Connect with us

INTERNACIONAL

Colombia regresa al pasado

Published

on


El senador Miguel Uribe permanece internado tras el intento de asesinato en su contra el fin de semana pasado (REUTERS/Luisa Gonzalez/File Photo)

El crimen organizado se ha transformado en una herida abierta para la democracia en América Latina. De la época de los carteles de los años 80 y 90, evolucionamos hacia una etapa de fragmentación criminal, en la que los grupos armados diversificaron sus fuentes de ingresos, incorporando delitos como el contrabando de minerales, la trata de personas, el tráfico de armas, la extorsión, el secuestro y el lavado de activos. Pero ahora, hemos entrado en una etapa aún más peligrosa: la consolidación criminal.

Esta consolidación implica una fusión alarmante entre la criminalidad, el control social y la toma de poder político. Uno de los casos más preocupantes de esta tendencia es Colombia, un país que había logrado reducir significativamente sus índices de criminalidad en los últimos 25 años, sobre todo tras los acuerdos de paz con las FARC. Sin embargo, los recientes atentados —como el ataque contra el senador Miguel Uribe y más de una docena de acciones terroristas en ciudades como Cali— parecen marcar un giro hacia el pasado, con claros signos de retroceso en materia de seguridad, que evocan los días más oscuros del narcotráfico.

Advertisement

Colombia representa hoy el epicentro de lo que podríamos llamar un cóctel autoritario que comienza con la erosión de la democracia. Desde la elección del presidente Gustavo Petro, la polarización política se ha intensificado de manera preocupante. Los ataques a la institucionalidad, especialmente al Congreso, y la constante estigmatización de los opositores, forman parte de una narrativa cada vez más autoritaria. A este deterioro institucional se suma un resurgimiento del crimen organizado: asesinatos de líderes sociales, reclutamiento forzado de menores, y un récord histórico en cultivos de coca —casi 300.000 hectáreas— revelan una realidad que amenaza con sepultar los avances logrados.

En este contexto, el papel del régimen de Nicolás Maduro resulta clave para entender por qué Colombia parece regresar al pasado. Durante años, Venezuela ha servido como refugio y plataforma para grupos narcoterroristas, a quienes el chavismo ha ofrecido protección a cambio de financiamiento y respaldo político. Hoy, el ELN opera como una especie de “guardia fronteriza” del régimen venezolano, controlando territorios, traficando migrantes, armas y cocaína, e incluso planificando acciones desestabilizadoras contra Colombia desde suelo venezolano.

El papel del régimen de
El papel del régimen de Nicolás Maduro resulta clave para entender por qué Colombia parece regresar al pasado (EFE/ Miguel Gutiérrez/ARCHIVO)

Lejos de promover la paz, Maduro ha instrumentalizado el conflicto colombiano como herramienta de chantaje político. Ha condicionado su papel como “mediador” a la normalización de su dictadura, y recientemente ha acusado a Estados Unidos de intentar derrocar al presidente Petro —una narrativa que han replicado tanto las disidencias de las FARC como el propio mandatario colombiano. Esta coincidencia discursiva no es menor: refleja la fragilidad institucional de Colombia, y la permeabilidad de su liderazgo frente a influencias externas.

Estos acontecimientos revelan no solo una crisis interna, con un presidente dispuesto a tensar los límites del poder y explotar la división social para sus propios fines, sino también una vulnerabilidad regional más amplia. Colombia difícilmente podrá aspirar a una paz duradera mientras Venezuela siga siendo un santuario para estructuras criminales que socavan la soberanía y la estabilidad democrática.

Advertisement

La dictadura de Maduro, con su respaldo irrestricto a grupos terroristas y su apertura geopolítica a potencias como China, Rusia, Irán y Cuba, representa hoy uno de los principales desafíos para el orden democrático en América Latina. Pensar que estas potencias se limitan a instalarse en Venezuela sin buscar expandir su influencia sería ingenuo. Venezuela se ha convertido en una cabeza de playa desde la cual se proyecta una agenda autoritaria y antioccidental que busca socavar los valores democráticos en todo el hemisferio, disfrazada de cooperación económica y solidaridad internacional.

Colombia se encuentra en una encrucijada histórica. El retorno a los patrones de violencia y captura territorial por parte de actores armados no es solo un problema de seguridad: es una manifestación de la fragilidad democrática en un país que, por décadas, ha estado atrapado entre la guerra y la esperanza.

