El Aston Villa del Dibu Martínez consiguió un triunfazo ante el Bournemouth. No solo porque la victoria lo deja a tiro en la pelea por la clasificación a la próxima Champions League, sino por cómo se dio. Y es que el equipo de Marcos Senesi y Julio Soler (ambos integraron el banco, el surgido en San Lorenzo entró en los últimos 15 minutos) planteó un 4-4-2 con Scott adelantado para taparle la salida limpia a los de Unai Emery. Así, el primer tiempo fue totalmente peleado y trabado, con más faltas que fútbol.

Tal es así que el partido no parecía de Premier League. Quejas, faltas y muy poco fútbol, generando un partido nulo de chances en la primera parte. Pero claro, el Villa, que como contraparte buscaba no arriesgar para no sufrir sobresaltos, se apoyó en sus individualidades. Marco Asensio empezó a ganar control en el medio campo, mientras que la sólida defensa encabezada por Onana hizo que le visita se empezara a parar cada vez más adelante.

Por eso, en la última de esa primera parte, Watkins puso el 1-0 definitivo. Aprovechando una salida en falso de Semenyo, que perdió con Rogers, generó que el volante tirara un centro milimétrico para que el goleador Watkins no perdonara. Una jugada que intercaló entre el máximo anotador del equipo (16 goles) y el máximo asistidor (10). Ya antes había avisado con una gran jugada de Asensio, que con un tiro esquinado impactó el palo izquierdo de Kepa, quien pocos minutos después se lució con un atajadón a Kamara.

Pero no hay victoria asegurada sin intervención del Dibu Martínez. Y es que en un segundo tiempo sin sobresaltos, la expulsión de Ramsey por doble amarilla a los 35′ del segundo tiempo traspapeló los planes. El Bournemouth se lanzó con todo al ataque, apelando a la calidad de Kluivert y buscando que Evanilson pudiera concretar un empate que lo dejara con chances de meterse en copas europeas. Pero ahí apareció el arquero de la Selección, porque cuando la solidez defensiva centrada de Onana empezó a desmoronarse, el 1 que tiene el 23 en la espalda le sacó un disparo a quemarropa a Semenyo en la última jugada del partido. Fue tal el atajadón, que Jebbinson se perdió el rebote abajo del arco, al no esperarse el desvío de la pelota que generó el arquero.

Y es que el resultado dirá que fue 1-0, pero esa tapada valió como un gol más. Porque el Dibu logró mantener el cero en una victoria que es clave para el Aston Villa, ya que si bien logró entrar a copas internacionales, el objetivo es meterse en la Champions League. Por eso, este triunfo le mete presión al Chelsea ya que los Villanos ahora se ubican sextos con 63 puntos, los mismos que los Blues, que solamente mantienen ese último cupo al principal certamen de la UEFA por la diferencia de gol (+21 contra +7).

De todos modos, los de Enzo Maresca saldrán a jugar este sábado ante el Newcastle sabiendo que tienen al Aston Villa pisándole los talones. Y en parte eso es gracias al Dibu, ya que sin esa atajada la clasificación a Champions no estaría tan cerca como lo está ahora.