Llegó la fecha FIFA, el fútbol de selecciones y antes de retomar las competencias las novedades por estos días están siendo la gran cantidad de bajas. Alejandro Garnacho, Paulo Dybala y Nicolás González en la Selección Argentina. Vinicius, Militao y Alisson en Brasil. Dani Carvajal, Rodri, Ferran Torres, Dani Olmo, Nico Williams en España. Dayot Upamecano y Mathys Tel en una Francia que le dio descanso a Kylian Mbappé. O una Inglaterra que evalúa liberar a Harry Kane por problemas físicos. La realidad de lo que viene siendo un inicio de temporada en la que en Europa se puso el grito en el cielo por el aumento de la cantidad de partidos en un calendario repleto de competencias de clubes y de selecciones y que les está pasando factura a los futbolistas una vez más.

La principal queja está contra la UEFA y la FIFA, nada menos. En el Viejo Continente se amplió el número de encuentros en la Champions League y la Europa League, en donde los 36 participantes pasaron de tener seis encuentros a ocho y podrían sumar dos más en caso de quedar en zona de playoffs por un lugar para octavos de final. El otro torneo es el más controversial y es la novedad, el nuevo ‘juguete’ de la FIFA como el súper Mundial de Clubes que se jugará en junio de 2025 en Estados Unidos, cuando las competencias locales y la temporada estén finalizadas alterando totalmente los planes.

“Creo que la UEFA y la FIFA deben de cuidar más a los jugadores. A todos nos encanta el fútbol y ver a los jugadores a pleno rendimiento. Creo que habría que reducir el número de partidos”, se expresó últimamente Hansi Flick, el entrenador alemán del Barcelona que viene de perder a Ferran Torres el fin de semana y suma una enfermería con Marc Ter Stegen, Andreas Christensen, Ronald Araújo, Gavi, Dani Olmo o Fermín López. De hecho, en LaLiga sólo perdió un partido de nueve y fue cuando puso un equipo completamente suplente para tener descanso. “Proteger a los jugadores es mi responsabilidad”, agregó Flick ese día. Una modalidad que comparten varios de los grandes del fútbol europeo.

El Real Madrid, por caso, ya se quejó con Carlo Ancelotti al punto que el italiano planea darle días de descanso rotativos a sus futbolistas durante la competencia para compensar. Más aún después de la gravísima lesión de Dani Carvajal: “rotura del ligamento cruzado anterior, rotura del ligamento colateral externo y rotura del tendón poplíteo en su pierna derecha”. Mínimo, un año de baja… Es cierto, se lastimó por una jugada fortuita y desafortunada que ocurrió en el minuto 93, otra de las cuestiones que se puso de moda: mucho tiempo adicionado que estiran aún más los encuentros.

Como nunca, los jugadores fueron los que demostraron su descontento. “Sí, creo que estamos cerca de una huelga. Si esto sigue así, no nos quedará otra opción. Es algo que nos preocupa”, había dicho Rodri, el referente de España y del Manchester City. Cinco días después de eso se rompió los ligamentos cruzados en una rodilla… Pep Guardiola, otro que ya se había manifestado en contra, anunció medidas propias. “La próxima vez que juguemos por la Copa de la Liga voy a poner al segundo equipo. Lo aviso ahora”, dijo sobre el cuarto torneo en importancia en Inglaterra y la congestionada agenda.

“Nadie pregunta a los jugadores sobre jugar más partidos, quizá nuestra opinión no importe”, se sumó Allison, quien no estará con la Verdeamarela por un tema muscular. Este mismo fin de semana fue sorpresivo que Lisandro Martínez, clave en el Manchester United, fuera suplente frente al Aston Villa con tanto en juego. “Rotación”, fue la explicación del DT Erik ten Hag en el mismo equipo en el que Garnacho luego sintió molestias en una rodilla. Lautaro Martínez es otro ejemplo de regular: fue suplente en los dos primeros partidos de Champions y descansó en otro en Serie A cuando el Toro, por ejemplo, jugó todos los encuentros del Nerazzurro en la campaña 2022/23, sin falta. El entrenador Simone Inzaghi lo dijo también, hoy también hay que medir las cargas.

En cuanto a selecciones, después de la Eurocopa acaba de comenzar la UEFA Nations League, un torneo menor pero aún así de carácter oficial y que puede tener su influencia para las Eliminatorias mundialistas que comenzarán en marzo de 2025 (un equipo que quede mal allí podría jugar el repechaje en caso de hacer una buena Nations League). Un calendario que está tan apretado que, por ejemplo, no encuentra lugar para confirmar la disputa la Finalissima, ese partido que deben jugar Argentina por ser campeón de la Copa América frente a España, ganadora de la Euro. Justamente de la Roja que jugó aquella final hay seis jugadores que no podrán estar ahora por lesión, más de la mitad del equipo. Si los técnicos de las selecciones tienen poco a los futbolistas, para colmo están limitados también por las condiciones físicas y el descontento de los clubes cada vez que los tienen que ceder y poner en riesgo.

La problemática está planteada. Las voces se alzaron. Y desde la UEFA y la FIFA por ahora hay silencio. Lo que falta es resolver una cuestión compleja de acuerdo a compromisos económicos que también repercuten en los salarios de los futbolistas. Es decir, una reducción de partidos a futuro podría hacer que también ganen menos. Por lo pronto, el escenario está sobre la mesa por los propios protagonistas. ¿Los escucharán?