Connect with us

ECONOMIA

La City apuesta: qué rango de precios prevé en mayo para el dólar y cómo afectará al carry trade

Published

on



El dólar oficial mostró grandes fluctuaciones en la segunda semana tras el fin del cepo para las personas físicas, y más flexibilización para empresas, y pasó de estar más cerca del piso de la banda de flotación a ubicarse más en el medio.

Para la última semana de abril, algunos analistas estiman que el dólar oficial y los paralelos podrían exhibir menor volatilidad e incluso bajar un poco debido a las necesidades de pesos típicas de fin de mes, y una mayor liquidación por la cosecha gruesa.

Advertisement

En cambio, otros expertos consideran que en la recta final de abril el dólar aún mostrará vaivenes y advierten que los $2,2 billones que no se renovaron en la última licitación de deuda del Tesoro podrían sumar demanda de divisas en los próximos días.

El dólar mayorista cerró el viernes en $1.169,50 para la venta, con una baja diaria de $4,50, y una suba semanal de $34,50, y $10,5 abajo del primer día post salida del cepo. En tanto el dólar minorista en Banco Nación finalizó en $1.190 con lo cual se mantuvo estable en relación a la jornada previa, y registró un alza en la semana de $30.

A su vez, el dólar blue cerró en $1.210, o sea una caída diaria de $15, y una baja semanal de $40, mientras que las divisas financieras Contado con Liquidación y MEP finalizaron en $1.201,15, y $1.184, 24 mostrando alzas en relación al cierre de la semana previa que había sido de $1.177,11, y $1.165,93, respectivamente.

Advertisement

El presidente Javier Milei ratificó que el dólar puede bajar a los $1.000 (parte inferior de la banda) y que incluso hay argumentos para que se ubique en los $900. Los analistas plantean que el tipo de cambio aún está buscando su punto de equilibrio. En ese marco, hay discrepancia entre los expertos acerca del nivel en el que se estabilizará la cotización del dólar oficial..

Dólar: ¿qué escenario prevén para el arranque de mayo?

Un informe del Grupo SBS elaborado por su economista jefe Juan Manuel Franco señaló que «el mercado sigue acomodándose al nuevo esquema cambiario y a las condiciones que implica el nuevo acuerdo con el FMI»

«Consideramos positivo el inicio del nuevo esquema en materia de dólares, aunque remarcamos que nos encontramos apenas en las primeras ruedas tras la flexibilización y que el proceso de Price Discovery (proceso por el cual se determina el precio de un activo en el mercado a través de la interacción entre compradores y vendedores) en el dólar aún sigue en curso», evaluó

Advertisement

En ese marcó, en SBS creen que «debe esperarse algo de volatilidad por un tiempo, algo que se vio en todos los dólarse y en los futuros de dólar durante la semana».

Por su parte, la consultora Outlier remarcó que Economía solo renovó el 70% de los vencimientos en la última licitación de deuda del Tesoro con lo que dejó afuera $2,2 billones, y estimó «la dinámica del tipo de cambio puede sumar demanda en los próximos días con los pesos que vuelven a la calle».

El operador Gustavo Quintana comentó que «los ingresos del complejo agroexportador se fueron acentuando durante la semana y se espera que el incremento continúe en las próximas ssemanas, facilitando una esperada estabilización de los precios».

Advertisement

En ese contexto, Quintana dijo que «lo visto el viernes indicaría que la demanda no estuvo tan sólida como en días anteriores y que los ingresos desde el exterior tienden a acentuarse, de modo que es posible que en la semana próxima los precios operen con nuevas bajas» debido a eventuales ventas para cubrir los gastos típicos de fin de mes, y «por un sostenido flujo de los agroexportadores, ya que la comercialización de la cosecha parece intensificarse».

«No creo que los $2,2 billones sumen mucha demanda, habrá que ver, pero creo que el Gobierno tiene mecanismos para absorberlos sin que impacten decididamente en el mercado de cambios», opinó

Por su parte, el analista financiero Gustavo Ber juzgó que «tras los vaivenes iniciales, esperables en las primeras dos semanas de flotación con bandas, se podría abrir una etapa de menor volatilidad».

Advertisement

«Con importantes flujos por delante, especialmente en un contexto externo de renovado repunte en el apetito por riesgo, estimo que el dólar podría testear próximamente la banda inferior«, auguró.

