Jimena Barón nunca fue de guardarse nada en sus redes sociales, y la feliz llegada de Arturo -su segundo hijo, fruto de su relación con Matías Palleiro– no iba a ser la excepción. A tres semanas del parto, lanzó un fuerte posteo en su Instagram donde hizo una especie de catarsis que va del amor absoluto hasta la incertidumbre que tiene cada madrugada.

“Mido mi independencia en cantidad de lavados de pelo. Quién quiere independencia con este llaverito precioso que tengo?”, arrancó diciendo Jimena, acompañando la pregunta con fotos donde se la ve junto a su bebé, que está cerca de cumplir su primer mes de nacimiento.

Con ese sincericidio que tanto la caracteriza fue que Jimena también se animó a contar el pensamiento que por momentos la desarma: “A veces duerme y yo miro sus fotos en el teléfono porque lo extraño despierto y porque por momentos aún no puedo creer tenerlo y que sea mío (aunque sé que no es MÍO y que es un sentimiento que probablemente no esté del todo bien, creo que nunca voy a dejar de sentir un poco míos a mis dos hijos)”.

Pero lo que llamó la atención de todos fue el cambio de enfoque que tiene hoy la relación con su novio. Es que, desde que se encuentra abocada 24/7 al cuidado del pequeño Arturo, el vínculo con Matías se vio alterado en la dinámica como pareja y ella lo sabe. Porque si bien son grandes compañeros a la hora de criar a su bebé, hay parte de esa intimidad que bajó.

JIMENA BARÓN SE ABRIÓ SOBRE LA PRESIÓN QUE SIENTE CON SU HIJO ARTURO Y LAS CRÍTICAS QUE RECIBE

“El WhatsApp de pareja se vuelve muy random. Mi pareja que es mi equipo y este laburo juntos me llena de orgullo pero a veces lo extraño, no tengo del todo aceitados los tiempos y siento que no llego a estar con él como quisiera. Paciencia. Mucha. Y menos autoexigencia Jimena”, dijo Barón, hablándose a sí misma, bajando esas expectativas en medio de mamaderas, pañales y bostezos.

Pero si algo tiene a Jimena a prueba constante es la alimentación del bebé: “La lactancia es preciosa pero no es fácil. El bebé come cada 2/3 horas pero contando lo que tarda en comer (y el provechito) estás prácticamente dando teta todo el día. Izquierda, derecha, derecha, izquierda dijo la pueri…alabadas sean las puericultoras”.

También es verdad que las redes se convirtieron en un espacio para las críticas y opiniones libradas al azar, donde hasta llegaron a juzgar a Jimena por su rol de maternar: “Difícil compartir en redes sobre maternidad porque todo se lee como queja y te critican al instante. Y si quisiéramos quejarnos? Muy probablemente no dormirnos o nos duele una teta, o la espalda, o nos hubiese encantado comer con las dos manos pero justo el bebé se durmió…”.

Y disparó contra esos comentarios que definitivamente no suman: “Si dejas al bebe, cómo lo vas a dejar? Si lo tenés todo el día encima, cómo vas a tenerlo todo el día encima? Lo estás malcriando. Y te dicen con mucha soltura que lo estás criando mal (si pensamos en la literalidad de la palabra). Sigue siendo difícil ser mujer. Deberíamos ser más gentiles entre nosotras, pienso… Paciencia”.

“Y después salgo de redes y vuelvo a mi pedo galáctico de estar embobada con este ternerito, y el papá, y Torino (que fue el más damnificado por los celos) y Momo hermano mayor me derrite el cerebro directamente. Y Mari con cachorro nuevo y mi mamá abuela y la luz y la felicidad que hay en casa con este solcito de invierno que nació para iluminar todo aún más”, siguió Barón, ya saliendo de ese caos cotidiano y disfrutando de lo que la rodea.

Por último, Jimena cerró su posteo con un tierno mensaje hacia su bebé: “Te amo Arturo mi llaverito precioso. Te miro tomar la teta, te miro dormir conmigo y lloro, y te peino con el dedo índice porque sos tan chiquito que voy a cuidarte toda mi vida porque para mí siempre vas a ser chiquito, como tu hermano. Mis cachorritos”.