En la última emisión MasterChef Celebrity, la elaboración de una torta brownie pasó a segundo plano cuando Susana Roccasalvo dejó entrever cierta preocupación por su continuidad en el certamen. Allí mismo, Marixa Balli terminó siendo protagonista del inesperado conflicto al revelar que no formaba parte del grupo de WhatsApp que comparten varios participantes, lo que dejó un sabor más amargo que cualquier chocolate quemado.

La conductora, con gesto preocupado, lanzó frente a cámaras: “Les ruego que no me eliminen del grupo, realmente los extrañaría si lo hicieran”. El comentario, que buscó sonar cálido, generó una tensión silenciosa en el estudio, como si hubiera destapado algo que debía permanecer oculto. Las miradas esquivas y el silencio inmediato fueron más elocuentes que cualquier grito.

Enseguida fue Marixa Balli quien reaccionó, levantando las cejas con sorpresa y poniendo el dedo en la llaga: “¿A cuál grupo se refiere? Desconozco la existencia de uno y, por lo visto, no he sido incluida”. Su respuesta dejó helados a varios, revelando una grieta en la convivencia digital del show. El golpe fue directo, sin anestesia, y la expresión en los rostros de sus compañeros delató una incomodidad difícil de disimular.

A partir de ese instante, comenzó el festival del silencio. Los demás participantes se escondieron detrás de cucharas, batidores y hornallas como si algo en la cocina necesitara súbita atención. Nadie quiso aportar explicaciones, y la escena se volvió más picante que cualquier salsa especiada. La omisión fue brutal.

EL PROBLEMA CON MARIXA BALLI

Susana Roccasalvo, lejos de suavizar la situación, intentó sonreír tímidamente y hacer como si nada hubiera ocurrido, pero el daño estaba hecho. La pantalla mostraba más incomodidad que brownies. Y en tiempos donde un grupo de WhatsApp define afinidades, que alguien quede afuera no es un detalle menor.

Mientras las cámaras seguían grabando, la frase quedó flotando en el aire como una crítica velada, resonando con fuerza en el público: “¿Qué grupo de WhatsApp? Yo no estoy en ningún grupo. Me dejaron afuera”.

La tensión se apoderó del estudio de MasterChef Celebrity durante la noche de pastelería, uno de los desafíos más temidos por los participantes. Eugenia Tobal perdió la paciencia en pleno programa y protagonizó un fuerte cruce con Andy Chango, su compañero de competencia. Todo ocurrió cuando los concursantes debieron compartir la receta de una torta brownie, que se encontraba colgada en los extremos de las estaciones.

El caos comenzó cuando varios intentaron tirar la cuerda hacia su lado para poder leer los pasos, generando un tironeo colectivo que desató el malestar de Eugenia. Al ver que los del fondo, entre ellos Andy, no soltaban el papel, la actriz explotó y gritó a los cuatro vientos: “Esperen, esperen un poco. Soltá, ¡dale che! Pero soltá, soltá Andy”. Su tono elevó la tensión y todos quedaron en silencio por unos segundos.

Fuera de cámara, todavía enojada, Eugenia expresó su indignación con dureza: “Andy que no suelta la soga, no se puede”. El momento sorprendió tanto a sus compañeros como al jurado, que observó en silencio la escena. Damián Betular intentó calmar las aguas con una sonrisa incómoda, mientras Wanda Nara, conductora del ciclo, lanzó un comentario irónico para descomprimir: “Bueno, parece que el brownie viene con drama incluido”.

Andy Chango, lejos de quedarse callado, decidió responderle en el momento y le marcó los límites con un tono firme. “Pará, desde que era chiquito que no me hablaban así”, dijo, mirándola fijo. La frase tomó por sorpresa a todos y generó un murmullo entre los participantes. Eugenia, visiblemente molesta, intentó continuar con el desafío sin responder, pero el mal clima quedó instalado durante el resto de la competencia.