El economista Federico Glustein prevé que «el dólar MEP y el CCL van a correr como el oficial, mientras que el blue estará unos pesos más arriba, y habrá volatilidad, tenemos que estar acostumbrarnos».Y acotó que los dólares «pueden bajar a fin de mes producto de ventas para pago de necesidades, pero también puede haber traslación del 30% de la licitación que no renovó, y puede sumar a la demanda; dependerá de si se coloca en tasa o no, o si se estabiliza para el carry».

Asimismo, la economista Natalia Motyl, argumentó que «actualmente hay bastante volatilidad en el tipo de cambio, lo cual es lógico dado que estamos bajo un esquema de flotación administrada con bandas cambiarias, y fluctúa dependiendo de la oferta y demanda de pesos y dólares»

Advertisement

«La demanda de dólares está estrechamente vinculada a factores locales —como la liquidez en pesos—, mientras que la oferta de divisas responde más a variables externas, como la incertidumbre a nivel global, las decisiones de la Reserva Federal y la volatilidad en los precios de las commodities. Por lo tanto, espero que la volatilidad cambiaria continúe al menos durante los primeros meses, hasta que logremos consolidar una baja más pronunciada de la inflación», pronosticó.

Qué rango de precios prevé la City para el dólar en mayo

Ber proyectó que el dólar podría estabilizarse en el arranque de mayo «entre los $1.100 y $1.200». Y justificó que «la tendencia a corto plazo sería a la baja ante una mayor oferta – tanto del campo como del carry trade, así como las habituales mayores necesidades de pesos de comienzos de mes».

Quintana afirmó que «es difícil anticipar niveles de precio en un mercado que reinauguró la flotación hace unos pocos días después de años con controles y restricciones», y consieró que «daría la sensación que le cuesta mucho superar la cota de los $ 1.200 y bajar de los $1.167″.

Advertisement

Por su parte, Isaías Marini, analista de One618 comentó que «en las próximas semanas con el flujo fuerte de la cosecha gruesa comenzará a observarse una tendencia bajista que lo podría ubicar el tipo de cambio oficial en el rango de $1.000-$1.100, aunque no descarto vaivenes como los observados los últimos días y en un contexto de mayor liquidez en el mercado».

«Los 2,2 billones inyectados efectivamente sumarán liquidez y mantendrán a raya las tasas en pesos pero dudo que se traduzcan inmediatamente en demanda de dólares dada la continuidad de las restricciones cambiarias para empresas», estimó

Glustein vaticinó que el rango de estabilización del dólar oficial «podria estar entre $1.150 y $1.200, pensando en que hay oferta proveniente de exportaciones agropecuarias que están en pico pero también hay demanda de divisas por expectativas»

Advertisement

En Facimex Valores señalaron que «al anunciarse el nuevo esquema cambiario, destacamos que esperábamos que el tipo de cambio se ubicara inicialmente en el centro de la banda para luego apreciarse oscilando dentro del rango $1.100-1.200, lo que está ocurriendo»

«El rango $1.100-1.200 sigue siendo una referencia de la evolución esperada a corto plazo, aunque el diseño del esquema cambiario debería tender a inducir presiones a la apreciación que generan atractivo en estrategias de carry con instrumentos de corto plazo (a 4-6 meses). La liquidación del agro (que aceleró), las tasas de interés flotantes y la compresión del riesgo país podrían ser soportes importantes para este tipo de estrategias», alegaron.

Motyl indicó que «en relación al exceso de pesos estimo que estaría estable más cerca de los $1.250-$1300″

Advertisement

«Una vez que la inflación mensual baje de forma sostenida por debajo del 1%, es probable que el tipo de cambio tienda a estabilizarse. Sin embargo, estimo que este escenario no ocurrirá en los próximos cuatro meses. En este contexto, proyecto que el tipo de cambio fluctuará entre $1.200 y $1.300, y posteriormente entre $1.300 y $1400, durante los primeros seis meses desde la implementación del nuevo régimen».

Según su visión, «el contexto internacional adverso para Argentina limita la posibilidad de que el tipo de cambio toque el piso de la banda«.

