La confirmación judicial de la condena a Cristina Fernández de Kirchner en la causa Vialidad proyecta consecuencias inmediatas. Más allá de las derivaciones legales del veredicto, un interrogante central se instala ahora en el debate público: cómo es el lugar donde la exmandataria podría cumplir la pena impuesta.

La actual presidenta del Partido Justicialista reside en un departamento ubicado en la calle San José 1111, en el barrio porteño de Constitución. Esta es la dirección que su abogado, Alberto Beraldi, presentó ante el Tribunal Oral Federal N°2, para que la exmandataria cumpla la pena. En este mismo inmueble también vive su hija, Florencia Kirchner.

El letrado argumenta que Cristina Kirchner, de 72 años, reúne los requisitos legales para el arresto domiciliario, principalmente por superar la edad de 70 años. “Preparamos un escrito en donde detallamos cuáles son las razones por las cuales Cristina Kirchner solo puede cumplir esta injusta condena en su domicilio”, señaló Alberto Beraldi en declaraciones a C5N. La necesidad de mantener una custodia permanente es otro de los puntos destacados por la defensa.

El departamento donde vive Cristina Kirchner se encuentra en el segundo piso del edificio de San José 1111, esquina Humberto Primo. La propiedad cuenta con aproximadamente 200 metros cuadrados y su valor estimado ronda los US$300.000.

La unidad habría sido adquirida originalmente por Florencia Kirchner en el año 2015. La compra se realizó al exsecretario de Cultura, Jorge Coscia. El inmueble se localiza a pocas cuadras de la sede de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, sobre la calle Santiago del Estero, y próximo a los estudios de Artear (TN y Canal 13), una zona de considerable tránsito peatonal y vehicular durante gran parte del día.

Aunque no se conocen públicamente los detalles internos específicos del departamento de la expresidenta, en el mismo edificio existen otras unidades que ofrecen una idea de la tipología constructiva. En el tercer piso “F”, justo arriba de la vivienda de Kirchner, se encuentra en venta un semipiso de siete ambientes. Este departamento, comercializado por Mariana Stange Real Estate, tiene un precio publicado de US$295.000.

La unidad del tercer piso posee 191 metros cuadrados, pero el propietario actual aprovechó la gran altura de los techos para construir un entrepiso, lo que amplió la superficie total a 232 metros cuadrados. Cuenta con cuatro dormitorios, cocina y dos baños. Conserva elementos originales como los pisos de pinotea en la mayoría de los ambientes y mármol en el hall de recepción.

Desde la inmobiliaria, comentaron a : “El departamento tiene unos detalles lindísimos para vivienda y también para uso profesional, es ideal para una escribanía, un estudio de abogados o una empresa que valore las buenas construcciones de otros tiempos. Está en una zona que no es la más demandada por la gente para vivir ni por las empresas para trabajar, pero tiene el encanto del Buenos Aires de otra época”.

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Juan Manuel Abal Medina, abogado, secretario general del Movimiento Peronista entre 1972 y 1974, y organizador fundamental del regreso de Juan Domingo Perón a la Argentina luego de 17 años y dos meses de exilio, murió este domingo a los 80 años.

Padre de Juan Manuel Abal Medina hijo, quien fuera jefe de gabinete de Cristina Kirchner y, recientemente, candidato a legislador porteño, dejó un testimonio histórico a través de su libro “Conocer a Perón. Destierro y Regreso”.

Fue justamente su hijo quien este lunes confirmó la noticia a través de un breve mensaje en cuenta de X. «Lamentamos informar que en el día de ayer falleció Juan Manuel Abal Medina padre, sus restos se encuentran desde esta mañana en la bóveda de la familia. Que Dios nuestro Señor lo tenga en su gloria», posteó.

Fernando, el hermano menor de Abal Medina padre, fue uno de los fundadores de Montoneros, y señalado el ejecutor del general Pedro Eugenio Aramburu, ex presidente de facto, clave de la Revolución Libertadora.