El jurado aprovechó el momento para recordar que el trabajo en equipo era clave en este tipo de pruebas. Betular señaló que “la pastelería requiere precisión, pero también paciencia”, mientras Martitegui agregó que “los grandes cocineros se reconocen por cómo manejan la presión”. Aun así, la situación dejó a Eugenia en el centro de la polémica, ya que su reacción fue uno de los temas más comentados en redes sociales.

Al finalizar el programa, los usuarios convirtieron el cruce en tendencia y muchos opinaron sobre el exabrupto. Algunos apoyaron la reacción de Tobal por considerarla justa, mientras otros destacaron la calma de Andy frente al conflicto. Lo cierto es que la actriz protagonizó uno de los momentos más tensos de la temporada, y su enojo quedó grabado como una de las escenas más explosivas del reality.

Después de varios meses de romance y una historia que parecía avanzar a toda velocidad, Tom Cruise y Ana De Armas decidieron ponerle fin a su relación. La noticia fue confirmada por el periódico británico The Sun, a través de una fuente cercana al entorno de ambos. Una bomba que sorprendió a todo Hollywood.

Cruise y De Armas habían hecho pública su relación recién este año, el pasado 14 de febrero, en pleno Día de los Enamorados. Desde entonces se mostraban inseparables: cenas románticas, viajes en helicóptero, escapadas por Europa y gestos que daban cuenta de un vínculo consolidado. Sin embargo, la historia tomó un rumbo inesperado.

Según explicaron en el periódico británico, el motivo de la ruptura de Tom y Ana habría sido una decisión que tomaron en conjunto. “Se llevan mejor como amigos. Tom y Ana se lo pasaron bien juntos, pero su tiempo como pareja llegó a su fin”, aseguró una fuente cercana al reconocido sitio.

El informante también explicó que, pese a la separación, no hubo escándalos ni conflictos en el medio. “Seguirán siendo buenos amigos, pero ya no están saliendo. Simplemente, se dieron cuenta de que no iban a llegar tan lejos y que estarían mejor como compañeros”, sostuvo, dejando en claro que el vínculo de Ana con el actor de Misión Imposible se transformó, pero no se quebró.

QUÉ SE ESCONDE DETRÁS DE LA SEPARACIÓN DE TOM CRUISE Y ANA DE ARMAS

Por otro lado, explicaron que “la chispa se había apagado entre ellos”, aunque todavía disfrutan de la compañía del otro. La buena relación que decidieron mantener tendría incluso una razón profesional. “Ella ya fue elegida para su próxima película, así que seguirán trabajando juntos”, señalaron. ¿Es un adiós definitivo o Cruise podría darse una nueva oportunidad con la cubana?

La relación entre Tom, de 63 años, y De Armas, de 37, comenzó a gestarse a comienzos de 2025 durante las reuniones de preproducción de Deeper, una película de ciencia ficción que ambos iban a protagonizar, aunque el proyecto quedó en pausa por temas presupuestarios. Desde entonces, la química entre ellos creció dentro y fuera del set.

En mayo, Cruise se había referido públicamente a ella por primera vez y la llenó de elogios. Consultado sobre su compañera, declaró que Ana era “muy talentosa, gran actriz dramática, cómica, con una habilidad tremenda y que aprende rápidamente”. Luego ella devolvió gentilezas: “Es muy divertido. Definitivamente, estamos trabajando en muchas cosas. Son varios proyectos, con los directores Doug Liman y Christopher McQuarrie y, por supuesto, Tom… Y estoy muy emocionada”.

A lo largo de su breve pero intensa historia, se los vio disfrutando de cenas en Londres, paseos por Vermont, escapadas en helicóptero a Madrid y travesías en yate por Menorca. Incluso, Tom llegó a compartir con el entorno más íntimo de Ana durante su cumpleaños número 37. Sin embargo, hoy ambos toman caminos por separados, aunque aseguran que todo se dio en buenos términos.