muy comprometida. Venía arrastrando una bronquitis desde hacía semanas, que se trataba con corticoides que utilizaba para facilitar la respiración, que le habían provocado una hinchazón del rostro evidente, pero sin solucionar el problema, sino todo lo contrario.
El Papa, sin escuchar a quienes le aconsejaban detenerse e internarse, continuó con una agenda: aunque él mismo explicaba que no podía leer los textos porque estaba con bronquitis y tenía “dificultad de respiración”, presidió audiencias generales, saludó centenares de personas y recibió visitas, aunque en los últimos días en su residencia de Santa Marta y no en el Palacio Apostólico. Tampoco quiso defraudar a las más de 30.000 personas que participaron el domingo 9 de febrero del Jubileo de las Fuerzas Armadas. Entonces, se expuso a una mañana fría, húmeda y ventosa que seguramente empeoró el cuadro.
La semana siguiente continuó con la agenda. Sólo el jueves, el día anterior a la internación, desistió de participar de un evento sobre justicia fiscal de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales. Entonces, según trascendió, en medio de máxima reserva, fue a hacerse unos estudios en el hospital Gemelli de la Isla Tiberina, más cercano al Vaticano, los que probablemente comenzaron convencerlo de que era la hora de parar e internarse. Cosa que hizo al día siguiente, después de diversas audiencias, una de ellas con el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico.
Más allá de una situación inquietante, sobre todo ahora que los médicos pudieron trazar el diagnóstico -neumonía bilateral-, desde la suite del piso décimo del Gemelli, donde se encuentra, hicieron llegar noticias de una persona, aunque enferma y en “reposo absoluto”, activa, que se levanta de la cama y al mando. Sin recibir visitas, sí todos los días la eucaristía, el Papa se dedica al reposo y a la lectura, aunque también con actividades de trabajo, ya que sus secretarios privados le hacen llegar correspondencia y demás papeles. Además llama a diario, como viene haciendo desde hace 15 meses, al padre Gabriel Romanelli de la parroquia de Gaza. Según entendidos, harán falta al menos cuatro días para ver si el tratamiento para superar la neumonía bilateral funciona.
Mientras tanto, desde todo el mundo sigue recibiendo mensajes de afecto que agradece y que lo conmueven. “Agradece la cercanía que siente en este momento y pide, con gratitud, que se siga rezando por él”, afirmó el parte médico de la víspera.
Esta es la cuarta internación del papa Francisco en el Gemelli, donde ya transitó y superó una neumonía “aguda y fuerte” a fin de marzo de 2023, cuando debió quedarse hospitalizado cuatro días. Las otras dos internaciones fueron por cirugías abdominales en julio de 2021 (estuvo diez días internado) y en junio de 2023 (tres días).
Cuando fue dado de alta por la neumonía, a principios de abril de 2023, al encontrarse con periodistas el Papa admitió que había sido una experiencia dura. Riendo, contó que se acordó de lo que le había comentado una vez un viejito que le había dicho: “¡Padre, yo la muerte la vi venir y es fea, eh!”.
Desde entonces, su físico se fue debilitando. Más allá de la ciática, un problema en la rodilla derecha –que nunca quiso operarse por temor a la anestesia total, según él mismo dijo–, lo obligó a comenzar a utilizar la silla de ruedas hace más de dos años. Aunque a veces, gracias a sesiones de fisioterapia, logra caminar ayudado por un bastón o un andador, el hecho de ya no moverse afectó su estado de salud general porque fue aumentando de peso. Entre diciembre y enero pasado, esa difícil movilidad le significó dos caídas en su cuarto de la suite de Santa Marta. Una vez se golpeó con la mesa de luz -por lo que apareció con un hematoma en el mentón- y otra vez se lesionó un brazo. Estos episodios jamás le hicieron perder el humor.
Aunque en los últimos días de alarma mundial por su salud corrieron versiones no confirmadas de que había recibido la unción de los enfermos, los entendidos recuerdan que, en verdad, es una praxis normal entre los creyentes enfermos recibir este sacramento y que no se trata de la antigua extremaunción.
SOCIEDAD
El padre de un rehén denuncia que su hijo fue obligado a besar a un terrorista de Hamas antes de ser liberado
TEL AVIV.- En Israel despertó indignación la mañana de este sábado la escena en que durante la entrega de los rehenes realizada en la Franja de Gaza, el israelí Omar Shem Tov, de 22 años, que se veía sonriente y efusivo en el escenario, besó en la frente a dos terroristas de Hamas que estaban a su lado, encapuchados y armados.
Pero las imágenes fueron engañosas desde el ángulo de la transmisión oficial.
Las redes sociales replicaron la misma imagen, pero tomada desde otro ángulo, y la secuencia de la escena es totalmente diferente. El propio padre de Omar, Malki Shem Tov, confirmó en una entrevista con el medio israelí Hadashot Kan, que los terroristas obligaron a su hijo a dar los besos.
En la imagen completa se ve a un camarógrafo de Hamas que estaba arriba del escenario con una cámara portátil. En un momento el camarógrafo se acerca a Shem Tov, le dice algo al oído, y el joven mira a los terroristas que tenía a su izquierda. Segundos después, el mismo camarógrafo se acerca a esos dos terroristas, les habla, y los dos encapuchados asienten con la cabeza. Solo después ocurre la escena del beso del joven en la frente de sus captores.
Omar Shem Tov es uno de los rehenes que tenía mayores problemas de salud durante su cautiverio puesto que padece asma y es celíaco. Ahora está recibiendo tratamiento en el Centro Médico Rabin en Petah Tikva, donde su familia ha preparado comidas sin gluten para adaptarse a su condición.
“Estuvo solo todo el tiempo y perdió 17 kilos”, dijo el padre en la entrevista periodística. Según él, durante los primeros 50 días de su cautiverio Omar estuvo recluido con Itai Regev, otro rehén liberado en el primer acuerdo. Luego estuvo recluido solo.
La enfermedad celíaca es un trastorno autoinmune crónico causado por una intolerancia genética al gluten, una proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno. La enfermedad a menudo se conoce como “la enfermedad de las mil caras” debido a su amplia gama de síntomas, que varían de persona a persona. Entre las personas con enfermedad celíaca, la exposición al gluten desencadena una respuesta inmunitaria que daña el revestimiento del intestino delgado, lo que provoca problemas de absorción de nutrientes y diversas complicaciones de salud.
Esta mañana, luego de reencontrarse con sus padres y cuando era llevado en un helicóptero al hospital, Omar escribió en una pizarra: “Quiero una hamburguesa”.
Su padre dijo: “Esperará unos días para equilibrarse con la comida, pero una hamburguesa es algo que definitivamente podrá comer. Probablemente sea una señal de recuperación de la cordura para él”.
Agencias AFP y AP
-
POLITICA3 días ago
Miguel Pichetto le contestó a Jonatan Viale: «No hay nadie que te quiera, pibe»
-
POLITICA3 días ago
Javier Milei instruyó a la Oficina Anticorrupción para que inicie la investigación por el escándalo cripto
-
POLITICA2 días ago
Luego de la reunión con Milei, la titular del FMI elogió el programa económico del Gobierno
-
POLITICA2 días ago
Javier Milei se reunió con Elon Musk y le regaló una motosierra
-
ECONOMIA2 días ago
¿Qué dice el decreto firmado por Javier Milei que transformó al Banco Nación en una Sociedad Anónima?
-
POLITICA1 día ago
Los 4.000 millones de Axel Kicillof que dejaron al descubierto las trampas de las licitaciones