La consultora Outlier planteó que «la rápida recuperación del tipo de cambio tras cada baja refleja una fuerte tendencia a dolarizarse, posiblemente por años de restricciones financieras, lo que sugiere que forzar una baja en la cotización (para ir al piso de la banda) podría generar mayor volatilidad»

Advertisement

«Se observa un punto de equilibrio en el centro de la banda. Incluso las inversiones en pesos, a las tasas de interés actuales, ofrecen cierta protección contra posibles subas del dólar, ya que estas tasas superan ligeramente el valor de la banda superior», evaluaron.

Para FMyA, «la volatilidad es porque el mercado todavía se está armando». Y explicó que «hay nueva oferta de exportadores que iban al dólar blend (por caso, el agro) y hay un nuevo flujo de inversores extranjeros (carry traders), mientras que la demanda está principalmente en las personas físicas y los importadores».

«Nuestra lectura sigue siendo que el flujo está a favor del plan de gobierno: por lo que el dólar va estar entre banda media e inferior», proyectó.

Advertisement

Por su parte, Joaquín Marque, director de UG Valores prevé que «podremos ver al dólar estabilizarse en el medio de la banda, y a medida que aumente la demanda de dinero y se estabilicen los flujos, veremos apreciarse lentamente».

«Sin embargo, hay que tener en cuenta que si el BCRA hace política monetaria activa y da señales claras, podría ubicar el tipo de cambio donde se sientan cómodos», subrayó.

Marque aseguró que «en zona de $1.250-$1.300 empieza a hacer conveniente el ingreso al carry trade, teniendo en cuenta el crawling del 1% en techo de la banda, lo que podría augurar un techo a la flotación».

Advertisement

Conclusión: qué pasará con el carry trade en mayo

De cara a mayo, el carry trade podría seguir siendo una de las principales estrategias impulsadas por las altas tasas de interés y el flujo de dólares producto de la cosecha gruesa.

La estabilidad en el tipo de cambio, con un dólar dentro del rango de $1.100-$1.200, parece favorecer a los inversores que buscan aprovechar la diferencia de tasas entre el mercado de pesos y el de divisas. Sin embargo, las expectativas de menor volatilidad podrían verse alteradas si la liquidez extra que dejó la última licitación de deuda del Tesoro no se maneja adecuadamente, ya que esto podría aumentar la presión sobre el dólar.

A pesar de un escenario favorable para el carry trade, la incertidumbre sigue presente. El riesgo de que la inflación no baje lo suficiente en los próximos meses o que el flujo de dólares cambie repentinamente podría generar nuevos sobresaltos en el mercado cambiario.

Advertisement

Por lo tanto, aunque el carry trade se mantendría atractivo en el corto plazo, los inversores deberán estar atentos a las fluctuaciones en la demanda de divisas y a los posibles ajustes en las políticas monetarias del Gobierno.



iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,dolar,cepo

Advertisement

ECONOMIA

BNB, la única criptomoneda que logró récord en julio, además de Bitcoin

Published

on


Junto con Bitcoin, se trata del único criptoactivo, dentro de las 100 principales por capitalización de mercado, en lograr un máximo histórico este mes

29/07/2025 – 18:41hs

Advertisement

Binance Research, el brazo oficial de investigación de Binance, ha publicado un análisis titulado «BNB en su máximo histórico (ATH): El resultado de factores estructurales a largo plazo.» Los hallazgos clave del análisis incluyen:

1. BNB alcanza nuevo ATH, consolidando su estatus blue-chip 

BNB rompió su máximo histórico anterior, superando los u$s800 y alcanzando una capitalización de mercado de u$s112 mil millones, convirtiéndose en la tercera criptomoneda más grande después de Bitcoin y las stablecoins. Este hito subraya la transformación de BNB en un activo blue-chip con creciente reconocimiento institucional.  

El informe de Binance Research señala que existe una demanda potencial de tesorería corporativa por más de $1.2 mil millones para BNB, superando la tasa de adopción de Ethereum. Esto señala un cambio importante, ya que BNB pasa de ser un token minorista a un activo de reserva de grado institucional.   