La consolidación criminal, el debilitamiento institucional y la influencia de regímenes autoritarios externos componen un triángulo de inestabilidad que debe ser enfrentado con claridad, firmeza y visión regional. La paz no es un decreto: es un proceso colectivo que requiere Estado de derecho, justicia social y soberanía territorial real. Y, sobre todo, la paz en Colombia no será posible mientras la dictadura en Venezuela siga exportando violencia, refugiando terroristas y cultivando una agenda autoritaria que no conoce fronteras.

Advertisement



South America / Central America,BOGOTA

INTERNACIONAL

El régimen chavista: cómo Donald Trump se volvió el mejor aliado de Nicolás Maduro

Published

on


Este fin de semana, en las plazas Bolívar de toda Venezuela, puñados de militantes del chavismo han acudido a inscribirse en las Milicias, cuarta rama de la Fuerza Armada que, según Nicolás Maduro, tiene entre 4,5 y cinco millones de personas en armas.

El llamado y las pequeñas concentraciones de militares, paramilitares, milicianos y civiles es la respuesta contundente del chavismo a la supuesta amenaza de la poderosa Armada de Estados Unidos de invadir a Venezuela para desalojar a los hijos de Simón Bolívar y Hugo Chávez del poder.

Advertisement

Para el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, este sábado fue «un día histórico», en el que el pueblo venezolano solo se sumó a las filas de la milicia, sino además rechazó «las constantes agresiones de Estados Unidos», y sus acciones de «falsos positivos» para incriminar al gobierno venezolano.

«El país atraviesa por momentos decisivos para la vida de nuestra nacionalidad», había proclamado Maduro horas antes. Pero más allá de la retórica incendiaria que pulula en la propaganda oficial y en las redes sociales en torno a Venezuela y una imaginaria invasión, por estas horas todo transcurre en paz por aquí. La gente común se ocupa de sus cosas, las playas están llenas como cada fin de semana y en los centros comerciales –principales plazas de distracción más que de compra para los venezolanos de salarios cortos- la gente camina y conversa… pocos parecen dispuestos a cortarse las venas al son de la trompeta de la patria.

Esta realidad contrasta con las ignorantes certezas que toman cuerpo desde fuera del país. También choca con el delirio histérico de las redes sociales, ese sustituto del mundo material que en Venezuela son la principal fuente de información y desinformación para las élites y la gente común.

Advertisement

La escalada de tensiones entre el gobierno de Donald Trump y el de Nicolás Maduro pone a prueba el apoyo interno y el internacional a la causa chavista. Washington hace un nuevo despliegue de fanfarronería que termina por favorecer a su enemigo.

El líder chavista Nicolás Maduro durante ejercicios militares, en Caracas (Venezuela). Foto EFE

Mientras, ciertos opositores radicales desde el exterior y atrincherados en las nubes de las redes sociales, han caído en una especie de paroxismo babeante, jurando, como profetas de una religión de los anhelos, que «el fin está cerca», sólo porque Estados Unidos sacó a pasear unos barcos en el mar Caribe con la excusa de combatir el narcotráfico.

Pero lo único concreto es que la falazmente llamada revolución bolivariana está de plácemes porque, con la escalada de amenazas del gobierno de Trump, ahora tiene más argumentos nacionalistas de dónde asirse para intentar galvanizar simpatías internas y externas jugando a la víctima, tratar de elevar su franca impopularidad y escalar la represión.

Advertisement

El gobierno de Maduro no es aceptado por los opositores (según encuestas en los meses electorales, sumaba 80% de rechazo entre los consultados). El dominio chavista tampoco es reconocido por las principales democracias de corte occidental, las mismas que hoy intentan ponerle coto al desaforado Trump en otros frentes del tablero internacional.

Galvanización

La tesis del enemigo externo y la supuesta amenaza de una inminente invasión militar desde EE.UU. le han servido de excusa al régimen castrista de Cuba durante 60 años. Ahora el modelo parece reeditarse para ser usado por otros 60 años más aquí en tierra firme, en los hombros de América, esta Venezuela de encrucijadas donde todo futuro parece empantanado por el fanatismo.

Advertisement

Por lo pronto, ya se robustece un estado militar y policial, donde la excusa de la permanente amenaza bélica externa habrá de servir para atornillar en el poder al régimen y perseguir con más saña a todos los que no les sean incondicionales, con el peregrino argumento de que si no estás con el chavismo estás a favor «del imperio».

