ECONOMIA
Reportan fallas en pagos y transferencias por la caída de un servicio web global: afecta a apps bancarias y billeteras digitales

La mañana del lunes, un incidente con Amazon Web Services (AWS) repercutió de manera directa en la operatoria de pagos digitales, transferencias y servicios bancarios a lo largo de Argentina. De acuerdo con el panel AWS Health Dashboard, la empresa identificó un problema en una puerta de enlace regional situada en la costa este de Estados Unidos y sostuvo que “la mayoría de las solicitudes deberían estar funcionando ahora”, declaración emitida poco más de dos horas después de difundir la primera actualización sobre el incidente. Según informaciones proporcionadas a Infobae, usuarios empezaron a reportar incidencias desde poco después de las 7:30 a.m., hora de Londres, a partir de registros de Downdetector.
Los reportes hablan de transacciones que no se pueden concretar, viajes afectados en el Subte porteño, comercios de pequeñas y grandes superficies que tienen dificultades para cobrar de manera electrónica y hasta apps o home banking con severas fallas.
El servicio de AWS, propiedad de Amazon.com Inc., respalda la infraestructura tecnológica de una proporción considerable de internet global, manteniendo alrededor de un tercio del comercio mundial de servicios en la nube. Cualquier dificultad en su disponibilidad impacta sobre un amplio espectro de empresas y organismos gubernamentales, como reflejan los incidentes de la jornada. El problema escaló cuando distintos bancos locales informaron a este medio sobre fallas en sus propias aplicaciones, sistemas de homebanking y procesos de pago, afectando a clientes y empresas en plena operatoria diaria.
En el contexto local, la magnitud del evento llevó a consultas al Banco Central, cuyo último reporte disponible seguía figurando como vigente a las 13.20 al momento de cierre de esta nota, sin que se confirmaran nuevos partes oficiales. La actualización de la situación puede variar en función de la reanudación total del servicio informático y la normalización de los canales digitales de pagos y transferencias. Pero la vigencia de los reportes implican que el sistema todavía presentaba fallas pasado el mediodía.
Un proveedor principal de servicios de pago del país comunicó de manera confidencial a Infobae que sus sistemas sufrieron alteraciones significativas derivadas del inconveniente técnico en AWS. Esta circunstancia se evidenció también en la web oficial de Amazon, donde la lista de servicios comprometidos incluyó a Mercado Libre y, de modo aún más relevante para el público local, a Mercado Pago, una de las plataformas de pagos digitales más utilizada en el país.

La propagación del evento tuvo repercusiones en otros servicios digitalizados de alta demanda, en especial durante horarios bancarios y comerciales clave. Usuarios de banca online y apps referentes a entidades financieras nacionales experimentaron demoras, caídas y bloqueos tanto para la gestión de transferencias como para el pago de servicios y consumos varios. Esta problemática se trasladó de inmediato al usuario cotidiano, que no pudo completar operaciones básicas de pagos digitales o acceder a su dinero a través de plataformas habituales.
La afectación a Mercado Pago, de acuerdo con información verificada por este medio, se reflejó en fallas dentro de la aplicación y problemas en el procesamiento de transacciones. Este escenario implicó, entre otras consecuencias, retrasos y rechazos en la mayoría de las formas de pago electrónico fuera del sistema de tarjetas físicas. Comercios y empresas que emplean este ecosistema reportaron dificultades para acreditar pagos y consultar saldos.
“Mercado Libre y Mercado Pago reconocen que hubo una inestabilidad en sus aplicaciones, provocada por una falla generalizada y extendida en el sistema de AWS. Nuestros equipos están trabajando rápidamente para restablecer el sistema”, dijeron voceros de la empresa a este medio.
Las complicaciones también alcanzaron el transporte público en grandes ciudades. Usuarios del subte denunciaron en redes sociales y distintas plataformas la imposibilidad de pagar viajes mediante tarjeta de crédito, NFC y otros medios digitales alternativos a la SUBE. Esta traba expuso un cuello de botella importante en la digitalización de los servicios urbanos, ya que muchos pasajeros dependieron de estas alternativas para movilizarse.
El problema es global. Empresas de tecnología financiera, tales como Coinbase y Robinhood, también debieron admitir complicaciones. Informaron públicamente que la caída de AWS interrumpió parte de sus sistemas y afectó la experiencia de sus usuarios. La firma de inteligencia artificial Perplexity declaró que el incidente compromete la estabilidad de su sitio web. Incluso sectores no estrictamente financieros, como el club de fútbol inglés Tottenham Hotspur, debieron advertir a sus aficionados sobre problemas en el sistema de boletos electrónicos.
El alcance de la caída no se limitó únicamente al sector privado. Un vocero de la HM Revenue & Customs (HMRC), la autoridad tributaria británica, confirmó que el sitio institucional permanecía fuera de servicio por efecto del colapso de AWS, dato que validó Infobae en base al monitoreo realizado hacia las 13.20. Este tipo de incidentes revela la magnitud de los riesgos asociados a la infraestructura crítica global interconectada.
De acuerdo con los registros históricos recientes, sistemas globales de alto impacto como AWS cada vez muestran mayor sensibilidad ante fallos técnicos. El año pasado, una actualización de software defectuosa en CrowdStrike Holdings Inc. causó demoras y cancelaciones de vuelos junto con la caída de miles de sistemas críticos en distintos países, lo que derivó en millonarias pérdidas en la economía internacional.
ECONOMIA
Más pizza, menos bife de chorizo: el Financial Times destacó la crisis de los restaurantes y la caída del turismo extranjero por la inflación en dólares

