El viernes, el presidente Joe Biden bloqueó polémicamente la propuesta de adquisición de US Steel, con sede en Pittsburgh, por parte de la japonesa Nippon Steel, por valor de casi 15.000 millones de dólares, cumpliendo así un compromiso que había contraído en la campaña preelectoral.

«Necesitamos que las grandes empresas estadounidenses que representan la mayor parte de la capacidad siderúrgica del país sigan liderando la lucha en nombre de los intereses nacionales de Estados Unidos», afirmó Biden en un comunicado.

Una fuente interna del Gobierno japonés ha asegurado en exclusiva a ‘Euronews’ que «Nippon Steel ha explicado que esta adquisición es un esfuerzo de las empresas siderúrgicas japonesa y estadounidense por combinar tecnologías avanzadas y aumentar la competitividad, y que contribuirá a mantener la capacidad de producción de y el empleo en Estados Unidos».

Related

Esta fuente también se refirió a la tendencia al alza de las inversiones de Japón en EE.UU., así como a las «fuertes preocupaciones» planteadas por las comunidades empresariales de ambos países, en particular el sector industrial japonés,» sobre las futuras inversiones entre Japón y EE.UU.«.

«Es lamentable que esta decisión se haya tomado por motivos de Seguridad Nacional«, añadió la fuente gubernamental, implorando al Gobierno estadounidense que colabore con su socio para resolver los problemas.

Reacción de Nippon Steel y US Steel

Tanto Nippon Steel como US Steel han condenado la decisión, emitiendo un comunicado conjunto en el que afirman que la medida de Biden «representa una clara violación del debido proceso y de la ley«, y afirman que el proceso había sido «manipulado» para favorecer su agenda política.

La declaración conjunta de las dos empresas también insistió en que Biden no citó ninguna prueba creíble de que el acuerdo planteara un problema de Seguridad Nacional e insinuó acciones legales, afirmando que «no nos queda más remedio que emprender todas las acciones apropiadas para proteger nuestros derechos legales».

Sin consenso en el Comité de Inversiones Extranjeras

La decisión de Biden se produce después de que el Comité de Inversiones Extranjeras en Estados Unidos (CFIUS) no llegara a un consenso sobre los posibles riesgos para la seguridad nacional de la operación el mes pasado, y enviara a Biden un informe largamente esperado sobre la fusión. Biden disponía de 15 días para tomar una decisión definitiva.

La decisión se produce pocas semanas antes de que el presidente demócrata abandone el cargo y podría dañar las relaciones entre Estados Unidos y Japón, que es el mayor aliado de Estados Unidos en Asia y el mayor tenedor extranjero de deuda estadounidense.

«Profundamente preocupante»En su declaración, las dos empresas siderúrgicas dijeron que es «chocante – y profundamente preocupante» que EE.UU. rechace una transacción que promueve los intereses de EE.UU. y «trate a un aliado como Japón de esta manera.»

«Desgraciadamente, envía un mensaje escalofriante a cualquier empresa con sede en un país aliado de EE.UU. que contemple una inversión significativa en EE.UU.», dijeron las empresas.

Varios conservadores y grupos empresariales como la Cámara de Comercio de EE.UU. habían respaldado públicamente el acuerdo, mientras Nippon Steel empezaba a ganarse a algunos miembros del sindicato Steelworkers y a los alcaldes de las zonas cercanas a sus altos hornos. Nippon Steel era el cuarto mayor fabricante de acero del mundo en 2023, según cifras de la Asociación Mundial del Acero. US Steel ocupaba el puesto 24.