Santiago del Moro está con la paciencia al límite. A la par de que cada tanto lo cuestionan en su rol de conductor de Gran Hermano, todos los días se encuentra con durísimas críticas al programa al que él y muchas personas más le dan todo. Horas de vida, de trabajo, de sueño, infinidad de esfuerzo.

Por eso, hacia el fin de la gala de nominación del 3 de abril, en el momento más caliente de la noche, Del Moro se descargó al aire. «Este es un programa muy costoso, porque la casa en la que viven los chicos es un estudio de televisión que no para nunca, en el que trabajan técnicos y productores durante toda la semana en distintos turnos”, empezó.

Santi señaló que GH recauda mucho y que gracias a él se financian otros programas y muchas personas viven del reality. Muy serio, siguió: «Creo que nos critican porque mide 20 puntos. Pero es un fenómeno que se hace con personas que trabajamos de esto, hacemos lo que nos sale. La podemos pifiar, pero lo hacemos de corazón»