El Financial Times destacó en una nota este sábado la fuerte reducción de la asistencia a restaurantes por parte de los argentino y la caída del ingreso de turistas extranjeros al país, en el marco de una economía en que la inflación pasó de más del 25% mensual en diciembre de 2023 a cerca del 2% en los últimos meses, con un tipo de cambio que encareció los precios en dólares.
El medio británico contrasta el “auge” de los restaurantes durante la crisis inflacionaria de 2023, cuando los pesos “quemaban” y la gente se apuraba a gastarlos, incluso en comidas afuera, con la relativa estabilización económica, que ilustra con el caso de Ya Cabrón, un local de tacos en Palermo, que debió cerrar en junio, debido a la abrupta caída de la demanda. Nicolás Molano, su gerente, explicó que en los últimos dos meses atendían a 15 personas por día y algunos días llegaron a servir una sola mesa. “Intentamos todo, pero simplemente era insostenible”, explicó al medio inglés.
Según el FT, el cambio de fortuna del sector gastronómico refleja el impacto del programa económico del presidente Javier Milei. La desaceleración de la inflación, dice, permitió que muchos argentinos empiecen a ahorrar y a financiar compras importantes. Al respecto cita el dato del Indec de que las ventas de electrodomésticos aumentaron casi 400 % en el primer semestre 2025 sobre igual período de 2023. El alivio inflacionario, agrega, fue producto de un ajuste severo. Millones de personas restringieron gastos, los salarios reales cayeron, se recortaron subsidios a la energía y el transporte y 3 de cada 4 argentinos redujeron sus salidas a comer fuera, según una encuesta de marzo pasado.
La nota cita que según el FMI el PBI argentino crecería 4,5% este año, pero el nivel de actividad hizo pico en mayo y desde entonces se estancó y da incluso signos de contracción. Sebastián Menescaldi, director de la consultora EcoGo, explicó al FT que, aunque la gente ya no siente que la plata “se quema en el bolsillo”, pero tampoco dispone de más recursos.
A su vez, la apreciación del peso y la pérdida de poder adquisitivo del dólar afectó otro pilar de ingreso de los restaurantes: el turismo extranjero, porque la Argentina -dice el FT- se convirtió en uno de los destinos más caros de América Latina, lo que provocó una caída del arribo de visitantes extranjeros. Al respecto, cita a Daniel Prieto, expresidente de la asociación de restaurantes y hoteles de Buenos Aires, quien reconoce que la estabilización era necesaria, pero “tiene daños colaterales, y nuestro sector es uno de los más afectados”.

