Jonatan Viale, re conocido periodista y figura de TN, se volvió el protagonista involuntario de una nueva polémica en redes sociales. El motivo: fue visto en Seattle, con la camiseta de River Plate, llegando al estadio para presenciar el partido frente a Inter de Milán por el Mundial de Clubes. Una imagen simple, pero suficiente para encender la furia de los hinchas millonarios tras la eliminación del torneo.

El contexto fue el siguiente: River perdió el partido por 2-0 y quedó afuera de la competencia. Las miradas se volvieron hacia aquel periodista que, justo en esa previa, fue captado por las cámaras. Y en un abrir y cerrar de ojos, se convirtió en tendencia. Algunos tuiteros recordaron la supuesta “mufa” que rodeaba a su padre, Mauro Viale, tildándolo de “jinx familiar”. En pocas horas “mufa Viale” fue trending topic.

La reacción en redes fue inmediata y sin filtro. Entre esos comentarios surgieron memes, comparaciones y hasta “bendiciones mufa”, como si la sola presencia de Jonatan hubiera significado un presagio de mala suerte para el equipo. Y no faltaron los que usaron humor negro: “Se viene la desgracia cuando Viale se prende a la previa”.

En Twitter e Instagram, los mensajes fueron contundentes. Diferentes usuarios comentaron que Jonatan ya es “la nueva figura mufa de River”. Algunos lo vinculan con su perfil mediático, señalando que “su potencia como influencer amplifica su rol de provocador”. Mientras tanto, otros buscaron lazo directo con su padre: “la sombra de Mauro siempre presente, ahora con el hijo”.

REDES EN LLAMAS

Curiosamente, ni el periodista ni su canal hablaron al respecto. No hubo descargo ni ironía mediática. Sin embargo, los hinchas, en modo autocrítico, cuestionan por qué algunos prefieren no exponer figuras ante la prensa cuando se juega algo importante.

Claro que todo esto responde a una lógica de hincha: la superstición. Se sabe que en el fútbol argentino abundan las creencias —camisetas, cábalas, peinados, el “¡No salgas sin afeitarte!”— pero asignar la etiqueta de mufa a una persona es un paso atrevido.

Algunos opinan que se trata solo de show y que la reacción mediática tiene más que ver con el folclore que con realidades. Pero también es cierto que —en un deporte tan pasional— cualquier disparador sirve para catarsis colectiva.

Lo cierto es que Jonatan ya pasó de periodista deportivo a jugador inesperado del mundo River–mufa. Pero esto no termina acá: si River vuelve a perder cuando él aparece, la historia se repetirá como meme eterno. Y si gana, quizás el asunto se borre… al menos hasta que se repita.

Sea como fuere, a esta altura es imposible ignorar la figura del periodista que visitó la previa en Seattle. En su rol, ahora es un invitado no deseado al altar de las cábalas millonarias.