El Atlético Madrid dio un golpe sobre la mesa y no solo logró una victoria importante frente al Athletic Bilbao, sino que, además, aprovechó la caída del Real Madrid ante el Betis para tomar la punta de la liga española. Y como siempre, Diego Simeone no pasó por alto ni un detalle de lo ocurrido en el Metropolitano.

Con una sonrisa de satisfacción, el Cholo valoró lo hecho por sus jugadores, destacó a un Julián Álvarez que está en modo intratable y apuntó al gran objetivo: la Champions League, en la que este martes enfrentan a su rival de la ciudad, el Merengue, por la ida de los octavos de final.

«Siempre es difícil el Athletic. Un rival complicado, que venía de muchos partidos sin perder», así comenzó Simeone su análisis sobre el partido ante el Bilbao. Los rojiblancos se enfrentaron a un equipo que no perdía desde hacía 16 partidos y que, a pesar de la derrota, mostró ser un adversario de temer.

El Atleti, sin embargo, logró superar la presión rival con inteligencia y determinación, y aunque el encuentro estuvo parejo en muchas fases, el Cholo supo resaltar los detalles que marcaron la diferencia. «Gracias a los jugadores. Están haciendo un trabajo extraordinario tanto los que inician el partido, como los que entran del banquillo y también los que en ocasiones no juegan», dijo el técnico, reconociendo el esfuerzo colectivo.

Simeone, fiel a su estilo, destacó la importancia de los cambios y cómo, en este tipo de partidos, cualquier detalle puede ser determinante. «En el segundo tiempo apareció la diosa fortuna del larguero y de tener a Julián en nuestro equipo», expresó, refiriéndose a la gran intervención de Oblak y el buen momento de Álvarez, que fue fundamental para el 1-0 final.

El técnico también habló sobre el trabajo de los futbolistas que no tuvieron tanto protagonismo últimamente, como Riquelme, Lemar o Witsel, pero que siguen apoyando al equipo desde su lugar. «Es la base fundamental para poder acercarse a las cosas más bonitas», remarcó, dejando claro que todos suman en su idea colectiva.

El gran protagonista del partido fue, sin dudas, Julián Álvarez. Simeone no escatimó en elogios para el delantero cordobés, que sigue demostrando ser un refuerzo clave en este Atlético de Madrid. «Cuando supimos que estaba confirmada su llegada nos pusimos muy contentos. Llegó un jugador diferente, diferencial, como lo hicieron Luis Suárez y Villa en su momento», dijo el Cholo, refiriéndose a la calidad de la Araña, que desde su llegada es un pilar fundamental para el equipo.

El entrenador argentino resaltó la humildad de Julián, que a pesar de ser una gran estrella, siempre se muestra dispuesto a trabajar y esperar su momento, ya sea en el campo o desde el banquillo. «Me gusta mucho su humildad para jugar en una posición o esperar en el banquillo», añadió.

Simeone también se refirió a la fase del año en la que se encuentra el Atlético. Con la pelea por el título y la Champions League más vivas que nunca, el Cholo es consciente de que cada partido será una verdadera prueba de desgaste. «Entramos en una fase del campeonato que se necesitan piernas», dijo, haciendo alusión a la importancia de los recambios y de mantener el nivel físico en un calendario exigente, con partidos cada tres días.

El deté sabe que la clave está en la rotación, pero también en la actitud. «Acá hay que correr», afirmó, dejando claro que el esfuerzo físico será crucial para seguir adelante en todas las competiciones.

Y claro, no podían faltar las preguntas sobre el clásico de la Champions League que se viene: el Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Pero, como todo buen estratega, el Cholo prefirió disfrutar del presente antes de pensar en el futuro. «Déjame disfrutar de este partido… ¿qué hora es, las 10?», preguntó entre risas, antes de darse cuenta de que ya era casi medianoche. «Las 12 menos cuarto», le respondió un periodista. «¿12 menos cuarto?», dijo el Cholo, con tono sorprendido, y todos soltaron una risa nerviosa.

El técnico, claro, estaba más centrado en lo que acababa de lograr su equipo. «La importancia es como termina la temporada. Estamos atravesando el camino», concluyó Simeone, con la mirada puesta en lo que viene, pero sin perder de vista el trabajo colectivo.

Simeone destacó, además, que la base del éxito del Atleti está en la solidez defensiva y en la capacidad de crecer como grupo. «Nos centramos en lo que viene ahora. Tenemos que seguir fortaleciendo el trabajo colectivo de los jugadores», aseguró. En un campeonato tan competitivo, el Cholo sabe que no hay espacio para relajarse y que lo más importante es mantenerse firme en su estilo de juego: «Tratamos de ser un equipo y crecer como grupo».

Con este triunfo, el Atlético Madrid no solo se mantiene en la lucha por el título, sino que también está mirando con mucha confianza el desafío de la Champions League. Y mientras Simeone disfruta de este momento, la presión ya está sobre el Real Madrid. Porque si algo sabe el Cholo, es que para conseguir algo grande, no solo se necesita esfuerzo, sino también tener a jugadores como Julián Álvarez, que marcan la diferencia y te pueden llegar a dar un triunfazo como el de hoy.

Gustavo Quinteros, el director de orquesta detrás del Vélez que ganó la Liga Profesional 2024, se fue expulsado del encuentro que Gremio y Juventude protagonizaron este 1° de marzo, por la vuelta de las semifinales del Campeonato Gaucho. ¿El motivo de la roja? Un golpe que el entrenador argentino le asestó a un jugador rival.

El hecho tuvo lugar sobre el final del compromiso, cuando el tiempo de reposición ya se había acabado y un cúmulo de futbolistas rodeaban al árbitro, con protestas de toda clase. A ese grupo se sumó más adelante el deté del tricolor, aunque Ênio (extremo izquierdo de la Papada) lo interceptó tomándolo del brazo. Esto derivó en un forcejeo entre ambos, con Quinteros observando al colegiado e intentando hablarle. Sin embargo, en el hartazgo, le pegó al atacante con el dorso de la mano.

Desde luego que esto embraveció aún más las aguas, obligando incluso a la intervención policial. Varios de Juventude fueron a increpar al santafesino, mientras que sus dirigidos aparecieron para protegerlo. Concluida la gresca, el hombre del silbato decidió echarlo. Más adelante se pudo observar que dialogó con el delantero: las cámaras enfocaban como este último le enseñaba el labio superior aparentemente partido, mientras que Quinteros le explicaba de forma airada su punto de vista.

Tras superar las semifinales, Gremio espera en la final del Campeonato Gaucho al ganador de la otra llave, que enfrenta al Internacional contra Caxias. En la ida fue victoria del conjunto de Puerto Alegre en condición de visitante, por 2-0, por lo que tiene pie y medio en el cruce decisivo. Sin embargo, antes deberán afrontar la vuelta, este sábado desde las 21:30.

Por la Copa de Brasil, el Tricolor se medirá ante Athletic Club de São João del-Rei, el miércoles 12 de marzo a partir de las 19:30. Finalmente, en lo que al Brasileirão respecta, este iniciará el 29 de marzo. ¿La primera parada de Quinteros y sus dirigidos? Contra Atlético Mineiro, en casa, con horario aún por definir.