Advertisement
image placeholder

2. Rally impulsado por demanda spot refleja dinámicas saludables del mercado 

Este hito distingue a BNB como la única criptomoneda importante, aparte de Bitcoin, dentro de las 100 principales por capitalización de mercado con más de dos años de historia, que logró un nuevo máximo este mes. El rally reciente de 5 semanas está impulsado principalmente por la demanda en el mercado spot, no por apalancamiento, respaldado por un perfil riesgo-recompensa superior a 5 años.   

image placeholder

3. Desempeño superior ajustado al riesgo  

BNB presenta un ratio Sharpe de 2.5, lo que indica que por cada dólar de riesgo asumido, el retorno fue de 2.5 dólares. Esto significa que BNB ha tenido caídas significativamente menores en comparación con muchas criptomonedas importantes e índices de mercado tradicionales, ofreciendo a los inversores un perfil riesgo-recompensa más estable y atractivo en los últimos cinco años.

image placeholder

4. El poderoso ecosistema impulsa el ciclo de valor 

El valor de BNB está impulsado por un ecosistema único que combina utilidad centralizada y descentralizada. En el exchange centralizado de Binance, los poseedores de BNB disfrutan de descuentos en comisiones de trading, ventas exclusivas de tokens y oportunidades de staking que bloquean la oferta e incentivan la tenencia a largo plazo.  

Paralelamente, BNB alimenta el marco multinivel de BNB Chain — incluyendo Layer 1, opBNB Layer 2 y almacenamiento descentralizado en Greenfield — sirviendo como comisiones de gas, colateral en DeFi y tokens de gobernanza que aseguran la red y permiten a los poseedores votar sobre actualizaciones.  

Advertisement

Más allá de la blockchain, BNB se expande hacia casos de uso en el mundo real como pagos a través de Binance Pay y reservas de viajes en Travala.com, conectando los activos digitales con la vida cotidiana. La adopción institucional también crece, con una demanda de tesorería corporativa que supera a Ethereum.  

image placeholder

Apoyando este ecosistema están las tokenómicas deflacionarias de BNB: un mecanismo de Auto-Burn ha eliminado permanentemente el 31% del suministro total, aumentando la escasez y el valor a largo plazo.   

Advertisement



iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,binance,criptomonedas

Continue Reading

ECONOMIA

Más presión para el dólar: a Caputo le sale más caro aspirar los pesos que están dando vueltas en el mercado

Published

on



La licitación de bonos del Tesoro puso en números el nivel de incertidumbre que se vive en el mercado. No logró el objetivo de renovar la totalidad del vencimiento -sólo se «rolleó» un 76,3% del total- y, además, hubo que convalidar una tasa de interés alta, que para los plazos mas cortos llega a 4,28% de tasa efectiva mensual.

Hablando en plata, eso implica que el Tesoro deberá resignarse a que unos $2,8 billones queden en circulación. En otros tiempos no muy lejanos, esto habría sido hasta celebrado por Toto Caputo, que decía que un rollover menor al 100% era el síntoma de una economía que crecía y en la que los bancos reclamaban liquidez para prestarles más a las empresas y los consumidores.

Advertisement

Pero luego de los episodios de volatilidad de los últimos días, y tras la evidencia de que el Banco Central intervino fuerte en el mercado de futuros para contener al dólar, cada vez se hace más difícil sostener ese argumento.

Más bien al contrario, hay síntomas de enfriamiento del crédito. En junio, los préstamos del sector bancario tuvieron un crecimiento mensual real de 2,6%, lo cual implica una ralentización respecto de los meses anteriores, cuando el crecimiento venía a una velocidad de 3,9%. Y los últimos informes hablan sobre una caída de 7,1% mensual para la financiación con tarjeta de crédito, mientras que también disminuyen los depósitos, aunque a un ritmo menor, de 1,4%.

Esa situación tendió a agravarse tras la turbulencia que llevó a las tasas de interés muy por encima de la expectativa inflacionaria.

Advertisement

Y la apuesta del gobierno era que la situación se normalizara con la nueva licitación de Lecaps, a donde suponían se canalizaría toda la nueva liquidez que les quedó a los bancos por la eliminación de las LEFI.

Carrera dólar versus tasas

Sin embargo, los resultados dejaron a los inversores más nerviosos que antes, dado que hubo que convalidar tasas superiores a las de la última licitación fuera de programa, en la que se había pagado una tasa efectiva anual de 47% que a muchos analistas les pareció escandalosa.

