Si analizamos sólo el trámite del partido y nos abstraemos de que se trata de uno de los equipos más importantes de Inglaterra, el Manchester United rescató un puntazo en Goodison Park ante el Everton. Después de un pésimo primer tiempo, los dirigidos por Ruben Amorim se recuperaron en la segunda parte, lo igualaron 2-2 y hasta pudieron haberlo ganado. Pero el Manchester United es el Manchester United y este empate refleja aún más la crisis futbolística que están atravesando los Red Devils. Una crisis que los tiene 15º, con sólo ocho triunfos y a 31 puntos del líder, Liverpool.

Tan complicado es el presente del equipo, que hasta los hinchas del Everton se animaron a gastarlos con un posible descenso. Aunque, cabe destacar, que hoy están a 13 puntos del Ipswich, el último que estaría perdiendo la categoría. Y, en este difícil contexto futbolístico, el DT decidió apostar por un 11 inicial sin Alejandro Garnacho, quien recién ingresó a los 15 de la segunda parte, cuando el partido ya estaba 0-2.

Y, pese a que el argentino no tuvo injerencia en los goles del United, su ingreso le dio un poco más de vitalidad a un equipo que ya parecía derrotado. Fue el capitán, Bruno Fernandes, quien con un espectacular tiro libre achicó la ventaja. Y, a 10 del final, el uruguayo Manuel Ugarte puso el 2-2 que ilusionó aún más a la visita. Pero, pese a que contaron con chances, el milagro del triunfo finalmente no llegó y el United rescató un empate.

En total, ya son tres los partidos que el equipo de Manchester lleva sin ganar: las caídas ante el Crystal Palace y el Tottenham y este empate. Por el lado de Garnacho, quien había sido titular en los últimos tres partidos del equipo por Premier League, lleva 19 partidos sin convertir. Un síntoma más del mal momento general del equipo.

Beto (19′ PT) y Abdoulaye Doucouré (33′ PT) marcaron para el Everton, que quedó 14º, un punto por encima del United.