Nicolás Cabré volvió a tocar el tema de su ex pareja, la China Suárez, en una entrevista con Héctor Maugeri para Caras TV, y sus declaraciones generaron repercusión. El actor dejó muy en claro que no siente que deba juzgar su vida: “Yo no opino sobre la vida de los demás, no soy quién para opinar sobre la vida de los demás”, aseguró.

En ese sentido, Cabré subraya que su prioridad es su hija Rufina, fruto de su relación con Suárez. “Rufi es lo único que me importa, y yo la veo sonreír… y a mí me hace muy feliz”, afirmó con sinceridad.

Respecto al vínculo entre Suárez y Mauro Icardi, Cabré fue también muy claro: “Tuve muy poco contacto”, dijo, y añadió que aunque puede no estar de acuerdo con algunas decisiones, respeta “la elección de la madre” de su hija.

Cuando le preguntaron si alguna vez le reclamó por las exposiciones mediáticas, su respuesta fue aún más firme: “Es una elección, y la vida de ella la maneja ella… yo no tengo opinión ni potestad para decir absolutamente nada».

NICOLAS CABRÉ FIRME SOBRE LA VINCULACIÓN CON LA CHINA SUÁREZ

Sobre los mensajes que recibió tras el viaje de Rufina a Turquía con su madre e Icardi, Cabré admitió sentirse atacado por muchos usuarios: “La prioridad siempre es y será Rufi”, según contó en otras entrevistas.

El actor también habló del acuerdo que mantiene con Suárez tras la mudanza de su hija a Estambul. En esa línea, comentó que cuando puede hablar con ella por videollamada, que la extraña, pero que está “muy tranquilo” porque siente que Rufi está cuidada.

Por último, Cabré reflexionó sobre su rol como padre: “Ser padre es ponerle el pecho … si a alguien le tiene que doler algo, sos vos”, reconoció, y enfatizó que para él, la decisión de Rufina es libre, sin culpas, porque “esa decisión es de ella”. 

Cada envío de Ahora Caigo es una caja de sorpresas. El programa que conduce Darío Barassi en la pantalla de El Trece genera todo tipo de multiversos y las líneas temporales exceden la dinámica habitual de un concurso televisivo. En esto, tiene mucho que ver la impronta del presentador, siempre dispuesto a llevar el humor al límite, y las actitudes de los participantes, quienes entienden este código a la perfección.

En la última emisión, todas las miradas se las llevó Ariel, un joven de 25 años y de profesión barbero, quien llegó acompañado por su esposa. “Llevamos dos años y medio de casados”, señaló el joven, mientras la cámara ponchaba a su esposa y el conductor manifestaba su sorpresa por la juventud de la pareja. De inmediato, quiso saber cómo se habían conocido, y fue el comienzo de una trama inesperada.

“Yo estaba estudiando para sacerdote. Después salí, la conocí a ella y ahí dejé…”. Las risas se apoderaron del estudio y las cámaras volvieron a apuntar a la esposa, que se defendió. “Ya no era sacerdote cuando lo conocí”. Entonces, Barassi intentó recapitular los hechos. “Vos te propusiste para el seminario, sentiste el llamado del señor, pero de repente te llamó otra cosa y le dijiste chau al señor y te fuiste a atender esa otra cosa”, simplificó.

Ariel asintió cada una de estas afirmaciones, pero todavía tenía más argumentos que ofrecer a la trama. “También cambié de religión. Antes era católico y ahora soy cristiano evangélico”. Barassi no daba crédito a lo que escuchaba, más cuando el relato se trasladó a la adolescencia del protagonista: “Hice el liceo militar de los 12 a los 17 años, viví un rato en Córdoba y me vine para acá. Estudié para sacerdote, después me fui de mochilero y conocí a Sol”.

Darío se mostró muy interesado por la historia y quiso saber si los padres del joven habían avalado todos estos cambios. “A los 12 me fui de casa y no volví más, pero está todo bien con ellos”, señaló con una sonrisa. Y volvieron al presente, para situar la historia en la barbería que comparten y atiende él, mientras ella trabaja de niñera. “Una historia de lo más normal”, ironizó el conductor, para dar por cerrado el tema y continuar con el programa.

Lo que ocurrió con Ariel es una de las tantas aristas que ofrece Ahora Caigo, más allá de lo estrictamente relacionado con el concurso. En una emisión pasada, tuvo lugar uno de los momentos más sentidos en lo que va del ciclo con la presencia en el estudio de Beatriz, una participante venezolana que llegó acompañada de su hija y su esposo con un solo objetivo: cumplir el sueño de conocer al conductor.

Durante el programa, Beatriz se tomó un momento para compartir parte de su historia de vida en el país. Relató que su esposo lleva ocho años viviendo en Argentina, y que ella junto a su hija llegaron seis años atrás, justo antes de los hechos que marcaron al mundo entero. “Entrando a la pandemia, te conocimos por 100 Argentinos. Me sacaste de una depresión bárbara”, reconoció ante Barassi y el público. El conductor, visiblemente sensibilizado, le respondió:“Bueno, amiga, para eso estamos”. Beatriz le agradeció de corazón frente a cámaras: “Es un sueño para mí estar acá”.

El intercambio, marcado por gestos de afecto, humor y gratitud, dejó en claro el impacto emocional que el entretenimiento televisivo puede generar, especialmente para quienes encontraron en el programa un refugio y compañía en los momentos más difíciles.

La China Suárez pasó unos días por Argentina y armó un enorme revuelo. A partir de sus entrevistas en los programas de Mario Pergolini y Moria Casán, en donde salpicó un escándalo contra Benjamín Vicuña, aún siguen trascendiendo diferentes detalles.

En esta ocasión, desde el ciclo de Moria revelaron un video inédito de la China y en donde le hizo un pedido contundente a Mauro Icardi. Dado a que el futbolista decidió acompañarla, ella dejó en claro que necesitaba tenerlo cerca.

“Baby, ¿te ponés de este lado? Así te veo. Yo necesito verlo”, se la escuchó decir a María Eugenia. A partir de esa revelación, Moria tomó la palabra y expresó su opinión; con su lengua karateca, la diva no se guardó nada.

Analizando lo que vio, fue tajante con sus palabras: “Perdón, pero ella tiene dependencia emocional por él. Él necesita, ella necesita. Yo se lo dije ‘vos tenés un estilo medio geisha. Tenés una dependencia emocional’. Porque es todo”.

LA REVELACIÓN DE LA CHINA SUÁREZ EN SU ENTREVISTA CON MORIA CASÁN

“Lo mira, pero no como si estuviera sometida, como para complacerlo. Pero bueno, no se da cuenta. Ella dice que no tiene dependencia emocional. Para mí tiene dependencia emocional”, sentenció la conductora.

Cabe destacar que diferentes especialistas en el lenguaje de señas y símbolos, que se expresan con el cuerpo a la hora de expresarse, notaron ciertas polémicas entre la China y Mauro. Empero, esta no deja de ser su relación y así es como se entienden.

Diferentes usuarios al notar este video, no tardaron en expresarse en redes sociales. En total desacuerdo por cómo se manejan, también notaron al igual que Moria, una fuerte dependencia de la China en el plano emocional.