El artículo precisa que entre julio y septiembre los restaurantes porteños atendieron a un 20 % menos de comensales en relación a igual periodo de 2023, antes de la gestión de Milei. No es un colapso, dijo Prieto, pero el gasto promedio por cliente también habría disminuido, presionando los márgenes de rentabilidad.
Al respecto, informes del Instituto de Estadística y Censos de CABA (Idecba) relevados por Infobae marcan que la estadía promedio de los turistas extranjeros se redujo de 14,2 días en el cuarto trimestre de 2023 a 13,2 en el tercero de 2025, mientras el gasto promedio en dólares aumentó de 77,5 a 84,9 dólares por día. En el caso de los turistas brasileños, el principal contingente, las variaciones fueron más abruptas: la estadía promedio se redujo a 10,9 a 8,9 días y el gasto promedio diario pasó de 85,6 a 106,7 dólares, un 24,6% más
El cambio de fortunas no se limitó a Buenos Aires. La nota del medio británico señala que en Mendoza las bodegas reportaron una fuerte caída de visitantes, pues el costo allí de un fin de semana largo “supera los miles de dólares”.
Además, el relativo fortalecimiento del peso empujó a los argentinos al exterior. en el primer semestre de 2025, precisa el FT, casi 62 % más argentinos tomaron vacaciones en el exterior que un año antes. También cita a Fidel Pérez, dueño de los bares BierHof y Casa Seis, quien dijo que los proveedores aumentaron el precio de la cerveza local “Patagonia” hasta tres veces por mes en 2024, llevando el precio de un vaso a casi 11.000 pesos “Llega un punto en que el cliente ya no lo acepta”, dijo Pérez, que cerró Casa Seis en agosto.
Un ejemplo aún más contundente citado en la nota es el del precio promedio de un bife de chorizo con guarnición en Buenos Aires: pasó de $7.200 en septiembre 2023 a $30.500, lo que expresado en dólares significó un aumento de 9,40 a a 21,90 dólares, un 133% más caro, dicen datos del gobierno porteño.

Según el artículo, la inflación crónica, agravada tras la pandemia por la emisión masiva de pesos para financiar el gasto público, impulsó desde 2022 una rápida expansión de la oferta gastronómica de gama media y alta en CABA, alimentada por la afluencia de turistas y el exceso de liquidez. Esos mismos restaurantes son ahora los más golpeados.
“Los márgenes han sido aniquilados”, dijo Marcelo Boer, propietario de las marcas de ceviche Barra Chalaca y La Mar y de la cadena Hells Pizza, al FT. Según Boer, muchos empresarios no previeron un cambio tan drástico al abrir, lo que llevó a un exceso de locales y por eso -anticipó- “un gran número se prepara para cerrar”. La ola de cierres se refleja en que ya hay locales disponibles a un tercio de lo que eran sus valores habituales.
Mientras, el consumo se desplazó a opciones más accesibles, como pizzerías y comedores baratos, que resisten mejor la crisis. Pero todos aumentaron sus precios, pues los costos laborales, de alimentos y de alquiler se mantuvieron altos, incluso cuando las presiones inflacionarias empezaron a moderarse en 2024.
La caída en cerca de un 20% del ingreso de turistas extranjeros agravó la cuestión. Alex Pels, propietario del restaurante de carnes Fogón, popular entre turistas, dijo al FT que el número de clientes disminuyó cerca de un 30 % en los últimos meses en relación a 2024 y reflexionó: “Los últimos años fueron históricos para el turismo y los restaurantes, pero era algo artificial; en algún momento, la fiesta iba a terminar”.
.com,diario,imparcial,perfil,puntocom,restaurante
ECONOMIA
La fábrica de las ollas indestructibles atraviesa su peor crisis: 30 despidos y producción frenada

