Benjamín Vicuña y Anita Espasandín eligieron Mendoza para disfrutar de una escapada romántica que combinó gastronomía, paisajes y momentos de ternura. La pareja compartió en redes sociales una serie de postales que reflejaron la calidez de su viaje y el vínculo que los une.

Desde almuerzos en bodegas hasta caminatas entre jardines floridos, el recorrido estuvo cargado de detalles y gestos de amor. El paseo comenzó con una comida en un reconocido restaurante mendocino, donde se los vio relajados, compartiendo copas de vino y sonrisas.

Las fotos, con una cuidada estética y un ambiente íntimo, mostraron una mesa decorada con detalles locales y un mensaje que resumía el espíritu del viaje: “Respirá, disfrutá, te estábamos esperando”.

Durante la jornada, Anita registró a Vicuña admirando el paisaje natural, rodeado de rosas, árboles y palmeras. Al notar la cámara, el actor respondió con un beso que desató ternura entre sus seguidores. La secuencia reflejó la complicidad de la pareja, que prefiere mantener un perfil bajo, pero no oculta los momentos felices que comparten.

Ya entrada la noche, el paseo continuó por la capital mendocina, donde posaron frente al cartel luminoso de “Ciudad de Mendoza”. En otra de las fotos, Benjamín sumó una frase divertida y romántica escrita en la pared: “Tómate esta botella conmigo y en el último trago nos vamos”, un guiño que muchos interpretaron como un mensaje directo para Anita.

Durante su estadía, la pareja se mostró completamente relajada y conectada con el entorno. Entre almuerzos al aire libre, recorridos por bodegas y paseos entre viñedos, disfrutaron de cada instante sin ocultarse, dejando ver la complicidad que los une y el equilibrio que encontraron lejos del ritmo acelerado de la ciudad.

Entre paisajes soñados, vinos locales y gestos de cariño, Vicuña y Espasandín demostraron que su relación atraviesa un gran momento. Su viaje por Mendoza se convirtió en una verdadera celebración del amor, la calma y los pequeños placeres compartidos lejos del ruido mediático.

Las fotos de Benjamín Vicuña y Anita Espasandín en Mendoza:

El tiempo pasa volando, y así como si nada, Indiana Cubero llegó a sus 17 años. La hija mayor de Nicole Neumann y Fabián Cubero comenzó su día como toda adolescente: compartiendo en sus redes los saludos que fue recibiendo. Historias de Instagram llenas de fotos, mensajes de cariño y recuerdos que reflejan lo mucho que creció.

Entre los saludos más tiernos a Indiana estuvieron los de sus hermanas, Allegra y Sienna, que eligieron hacer collages llenos de momentos compartidos. También se sumaron su tía Geraldine, la hermana de Nicole, y su abuela Ángela, madre de Fabián Cubero, quienes le dedicaron palabras cargadas de amor.

Pero el mensaje que nadie esperaba fue el de Manu Urcera, el esposo de su mamá, con quien Indiana tuvo un pasado complicado. Esto se remonta a una supuesta y conflictiva relación que la adolescente tenía con el piloto de automovilismo en la convivencia. De hecho habría sido el detonante para que la joven decidiera dejar de vivir con Nicole y mudarse con Fabián Cubero, su papá.

Urcera publicó una foto junto a la adolescente y escribió: “Feliz cumple”, acompañado de un emoji de manos formando un corazón. La respuesta de Indiana fue inmediata: lo reposteó con dos corazones rojos. Una pequeña pero significativa señal de que las cosas entre ellos parecen haber cambiado para bien.

EL SALUDO DE MANU URCERA A INDIANA CUBERO POR SU 17º CUMPLEAÑOS

Por supuesto que este intercambio virtual en las redes no pasó por alto para nadie. Sin dudas esta postura que ambos tomaron parece indicar que han firmado la paz, al menos por ahora. Y es que, durante mucho tiempo, Indiana y Manu estuvieron en el centro de una tormenta familiar que tuvo expectantes a todos.

Meses antes del casamiento de Nicole y el piloto, la adolescente tomó una decisión fuerte: se fue de la casa materna y se mudó con su papá, en medio de una denuncia por maltrato que generó un enorme revuelo. Aquel episodio marcó un antes y un después en el vínculo con su madre, y también salpicó al corredor, señalado como parte de un clima tenso en el hogar.

Con el tiempo, todo pareció mejorar. Indiana hizo las paces con Nicole y, según trascendió, la modelo y Cubero lograron ponerle fin a años de enfrentamientos gracias a un acuerdo formal. Pero esta tan ansiada calma no duró demasiado: una nueva denuncia del exfutbolista contra la expanelista de Los 8 escalones volvió a encender la interna familiar.

El conflicto, según trascendió, habría comenzado por el incumplimiento del acuerdo de vacaciones. Desde el lado del ex Vélez acusan a Nicole de no respetar las fechas pactadas, impidiendo que las chicas pasaran tiempo con su padre y pudieran despedirse de su abuelo, Carlos, antes de su muerte. Un golpe fuerte que generó un nuevo escándalo.

En medio de esa tensión, el gesto de Indiana hacia Urcera se sintió como una bocanada de aire fresco. Un cumpleaños distinto, cargado de señales, donde cada historia compartida pareció decir más de lo que mostraba.

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Una escena llena de ternura y emoción se vivió en la última emisión de La Noche de Mirtha. La conductora recibió a varios invitados destacados, pero el más especial de todos fue, sin dudas, Vicente, el hijo de la periodista Carolina Amoroso, que hizo su primera aparición pública con apenas un mes y ocho días de vida.

En los últimos minutos del programa, Mirtha interrumpió la charla con una sonrisa y anunció: “Tenemos otro invitado a la mesa: Vicente, el bebito. ¡La primera vez que tenemos un bebé! Éramos vírgenes de bebé, ¡qué divino!”, dijo la diva, desatando risas y aplausos entre los presentes.

Conmovida y orgullosa, Carolina presentó a su pequeño, que descansaba tranquilo en brazos. “Tiene un mes y ocho días. Es grandote, muy grande. Nació con cuatro kilos. Le doy el pecho, pero mezcladito, porque es muy demandante Vicente, así que necesitamos un refuercito”, contó entre risas.

Mirtha, encantada con el momento, agregó con ternura: “Es el invitado más chico que hemos tenido”, mientras los invitados celebraban la dulzura del gesto y la naturalidad con la que la periodista compartió su nueva faceta como mamá.

La presencia de Vicente cerró el programa con un clima completamente distinto: cálido, familiar y cargado de emoción. La imagen de Carolina sosteniendo a su bebé generó una ola de comentarios positivos en redes sociales, donde los usuarios destacaron tanto la ternura del momento como el carisma de la conductora por hacerlo posible.

Muchos televidentes remarcaron que Mirtha, a sus 98 años, sigue sorprendiendo con su capacidad para generar instantes únicos en la televisión argentina. Y esta vez, lo hizo desde un lugar de pura sensibilidad, mostrando a una madre primeriza compartiendo con orgullo y alegría una de las etapas más lindas de su vida.

Entre risas, amor y ternura, la noche de Mirtha tuvo un cierre diferente, que quedará en la memoria de los espectadores. Vicente se convirtió en el invitado más pequeño en la historia del programa, y sin quererlo, también en el protagonista de uno de los momentos más dulces de la televisión del año.