Julieta Poggio, la querida ex Gran Hermano 2022, vive un presente intenso: después de blanquear su relación con el modelo y creador de contenido Fabrizio Maida en Bariloche, se animó a hablar –sin vueltas– sobre los detalles de su vínculo y el estilo “open mind” que eligieron para amar.

Fabrizio, también conocido como Fabri Maida en redes, se dedica al modelaje y genera contenido digital. El joven “trabaja como creador de contenido” y es modelo; además mostró su perfil más íntimo en Instagram e incluso LinkedIn, donde cuenta sus trabajos en distintos ámbitos.

Comenzaron a verse en mayo de 2024, pero la pareja oficializó el romance en agosto durante su viaje a Bariloche. En esas fotos encantadoras compartidas por ambos en un hotel de montaña, quedó plasmado que la química no faltaba. El posteo de Fabrizio con un “Escapadita con mi amorchh. Te amo”, fue una señal para todos: Juli estaba feliz y dispuesta a mostrarlo.

Nada de noviazgos celosos y posesivos: Julieta y Fabri viven una relación abierta y ella no se tapa. En una charla, Juli explicó que esta modalidad es “una relación abierta desde el comienzo, sin vueltas ni ataduras». Y agregó: “Lo manejo demasiado bien. Lo recomiendo ciento por ciento. Me sirve mucho”. Clarito, ¿no?

¿RELACIÓN ABIERTA? PUM, AL DESCUBIERTO

La historia no arranca ahora: se conocen desde la adolescencia, tienen química de vieja data — se cruzaron desde los 16, “chapábamos en el boliche”— y retomaron la conexión más canchera, con “amigos con derechos” que evolucionó a algo más real.

Julieta contó que la relación abierta significa que ambos pueden “chapar con esa persona, besarse… pero eso no cambia el amor”. Porque si lo hacen sin enamorarse, no produce daño. Lo dice con gracia: “Un chape es un chape”.

Para los que pensaron que esta libertad era sin control, Juli lo aclaró: tienen reglas. Primero, cuidan la salud sexual. Para ella, es la “regla número uno”: preservativos siempre, chequeos, sin lugar a confusiones.

Segundo, priorizan la relación principal. No se cancelan planes por otro encuentro y mantienen el compromiso intacto. “La otra persona es la primera siempre en todo. Nunca cancelo por salir con otro”, explicó. Y por último, confían a pleno. Juli lo sintetiza: “Las personas con las que nos revolcamos no me interesan, no las amo… el amor grande es con él”.

La modelo no se guarda nada, se desmorona si la critican. En diciembre de 2024, se quebró en vivo por mensajes que la acusaban de no estar enamorada. Dijo: “Para mí es la persona más importante”, y se sintió herida por los juicios. “Es muy feo que me juzguen… soy muy sensible”, le confesó a su audiencia.

Se nota que empezó una rutina con el streaming Rumis, donde se abre al mundo: ahí reflexiona, llora y defiende su amor genuino por Fabrizio. Lo suyo es honestidad curativa.

Porque encontraron un modelo que les da confianza, autoestima y libertad. Juli lo repite: “No hay vuelta atrás. Me cuesta mucho la monogamia otra vez”. Y remata con decisión: este es un amor sano, que no se apaga por un beso casual ni por encuentros que no marcan un lazo emotivo.