El domingo se respiraba alegría en el Juventus Stadium. La Vecchia Signora había derrotado 2-0 al Parma y había comenzado con el pie derecho su debut en la Serie A. Sin embargo, la fiesta se vio cortada por un hecho repudiable: una porción de hinchas del cuadro visitante atacó con cantos racistas a Weston McKennie. La Juve, con contundencia, denunció el caso y comentó que lo acercará a autoridades de la justicia deportiva.

«Esta tarde, al finalizar el partido contra el Parma, Weston McKennie fue objeto de expresiones discriminatorias de carácter racista por parte de algunos presentes en el sector visitante, mientras entrenaba en el campo con sus compañeros que no habían participado en el encuentro. La Juventus condena enérgicamente este episodio y toda manifestación de racismo y garantizará la máxima colaboración con las autoridades de justicia deportiva para identificar a los responsables«, informó el cuadro de Turín en sus redes sociales.

El futbolista estadounidense había ingresado desde el banco en el minuto 89 por Kenan Yildiz, cuando el encuentro ya estaba liquidado 2-0 en favor del conjunto local. No obstante, esto no impidió el accionar reprochable de una pequeña parcialidad de fanáticos de Los Cruzados.

«El Parma Calcio, en referencia a los acontecimientos que tuvieron lugar anoche tras el partido disputado en el Allianz Stadium de Turín, condena firmemente cualquier forma de racismo y discriminación, tanto dentro como fuera del terreno de juego«, abrió el mensaje del club del norte de Italia.

Luego siguió al señalar: «La intolerancia racial, o cualquier otro tipo de comportamiento abusivo, NUNCA es tolerable ni aceptable y, por lo tanto, debe ser abordada, combatida y condenada en todo momento».

Por último, el comunicado cerró al sentenciar: «El presidente Kyle J. Krause, junto con todo el equipo, está plenamente comprometido con el fomento de una cultura basada en valores fundamentales como el respeto, la inclusión y la igualdad».