El ajuste no es menor para una empresa que construyó su identidad sobre la fabricación nacional, la calidad artesanal y el empleo metalúrgico
22/11/2025 – 12:25hs
La abrupta caída del consumo interno y el avance de las importaciones empiezan a dejar huellas profundas en la industria metalúrgica. Una de las señales más contundentes es la situación que atraviesa Essen, la tradicional fábrica de artículos de cocina de fundición de aluminio —popularmente asociada con las «ollas indestructibles»—, que en los últimos días concretó el despido de 30 trabajadores en su planta de Santa Fe y comenzó a reemplazar buena parte de su producción local por productos terminados provenientes de China.
El ajuste no es menor para una empresa que durante décadas construyó su identidad sobre la fabricación nacional, la calidad artesanal y el empleo metalúrgico. Los 30 despidos, que representan alrededor del 10% del total del personal productivo, marcan un punto de inflexión en un sector golpeado por la recesión y la apertura comercial. La compañía confirmó que cerca del 45% de la producción local será sustituida por artículos importados, un cambio drástico que detuvo líneas de ensamblaje y redujo la demanda de componentes internos.
Un repliegue forzado por el derrumbe del consumo
El origen del conflicto se remonta a la retracción del consumo, que en los últimos meses impactó con fuerza en los bienes durables y, especialmente, en los productos de precio medio y alto que integran el segmento donde compite Essen. Las ventas de artículos de cocina vienen registrando caídas interanuales pronunciadas, afectadas por la pérdida de ingresos reales, la reducción del crédito al consumo y el encarecimiento del financiamiento en cuotas.
Con un mercado interno debilitado, la empresa optó por una estrategia de reducción de costos que incluyó la importación de productos terminados desde China, una alternativa que hoy se vuelve más económica que sostener la totalidad de la producción nacional. Para los trabajadores, sin embargo, la decisión representa una amenaza directa al empleo y un síntoma de un proceso de desindustrialización que podría profundizarse si las condiciones económicas no mejoran.
«Ha bajado la producción y los trabajadores lo ven día a día en sus puestos de trabajo», advirtió Oscar Infante, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Venado Tuerto, quien denunció que la empresa estaría aprovechando la crisis para aplicar un programa de achicamiento estructural.
Según el gremio, las complicaciones comenzaron cuando Essen decidió frenar la fabricación de componentes que antes producían internamente, lo que dejó a operarios sin tareas asignadas y derivó en los despidos.
En Santa Fe, el reemplazo de piezas nacionales por partes importadas empezó a notarse hace meses, pero la decisión de elevar ese porcentaje al 45% implica un cambio profundo en el modelo productivo.
Para el gremio metalúrgico, el riesgo es claro: cada punto porcentual de sustitución por importaciones equivale a menos horas de trabajo local, menos puestos operativos y una mayor dependencia externa. En el caso de Essen, una empresa que supo ser emblema de la industria de fundición y que durante décadas hizo bandera de la fabricación nacional, el giro hacia productos importados tiene un impacto simbólico significativo.
Un síntoma de algo más amplio: preocupación por efecto contagio
La incertidumbre no se limita a Essen. Infante, el dirigente de la UOM, advirtió que otras empresas importantes de la región podrían atravesar procesos similares en las próximas semanas. Según señaló, la compañía Corven, otra de las grandes empleadoras metalúrgicas de Santa Fe, estaría evaluando la cesantía de alrededor de 40 trabajadores a raíz de la misma combinación de factores: demanda deprimida, costos internos crecientes y un flujo de importaciones más libre y competitivo.
El sindicato teme un «efecto contagio» en distintas ramas de la metalurgia, especialmente en aquellas que dependen de la producción en serie y requieren volúmenes sostenidos para mantener la rentabilidad. Las empresas que trabajan para el mercado interno enfrentan un escenario especialmente complejo: ventas en baja, dificultad para trasladar aumentos a precios y un dólar que, aun sin grandes saltos, permite a los importadores colocar productos a valores difíciles de igualar en la fabricación local.
iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,despidos,metarlurgia
ECONOMIA
Cuánto se ahorraron quienes esperaron que vuelva a subir el dólar para comprar un auto 0 km

El mercado automotor argentino de noviembre tiene más preguntas que respuestas. Al comienzo de la semana, con un primer balance de mitad de mes, las ventas de autos 0 km estaban más bajas de lo esperado –un 20% por debajo de octubre-, lo que encendió las alarmas en las fábricas, que llegaron a reprogramar objetivos de ventas ante una proyección prevista para este mes de poco más de 38.000 unidades en total. Ello habría significado un retroceso que va más allá de la estacionalidad, cercano al 25%.
Entre las razones de este inesperado comportamiento de los compradores, se trazaron varias hipótesis, aunque la mayoría de los operadores coincidió en señalar que los fabricantes aumentaron los autos en noviembre en un promedio del 3,5% justo cuando el dólar bajó más de lo imaginado. Esto generó una distorsión que dejó los autos nacionales o importados de Brasil en precios muy altos en dólares, desfasados de la realidad de los usuarios.
“Es posible que muchas personas hayan comprado dólares a $1.500 imaginando que podía seguir subiendo, e hicieron un pésimo negocio. Hay que entender que la mayoría de los compradores de autos 0 km son ciudadanos que se refugian tradicionalmente en el dólar, y más aun si tienen en vistas comprar un auto nuevo”, dijo el director de ventas de una terminal a Infobae.