Este martes para los títulos de vencimiento corto se pagó una tasa de 4,28% efectiva mensual, que equivale a un 65% tasa de retorno efectiva anual. Si se tiene en cuenta que la inflación mensual está debajo del 2% y que se estima a 12 meses una inflación anual de 20%, son tasas difíciles de justificar.

Advertisement

A no ser, claro, que dentro de esas tasas haya un componente de cobertura contra el riesgo de una devaluación. De hecho, quien haya comprado el bono que paga en octubre, tendrá un premio equivalente a un dólar que cotice a $1.438. Es un nivel mayor al del mercado de futuros, donde los contratos para octubre cotizan a $1.410. Es decir, es una tasa rentable para quienes hagan la doble cobertura.

Aun así, no se logró la renovación que el gobierno esperaba. Y ello ocurre en el contexto de un mercado que empuja el tipo de cambio al alza. En el último mes, el dólar mayorista tuvo un incremento de 7,6%.

Los más críticos del gobierno afirman que la estabilidad financiera sólo se mantendrá en la medida en que cada licitación logre un rolleo casi total de los títulos que vencen. Y que, en caso de que el número sea menor -como acaba de ocurrir- los pesos «excedentes» no irán lubricar el sector productivo, sino que terminarán corriendo al dólar.

Advertisement

Esa presunción parece confirmada por los últimos números del mercado cambiario que informó el Banco Central. En junio los minoristas adquirieron dólares por u$s4.357 millones, contando las compras netas de billetes en los bancos por u$s2.020 millones y otras salidas netas de divisas por u$s2.308. La cifra implica una suba de 25% respecto de mayo -el primer mes completo sin controles cambiarios-, que a su vez había sido superior en 59% a abril.

El BCRA estimó que un millón de personas compraron divisas en el sistema bancario, un nivel similar al que se había registrado en mayo. Y todo indica que los números serán peores en julio, cuando los ahorristas siguieron al pie de la letra el ya célebre consejo de Toto Caputo –»si te parece que el dólar está barato comprá, no te la pierdas, campeón»-.

«¿Con qué pesos?»

Otro signo del cambio de humor del mercado es que, aunque quedaron desiertas por falta de interés las licitaciones de bonos dólar linked -es decir, los que ajustan con la devaluación del tipo de cambio oficial-, ya no hay margen para tomarlo como un síntoma de confianza.

Advertisement

En las licitaciones anteriores, cada vez que surgían críticas sobre el atraso cambiario, Caputo ponía en el menú los títulos dólar linked y, cuando finalmente quedaban sin interesados, el gobierno lo consideraba un motivo de celebración, porque lo interpretaba como un gesto de credibilidad sobre la sostenibilidad del esquema cambiario.

Otra diferencia respecto de licitaciones anteriores es que ya no puede argumentarse que hubo una mejora en el perfil de la deuda por haberse renovado bonos a mayores plazos y menores tasas de interés.

Más bien al contrario, lo que se vio este martes es que casi un 70% de la renovación de deuda se concentró en títulos de cortísima duración: uno que vence el 15 de agosto y otro el 29 del mes próximo. No hubo títulos que vencieran después de octubre -considerado por el mercado un punto de inflexión, porque es cuando se realizarán las elecciones legislativas-.

Advertisement

Lo cierto es que los funcionarios del equipo económico ya no muestran la confianza de otros momentos. Y el mayor blanco de los ataques fue el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, a quien le gusta polemizar en las redes con los críticos del plan económico. Muchos le recordaron con sorna que en otros tiempos, el secretario había propuesto que se estamparan remeras con la inscripción «¿Con qué pesos?». Las chicanas indican que esas remeras bajaron drásticamente de precio.

También abundaron los memes vinculados a la sigla TMAP, que en la intimidad del gobierno significa «todo marcha acorde al plan», pero que en el mercado financiero acaba de ser resignificada como «tasas muy altas, Pablo».

¿Es manejable la bola de Lecaps?

Lo peor para el gobierno no es el resultado de una licitación puntual, sino el cuestionamiento que está por detrás de los números: cada vez son más los economistas argumentan que no existe el ancla monetaria que supuestamente otorgará la estabilidad cambiaria.

