Desde hace un tiempo el abogado y representante legal de Wanda Nara está en la mira tras quedar involucrado en un escándalo mediáticamente por ser denunciado públicamente por presuntas estafas siendo la primera acusación de la familia del futbolista Gonzalo Montiel.

Tras ese pedido de justicia del lado del jugador la justicia intimó a que lo procesen y embarguen. Sin embargo, no fue detenido porque la jueza no lo creyó necesario. Siendo que salieron a la luz otros casos como el de  dos abogadas que le reclaman 600 mil dólares, muchos se comenzaron a preguntar por qué la empresaria mediática y Elían Valenzuela aún siguen junto a Nicolás Payarola.

A lo que luego de hacer algunas averiguaciones fue Yanina Latorre quien aportó información exclusiva sobre lo que llevaría a Nara y L-Gante a continuar con el asesoramiento del letrado acusado de tantas estafas… y lo que los retiene sería por un apriete.

“Yo creo que Wanda está extorsionada. Está demasiado muda. Tiene una cosa: por más que esté enojada te habla igual porque entiende el juego y sabe”, comenzó la conductora de SQP y siguió: “A me alguien me contó que…se acuerdan cuando L-Gante se agarró a las trompadas con su representante, Maxi el Brother, habría sido porque Maxi el Brother se queda con el 70 por ciento (de las ganancias del artista), lo cual me parece una locura”.

¿LO TIENEN EXTORCIONADO A L-GANTE?

“El tema es que L-Gante no puede dar vuelta esa situación porque lo tienen extorsionado con un video muy complejo que no voy a decir el motivo porque…parece ser que Payarola sería socio de Maxi el Brother, y entre los dos triangularían la guita y se la sacan a L-Gante”, remarcó Latorre.

Finalmente, ante el interrogante de por qué Wanda no le suelta la mano al abogado acusado de estafas Yanina cerró: “Lo tienen extorsionado con un video que si se conoce habría un gran quilombo familiar dentro de la familia de L-Gante. Voy hasta ahí porque es complicadísimo”.

La maternidad suele estar repleta de momentos únicos, irrepetibles y profundamente emotivos. Para Sol Pérez, uno de esos instantes llegó de forma inesperada, en la intimidad de su hogar, mientras compartía una mañana de juegos con su hijo Marco, de apenas dos meses.

Sol Pérez, modelo y abogada, que recientemente se convirtió en madre por primera vez junto a su pareja Guido Mazzoni, vivió un episodio que la dejó conmovida y que decidió compartir con sus seguidores: su bebé, según ella, habría dicho “hola”. Y aunque la ciencia pueda poner en duda esa posibilidad, Sol eligió creer.

A casi dos semanas del nacimiento de Arturo, Jimena Barón compartió un emotivo momento de intimidad familiar: una imagen donde se la ve haciendo colecho junto a su bebé y su gato. La escena, que publicó en sus redes sociales, rápidamente generó reacciones de cariño por parte de sus seguidores.

La artista había dado a luz el 13 de junio, fruto de su relación con Matías Palleiro, y esta nueva postal familiar volvió a emocionar a su comunidad virtual. “Se van sumando individuos al colecho”, escribió sobre la foto que publicó en Instagram Stories.

En ella se puede ver a Arturo profundamente dormido, con una almohadilla separándolo de Torino, el gato de la familia, que descansa en la misma pose. La imagen transmite un clima de tranquilidad y ternura, en una etapa de evidente conexión emocional para la cantante.

Además, fiel a su estilo descontracturado, agregó con humor: “Sigo acá, intentando hacer e budín”, dejando en claro que, aunque la maternidad requiere tiempo y energía, no ha perdido su frescura ni su capacidad para reírse de las pequeñas situaciones cotidianas.

EL DRAMA DE JIMENA BARÓN CON SU NUEVO HIJO

“Ya siendo mi segundo hijo toca hacer mea culpa. No sé bien qué haré yo que tengo bebitos a los que no puedo ni apoyar en camas/cunas/huevitos/cochecitos y que solo quieren estar colgando de mis tetas. No agarran chupete (hacen arcadas muy exageradas), porque en realidad el chupete soy yo”, sostuvo Jimena.

Y agregó: “OJO, no lloran y duermen como koalas pero colgados de las tetas. Probé, sí, y sigo probando técnicas y lugares, pero al igual que con Momo me resulta más fácil ponerme el fular y andar con el chico colgando. Debe ser que tanto no me jode tenerlo pegado. Es tan precioso y chiquito”.