Hasta los casi 1.000 presos políticos (la lista crece cada semana) ahora tendrán más lejana su soñada libertad. Es que, como son acusados de «terrorismo, fascismo, traición a la patria» y de aliarse con enemigos extranjeros, muchos radicales chavistas supondrán que en medio de lo que llaman amenazas de agresiones permanentes, no pueden soltar a personas «peligrosas», que además son usadas como monedas de intercambio de prisioneros en esta guerra sorda.

Por el lado de los opositores radicales, encabezados por la líder María Corina Machado, algunos también le empujan el carro de la historia a Maduro, al apoyar abiertamente una incursión militar como salida extrema para desalojarlo del poder, a él y a toda la nomenklatura chavista. En los llanos venezolanos hay un dicho que viene al pelo: «Una cosa es invocar al diablo y otra verlo venir».

Advertisement
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, y el comandante estratégico operacional de las Fuerzas Armadas de Venezuela, general Domingo Hernández. Foto ReutersEl presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, y el comandante estratégico operacional de las Fuerzas Armadas de Venezuela, general Domingo Hernández. Foto Reuters

Los que creen que una guerra se soluciona con más guerras, no miden lo que ocurre después de que enciendes la mecha. No parecen tener idea – ni siquiera viendo películas de Hollywood – de lo que significa ver a gente con las tripas al aire, reventada por la metralla.

Barcos errantes, ejército invisible

En los últimos días y horas se ha desatado un tsunami de desinformación. «Fake news», propaganda intencionada, rumores, medias verdades y mentiras deslavadas que abruman a los venezolanos. Hasta grandes cabeceras y marcas internacionales de noticias han afirmado que la flota de barcos desplegada por Washington en el Caribe sur esta semana «se dirige a las costas venezolanas»; o «navegan en agua territoriales venezolanas».

Declaraciones de halcones de Washington desde Marco Rubio hasta varios radicales senadores republicanos, y «versiones» de influyentes de las redes, le han servido en bandeja de plata el texto a la retórica chavista. Maduro convocó esta semana «al pueblo en armas» a que se aliste en los cuarteles militares, plazas públicas y en las sedes de 15.751 «Bases populares de defensa integral».

Advertisement

«Venezuela volverá a triunfar sobre todas las amenazas extravagantes, estrafalarias, criminales del imperialismo norteamericano y la garantía del triunfo es la unión del poder popular, militar y policial», dice Maduro, quien intenta fusionar su propia figura con la noción del país, de la patria y del Estado.

Un miembro de la Milicia Bolivariana de Venezuela con una bandera venezolana espera el día en que el presidente de Venezuela. Foto EFEUn miembro de la Milicia Bolivariana de Venezuela con una bandera venezolana espera el día en que el presidente de Venezuela. Foto EFE

Pero hasta ahora, y pese a que dicen sentirse amenazados, los líderes chavistas no han movilizado públicamente contra EE.UU. a los militares de verdad, a los bien entrenados y armados soldados del Ejército, la Armada, la Aviación y la Guardia Nacional.

Las milicias son un cuerpo de control social principalmente formado por famélicos reservistas, personas de la tercera edad, jubilados que sobreviven con una pensión de entre 130 y 160 dólares por mes. Ni de lejos son 4,5 millones y en realidad muy pocos están armados y entrenados, según cálculos de especialistas en esos asuntos.

El llamado a filas parece más bien un intento de medir el apoyo popular al chavismo dentro de sus propias bases y grupos que dependen de los programas sociales del Estado, con sus bonos y precarias bolsas mensuales de comida barata.

Advertisement

«Los que amenazan con intentar hacer contra Venezuela un cambio de régimen, un zarpazo terrorista, militar, es inmoral, criminal e ilegal», dijo Maduro en un acto en la sede de la Asamblea Nacional (congreso) dedicado a defender la soberanía y la paz y a exaltar lealtades.

También agradeció a los gobiernos de Irán, Rusia, China, Cuba y Nicaragua «la solidaridad, el apoyo que le han dado hoy a Venezuela y el rechazo mundial unánime a que Estados Unidos abra un conflicto armado en Suramérica, y lo sume a sus fracasos de Vietnam, Afganistán, Irak, Libia».

La principal apuesta del chavismo es reforzar la ansiada legitimidad en medio de este circo de exageraciones en las que se ha vuelto la política del amigo Trump hacia Venezuela. Washington acusa a Maduro sin una sola prueba, sin un argumento, sin un expediente, de encabezar un supuesto cartel de las drogas tan poderoso que olvídate de Pablo Escobar.