Advertisement

La crítica principal es que la «base monetaria amplia» que toma como referencia el gobierno no es relevante en este momento. Y quienes ponen el foco en el agregado monetario M3 -incluye, además del circulante, las cuentas corrientes y las cajas de ahorro, los depósitos a plazo públicos y privados- ven que viene creciendo aceleradamente: un 11% en un mes, y un 59% acumulado en el año.

Es en ese contexto que se comenzó a hablar de una «bomba de Lecaps» y que lo que el gobierno presenta como una mejora en el perfil de deuda no fue más que cambiar el déficit cuasifiscal -las Leliqs y pases a un día que pagaba el Banco Central- por una nueva deuda.

El vencimiento de este martes fue grande, pero el calendario marca otra prueba difícil en agosto con vencimientos de Lecaps por $30 billones. Cuando un analista que le preguntó al secretario Quirno de dónde saldrían los fondos para pagar los intereses de Lecap a su vencimiento, el funcionario respondió con un lacónico «se refinancia».

Advertisement

Esa tesitura se está devaluando. Ya quedó en claro que no sólo no se puede refinanciar en su totalidad sino que, además, el costo es el riesgo de una espiralización en la clásica carrera del dólar contra las tasas.

Cuestionando el superávit

Algunos críticos hasta empezaron a cuestionar la veracidad de los números fiscales. En otras palabras, que si se contabilizara correctamente el costo de intereses de la deuda que se está acumulando, entonces ya no existiría el superávit fiscal financiero, sino que los números estarían en rojo.

Es un argumento que tiene la potencia de un misil a la línea de flotación del plan económico, porque justamente el dato en el que se basa Caputo para sostener que «esta vez es diferente» es que, a diferencia de otros momentos de la historia reciente, ahora hay superávit fiscal.

Advertisement

Tomando el caso el resultado fiscal de junio, el dato oficial marca un superávit de $551.000 millones, pero cuando se calcula la acumulación de intereses capitalizados -y no pagados- de Lecaps, entonces queda un «rojo» de $5,8 billones. En enero, ese déficit era de $3,1 billones, lo cual da la pauta de la alarma que tienen estos economistas por la velocidad de crecimiento de la «bola» de deuda del Tesoro. Si se contabiliza el acumulado anual, entonces el déficit rondaría los $27 billones.



iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,luis caputo,deuda

Advertisement
Continue Reading

ECONOMIA

Las reservas del BCRA subieron casi u$s1.200 millones, a la espera de un nuevo desembolso del FMI

Published

on



El Banco Central (BCRA) cerró la jornada del martes con un incremento en sus reservas internacionales, que treparon hasta los u$s41.241 millones. El aumento, cercano a los u$s1.200 millones, se explica principalmente por el ingreso de un desembolso del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), cuya llegada ya había sido anticipada días atrás.

Este fortalecimiento de las arcas del BCRA llega en un momento clave, ya que el Gobierno busca mejorar su perfil externo de cara a la evaluación del Fondo Monetario Internacional (FMI). Aunque aún no alcanza los niveles comprometidos con el organismo, este ingreso representa un alivio para las cuentas del Estado.

Advertisement

Subieron las reservas del Banco Central, clave para el acuerdo con el FMI

«Estas transferencias de organismos multilaterales permiten recalibrar las metas de reservas. Para el pago de intereses del viernes -unos u$s832 millones- ya estarían disponibles los u$s2.100 millones que se espera que libere el FMI«, explicó Sebastián Menescaldi, economista de la consultora Eco Go.

Por su parte, Gabriel Caamaño, de Outlier, sostuvo que aunque el nivel actual de reservas aún dista del objetivo fijado por el FMI, estos movimientos ayudan a avanzar en esa dirección.

Este panorama se da mientras el Ministerio de Economía mantiene conversaciones con el Fondo tras haber alcanzado recientemente un staff level agreement, un paso previo necesario para destrabar un nuevo desembolso de aproximadamente u$s2.000 millones. En ese contexto, se espera una renegociación de las metas de acumulación de reservas, considerando que el Gobierno viene cumpliendo con otras condiciones del programa.

Advertisement

En los últimos meses, la gestión económica dio señales de haber ajustado su enfoque. Si bien durante buena parte del año se priorizó el equilibrio fiscal y la lucha contra la inflación, dejando en segundo plano la acumulación de divisas, esa lógica parece estar cambiando. El Gobierno ha adoptado una actitud más proactiva para engrosar las reservas, algo que analistas como Ricardo Arriazu y Domingo Cavallo venían reclamando.

