Un recibimiento puede ser histórico, generar un enorme impacto y dar la vuelta al mundo y, a su vez, generar una consecuencia económica para el club. Esto, en resumen, fue lo que ocurrió con la recepción que los hinchas de River armaron en el ingreso del equipo ante Atlético Mineiro en el Monumental en la vuelta de la semifinal de la Copa Libertadores del año pasado que el CARP finalmente no pudo superar.

Aunque en aquel momento dirigentes, fanáticos, Gallardo y todos en el club sabían que la utilización de bengalas estaba prohibida por la Conmebol, decidieron correr el riesgo. Y la consecuencia fue una severa sanción del organismo sudamericano, que incluyó una multa económica de u$s 195 mil dólares y la imposibilidad de que en la noche de este martes se juegue con público el partido contra Barcelona de Ecuador.

Ahora bien: en términos de billetes, ¿cuánto es el dinero que en Núñez se pierden de ganar en materia de venta de entradas y otros ingresos aleatorios? Según los cálculos que hicieron los dirigentes millonarios ante la consulta de Olé, esa cifra oscila entre los u$s 900 mil y u$s 1 millón.

Para ponerlo en dimensión, sumado a la multa es un monto similar al que le pagaron a la U de Chile como resarcimiento por la salida de Gonzalo Tapia. O el presupuesto futbolístico anual de los clubes más poderosos de la Primera Nacional.

Es por esto, que a la lógica frustración de no poder contar con el aliento de las 85.018 personas en el primer partido de local de la Libertadores 2025, algo que supone un impulso para el equipo reconocido por los propios futbolistas y hasta el entrenador, desde la tesorería de Núñez también lamentarán no poder contar con ese importante ingreso que va a la caja del CARP cada vez que se llena el Monumental.

Sacando la pandemia -ciclo en el que River disputó 57 partidos sin público, de los que ganó 29, empató 16 y perdió 12-, el antecedente más reciente del CARP jugando en el Monumental sin gente fue es el del año 2020. En aquella ocasión, el equipo de Marcelo Gallardo goleó 8-0 a Binacional a puertas cerradas, que River había recibido una sanción tras el famoso reclamo de Boca en el TAS.