Si hubo un futbolista del que se habló en los últimos días, ese fue Paul Pogba. Al francés, quien había sido suspendido cuatro años por doping en septiembre del 2023, se le redujo esa sanción recientemente, por lo que podrá volver a las canchas en marzo del 2025. Reconoció que la pasó muy mal el último tiempo, pero que nunca le faltó el cariño de los fanáticos ni de otros colegas y amigos, entre los que incluyó a Paulo Dybala.

«Fue un año muy difícil. Me sentí como un león enjaulado. En cierto momento quise irme de Italia con mi familia porque esta situación me dolía demasiado el corazón», señaló en principio el francés, en diálogo con La Gazzetta dello Sport.

Luego, indicó que, a pesar de los malos momentos vividos, nunca le faltó el apoyo de los fanáticos ni de sus colegas y amigos: «Nunca me ha faltado el cariño de la afición. Muchos compañeros del pasado y del presente siempre me han apoyado. Cuadrado me llamaba cada dos días y siempre me hacía reír. Dybala me envió muchos mensajes. Y luego Vlahovic, McKennie, Weah, Kean… No esperaba tantos, también porque todos tenemos nuestros propios problemas en la vida cotidiana».

Aún tiene contrato con la Juventus hasta 2026 y es por eso que se mostró ya deseoso por jugar, al punto que mencionó que hasta está dispuesto a rebajar su sueldo para poder regresar a las canchas con la Vecchia Signora. «Estoy dispuesto a rebajarme el salario para poder volver a jugar en la Juventus. Soy jugador de la Juventus y me preparo para jugar en la Juventus. Seguro va ser un nuevo Pogba, incluso mejor que antes. Más hambriento, más sabio y más fuerte», indicó.

Pogba, quien fue campeón del mundo en 2018 con su selección, contó que anhela también con volver a ponerse la camiseta azul: «Jugar un Mundial es un sueño. Lo hice y lo gané. Volver a la selección francesa es un objetivo, por supuesto, pero hay que ser realista, hoy no juego y tengo que ganarme mi lugar»

«Hablará el terreno de juego y luego Thiago Motta (DT de la Juventus) juzgará con sus propios ojos, basándose en lo que vea. Hablar es bonito, pero yo quiero jugar y tanto en la ‘Juve’ y en Francia quiero ser el mejor», apuntó.

«Asumo la responsabilidad de lo que pasó. Tomé un suplemento y no lo comprobé tres veces, aunque viniese de un profesional. Si me tenían que castigar, lo acepto, pero no debería de haber sido cuatro años. Soy una persona sincera y no soy un tramposo. Me gusta ganar de forma justa. No me gusta perder, pero no soy un tramposo«, cerró el galo.

Vale recordar que Pogba había sido sancionado por ingerir DHEA (ayuda a la recuperación muscular), aunque, como explicó, no la consumió de manera intencionada, sino que fue consecuencia de tomar erróneamente un suplemento que le había recetado un médico en Florida.

Según la defensa de Pogba, el facultativo trata a varios deportistas estadounidenses e internacionales de alto nivel y tenía conocimiento de las obligaciones antidopaje del futbolista francés en cumplimiento del Código Mundial Antidopaje. Aunque no tuvo los cuidados necesarios con Paul, quien basó sus argumentos para que le reduzcan la condena a partir de ese aspecto.

El mediocampista arribó al club al club el 27 de julio del 2012 y allí permaneció hasta 2016. Luego de un paso por el Manchester United, volvió a la Juventus en el 2022 y es desde ese entonces que sigue como futbolista del club. Lleva disputados en la Vecchia Signora un total de 190 partidos, además de 34 goles y 41 asistencias según Transfermarkt. Con este club, ganó cuatro Serie A, tres Supercopas italianas y dos Copas de Italia