Las marcas volvieron a apostar por la financiación a tasas subsidiadas en noviembre, pero la baja de las tasas que impulsó el Gobierno todavía no impactó en las dos semanas de principios de mes. Pero más allá de ese tecnicismo, quien compra un auto con tasa 0% está financiando el 50% del auto en dos años, pero tiene que pagar el otro 50% del capital en efectivo. Ese es el ahorrista que tiene dólares y que, antes de cerra la operación, mira la cotización del dólar para saber si es buen momento o si conviene esperar.
Entre miércoles y jueves, con el dólar nuevamente en alza, se reactivaron muchas ventas y el corte de este jueves muestra una recuperación con ventas ahora un 13% por debajo de octubre.
“Los que esperaron tuvieron razón en los últimos dos días hábiles de la semana, porque el dólar volvió a subir cerca de los $1.450. Entonces sí tuvo un poco más de sentido. Uno piensa que son $35 por dólar, pero en la suma, dependiendo el segmento de auto, se pueden ahorrar entre USD 900 y USD 1.500, si venden a $1.415 o a $1.450”, dijo el mismo ejecutivo.

Tomando la referencia de los autos más vendidos en lo que va del mes en todas las categorías, los números explican más claramente la diferencia entre uno y otro negocio.
El Toyota Yaris tiene un precio intermedio entre sus tres versiones de $34.686.000. Si se compraba con un dólar de $1.415 representaba USD 24.513, pero si se compra con una cotización oficial de $1.450, requiere utilizar USD 23.921. El ahorro para el comprador por esperar dos semanas fue de USD 592.
Siempre tomando el precio de la versión intermedia de cada modelo, si esa misma cuenta se hace con un Peugeot 208, el ahorro habría sido de USD 637, con un Fiat Cronos, USD 611, con un Chevrolet Onix, USD 572, y con Volkswagen Polo, de USD 675. En contrapartida, el Renault Kwid, el auto más barato del mercado que se vende en $25.616.000 habría permitido un ahorro de USD 437.

En la categoría de los SUV, que tienen precios más elevados y, por lo tanto, marcan más diferencia según la cotización, los modelos de referencia son el Volkswagen Tera, que lidera el segmento luego de dos semanas. Si bien este auto es el más accesible de Volkswagen, más barato que el Polo, es el SUV en el que menos diferencia se puede apreciar con ambas cotizaciones. Tomando un precio promedio de $38.422.000, el ahorro habría sido de USD 655.
En esta misma categoría de autos, el Chevrolet Tracker tiene una diferencia a favor del dólar alto de USD 737, el Ford Territory, USD 876, el Peugeot 2008, USD 811, el Toyota Corolla Cross, USD 913, el Renault Kardian, USD 690 y el Volkswagen Taos, USD 1.080. En un extremo de los SUV, un Toyota SW4 marcaba más diferencia, USD 1.478.

Por último, en los utilitarios, si se compraba una Toyota Hilux con dólar bajo se habrían necesitado USD 38.989 y con un dólar alto USD 38.048, un ahorro de USD 941. Si la operación era con una Ford Ranger, el ahorro habría sido de USD 939, y con una Volkswagen Amarok, USD 1.054. Entre las pick-up compactas, una Fiat Toro ahorraba USD 947 y una Ford Maverick USD 1.083.
Otros utilitarios de referencia son un furgón Mercedes-Benz Sprinter con un precio promedio de $65.000.000 habría generado un ahorro de USD 1.110, o un Renault Kangoo USD 733.
POLITICA3 días agoLa Justicia limitó las visitas a Cristina Kirchner en su prisión domiciliaria
POLITICA3 días agoMilei prometió acelerar las reformas, pero advirtió sobre la reactivación económica: «La mejora en el bolsillo va a ser paulatina»
ECONOMIA3 días agoFrávega, en crisis: : cierra más locales y es de las empresas más denunciadas de Argentina