Hasta hace poco, la postura oficial era que no se comprarían dólares mientras el tipo de cambio no tocara el piso de la banda establecida. Sin embargo, esa estrategia se modificó: el Tesoro comenzó a intervenir activamente en el mercado, aceptando precios por encima de los $1270 para sumar divisas.

Además, se reactivaron negociaciones con organismos internacionales para acelerar nuevos créditos, como el reciente acuerdo con el BID, cuyo impacto ya se reflejó en el balance del BCRA. En resumen, la suba de reservas da cierto respiro al Gobierno en su frente externo, al tiempo que marca un giro en su estrategia económica con el objetivo de cumplir compromisos clave con el FMI.

Advertisement

El dólar minorista tocó máximos históricos y subió el mayorista

El dólar minorista cerró este martes con una baja de cinco pesos, a $1.300 en las pantallas del Banco Nación, pese a haber operado gran parte de la jornada en torno a los $1.310, lo que implicó un nuevo récord intradiario. En el mercado informal, el dólar blue finalizó sin cambios en $1.320 y se consolidó como la cotización más alta dentro del mercado.

En el segmento financiero, el contado con liquidación (CCL) retrocedió 0,8% y se ubicó en $1.290, mientras que el dólar MEP cayó 0,1% hasta los $1.294. Por su parte, el tipo de cambio mayorista descendió cuatro pesos y cerró en $1.291, a pesar de haber operado por momentos por encima de los $1.300.

En medio de un escenario dominado por la tensión financiera y la proximidad de las elecciones, distintos analistas coincidieron en advertir que el equilibrio alcanzado en el mercado cambiario es frágil y costoso. El desarme de las Letras Fiscales de Liquidez (LeFi) y la estrategia de control de agregados monetarios profundizaron la volatilidad en las tasas de interés, obligando a sostener niveles reales elevados que comprometen tanto la actividad económica como la capacidad de financiamiento del Estado.

Advertisement

Los expertos comentaron que la intervención del Banco Central en el mercado de futuros permitió contener las presiones sobre el dólar, pero con efectos colaterales que todavía persisten. Las tasas cortas se dispararon y las condiciones de liquidez se endurecieron, dificultando el funcionamiento normal del sistema financiero. El tipo de cambio, si bien estable, depende hoy de intervenciones constantes y de una política monetaria extremadamente contractiva.

Asimismo, indicaron que el Tesoro enfrenta una agenda desafiante, con vencimientos por delante que deberán renovarse en un entorno de alta desconfianza y escasa demanda genuina por deuda en pesos. A su vez, la posición de reservas, aunque reforzada por el FMI, plantea interrogantes sobre hasta dónde puede sostenerse la defensa cambiaria sin afectar la recuperación. La dolarización preelectoral y la caída de la demanda de crédito son síntomas de un sistema bajo presión.

Para los especialistas, el escenario actual requiere tasas reales muy por encima de lo habitual para sostener la paridad cambiaria, mientras que el crédito bancario pierde dinamismo y las entidades reducen su exposición a deuda soberana. Si bien el tipo de cambio logró estabilizarse momentáneamente, las condiciones que lo sostienen no son sostenibles en el tiempo. A la espera del resultado electoral, el mercado anticipa más volatilidad y posibles cambios de rumbo.

Advertisement

Este esquema requiere mantener una escasa cantidad de pesos circulando, lo que enfría la economía y deja al crédito en mínimos históricos. En paralelo, la deuda en pesos se acumula y tensiona cada vez más el frente fiscal. Aunque las reservas del BCRA recibieron un alivio del FMI, la pregunta que flota entre operadores y analistas es: ¿hasta cuándo puede sostenerse esta paz cambiaria?

iprofesional, diario, noticias, periodismo, argentina, buenos aires, economía, finanzas,
impuestos, legales, negocios, tecnología, comex, management, marketing, empleos, autos, vinos, life and style,
campus, real estate, newspaper, news, breaking, argentine, politics, economy, finance, taxation, legal, business,
technology, ads, media,banco central,dolar,reservas

Advertisement
Continue Reading

LO MAS LEIDO

Tendencias