Sobre el regreso de Perón, del cual fue artífice, Abal Medina relataba a Clarín ese momento, durante una entrevista en noviembre de 2022, cuando se cumplían 50 años del operativo retorno: “El General estaba absolutamente tranquilo. Perfecto estaba. Comió bien en el vuelo, se fumó su cigarrito. Y en el mismo momento en que el comodoro Salas sube al avión, Perón se adueña de la escena. Cuando quería, era terrible, tenerlo enfrente al General no era para cualquiera. La decisión terminante de la dictadura fue mandarlo al hotel de Ezeiza. Los 300 compañeros de la comitiva permitida para recibirlo estaban en una especie de corralito, a lo lejos. Cuando ve el corralito con la gente, ordena parar el auto. Y fue la primera foto que le sacan, la de Rucci con el paraguas”.

Lamentamos informar que en el día de ayer falleció Juan Manuel Abal Medina padre, sus restos se encuentran desde esta mañana en la bóveda de la familia. Que Dios nuestro Señor lo tenga en su gloria. pic.twitter.com/g8OeAB8p15

— Juan Manuel Abal Medina (@juanabalmedina) June 16, 2025

Como muchos de su generación, los Abal Medina nacieron y se formaron en un hogar con una tóxica atmósfera antiperonista, Sin embargo, eligieron la rebeldía del disenso y la libertad del camino propio, que sería diferente para ellos: iniciados ambos en el nacionalismo católico, Juan Manuel, a quien Perón designaría secretario general del Movimiento cuando sólo tenía 27 años, nunca adhirió a Montoneros.

Se hizo en la fragua del sindicalismo histórico, en particular bajo las figuras de Rucci y Lorenzo Miguel, prohombres de “la patria metalúrgica”, etiqueta emblema del desprecio montonero. Podría decirse, a modo de alegoría, que nació en 1945, el año fundacional del movimiento creado por Juan Perón.

Luego de los dos regresos, del gobierno de Cámpora y de la muerte de Perón, ante el presagio de la llegada de los años de plomo, y con la muerte pisándole los talones en un par de atentados, Abal Medina se asiló en la embajada de México un mes después del golpe, acompañado por su hermano Pablo y por Nilda Garre y luego de peregrinar por refugios transitorios para salvar su pellejo. Allí permanecería hasta que, en 1982, en plena guerra de Malvinas, le llegó el salvoconducto para dejar el país.

Abal Medina se radicó en Ciudad de México. Al principio tuvo un puesto menor en la Secretaría de Tráfico y Transporte, y serviría como agente del CISEN (Inteligencia del Estado Mexicano) entre 1988 y 1994, dirigido por el secretario de Gobernación, el capitán Fernando Gutiérrez Barrios.

También estableció un exitoso bufete de abogados en México, que más tarde abrió oficinas en España y Argentina.

A través de ese estudio, sería contratado por el empresario Carlos Slim, convirtiéndose en asesor jurídico de uno de los hombres más ricos del mundo, con quien también colaboro en su desembarco de negocios en el país.

En 2007, fue invitado por Néstor Kirchner para unirse al Gabinete de Cristina Kirchner. Escudándose en sus problemas respiratorios, rechazó el ofrecimiento aunque mantuvo sus lazos con el kirchnerismo.

-¿Por qué Perón no pudo disciplinar a Montoneros una vez que estuvo en el país?, preguntó Clarín.

-Porque hubo muchas situaciones desgraciadas como la unidad de Montoneros con las FAR, grupo de cuadros políticos más formados. Montoneros era un grupo de muchachos cristianos politizados. Las FAR eran cuadros marxistas con muy buena formación militar. Mazza y mi hermano Fernando fueron los únicos que fueron a Cuba a entrenarse militarmente… Y no entrenaban nada. Ahí fue cuando llegó el proceso de radicalización ideológica de Montoneros.