Raiko Arozarena, arquero titular de la selección de Cuba y actual jugador del Las Vegas Lights, no podrá disputar las eliminatorias mundialistas con su país por las políticas migratorias impulsadas durante la administración de Donald Trump en Estados Unidos.

Según reportaron los medios locales, el futbolista debió abandonar la concentración justo antes del duelo ante Bermudas por la Liga de Naciones de Concacaf, que también sirve como fase clasificatoria al Mundial. Aunque reside legalmente en EE.UU. y no llegó como migrante, las normas impuestas desde la era Trump han generado obstáculos burocráticos que afectan, incluso, a quienes tienen compromisos internacionales.

La Asociación de Fútbol de Cuba (AFC) informó que la decisión de que Raiko no jugara el partido ante Bermudas se basó en el riesgo al que el arquero se podría exponer ante las nuevas medidas migratorias que restringen la entrada desde la isla a EE.UU, donde reside.

Arozarena, quien se formó en los Venados de Yucatán y debutó como profesional en 2018, fue una pieza clave para Cuba en la pasada Copa Oro y en el proceso clasificatorio rumbo a la Copa del Mundo 2026. Sin embargo, las restricciones de ingreso a territorio estadounidense para ciudadanos cubanos han terminado por marginarlo de la convocatoria.

La situación provocó un golpe tanto para el cuerpo técnico cubano como para el propio Arozarena, quien había consolidado su lugar como titular desde 2022. Su club, Las Vegas Lights, también recomendó evitar riesgos migratorios, ante posibles complicaciones para su reingreso al país.

Desde este lunes, están vigentes las nuevas restricciones migratorias impulsadas por el presidente Donald Trump. Estas afectan a ciudadanos de 19 naciones, incluyendo a los cubanos.

Dichas medidas, justificadas por el gobierno bajo el argumento de proteger la seguridad nacional, forman parte del enfoque más rígido en materia migratoria adoptado por la actual administración republicana.

Cuba afrontará ese partido con la mira puesta en sellar su clasificación a la tercera fase de las eliminatorias mundialistas de la Concacaf, donde consiguió medio boleto tras vencer 1-0 como visitante a Antigua y Barbuda.

El encuentro, que se jugará en el estadio Antonio Maceo de Santiago de Cuba, será clave para que la selección mantenga vivo su sueño de llegar a una Copa del Mundo. Desde 1982, la isla no alcanza las etapas finales de las clasificatorias en la región.

Por su parte, la AFC señaló que, aunque las nuevas reglas migratorias contemplan ciertas excepciones para residentes permanentes, el caso de Arozarena refleja claramente cómo estas restricciones y el ambiente de presión que las rodea afectan negativamente al deporte.