Advertisement

Pero en el tablero mundial de hoy esas peregrinas acusaciones no bastan por sí solas para justificar un ataque armado contra un país, deponer a un gobierno y desatar una guerra. En el fondo, eso parecen saberlo todos los que han asumido un papel en esta comedia negra donde la gente común en Venezuela es la primera víctima real.

Continue Reading

INTERNACIONAL

Ecuador y Perú refuerzan la cooperación en seguridad, empleo y comercio a dos meses de los 27 años de paz

Published

on


Los ministro de Trabajo de Ecuador y Perú.

A pocos meses de conmemorarse el vigésimo séptimo aniversario de la firma de la paz entre Ecuador y Perú, ambos países han dado pasos concretos para profundizar su relación bilateral en áreas sensibles como la seguridad fronteriza, la formalización del empleo y la promoción del comercio. En las últimas semanas, autoridades de ambos gobiernos han alcanzado acuerdos y han programado eventos de alto nivel que buscan consolidar una integración regional más sólida, en un contexto marcado por la necesidad de enfrentar desafíos comunes como la minería ilegal, la informalidad laboral y la apertura de nuevos mercados.

Uno de los hitos más recientes fue el convenio suscrito en Lima entre la ministra de Trabajo de Ecuador, Ivonne Núñez, y su homólogo peruano, Daniel Maurate, que establece mecanismos de cooperación interinstitucional para fortalecer la formalización laboral. Según Núñez, el empleo digno es un pilar fundamental para el desarrollo de la sociedad y este acuerdo permitirá intercambiar estrategias y prácticas que están dando resultados en ambos países. Maurate, por su parte, destacó que la experiencia de Ecuador en programas de formalización puede servir de referente para las políticas peruanas.

Advertisement

Este acuerdo contempla asistencia técnica, intercambio de conocimientos y pasantías, así como el desarrollo de investigaciones conjuntas, con el respaldo de organismos internacionales como la Organización Internacional del Trabajo (OIT), presente en la firma del convenio. Para ambos países, la formalización del empleo no es solo un tema de justicia social, sino también un mecanismo para generar cohesión y enfrentar fenómenos de vulnerabilidad asociados a la precarización laboral.

El presidente de Ecuador, Daniel
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, y su homóloga peruana, Dina Boluarte, en una foto de archivo. EFE/ Paolo Aguilar

En paralelo, el ámbito de la seguridad ha ocupado un lugar central en la agenda bilateral. El Comité Binacional de Frontera El Oro–Tumbes, celebrado en Arenillas, Ecuador, permitió acordar acciones conjuntas en defensa y comercio, además de la implementación de un plan binacional contra la minería ilegal, vigente para el periodo 2025-2026. Dicho plan prevé operativos coordinados, capacitaciones en fiscalización y mecanismos de investigación conjunta, con el objetivo de enfrentar a las bandas criminales que controlan enclaves mineros en la frontera. La amenaza de la minería ilegal se ha intensificado en la región, vinculada a redes del crimen organizado y a matanzas recientes en zonas de extracción de oro en ambos países.

La cooperación también se ha traducido en esfuerzos para mejorar la conectividad fronteriza y fortalecer las capacidades tecnológicas en la zona limítrofe. Autoridades civiles y militares coincidieron en que una frontera ordenada y segura no solo garantiza soberanía, sino también oportunidades de desarrollo para las comunidades locales, que dependen en gran medida del comercio transfronterizo.

En este marco, la dimensión económica de la relación bilateral tendrá un punto clave en septiembre con la realización del Roadshow Perú–Ecuador, organizado por Perucámaras, que del 10 al 12 de ese mes reunirá en Quito a una delegación de autoridades y empresarios peruanos de sectores estratégicos como agroindustria, minería y turismo. La agenda del encuentro incluye presentaciones sectoriales, visitas técnicas a gremios ecuatorianos y la firma de acuerdos de colaboración institucional, además de un cóctel de cierre en la residencia de la Embajada del Perú en Quito.

Advertisement
En septiembre se realizará un
En septiembre se realizará un evento para fortalecer las relaciones comerciales entre ambos países.

El presidente de Perucámaras, Óscar Zapata, subrayó que este roadshow no se limita a la promoción comercial, sino que busca proyectar la voz de las regiones peruanas en el escenario andino, reafirmando la integración productiva y la cohesión territorial. En 2024, el comercio bilateral alcanzó los USD 2.593 millones, un crecimiento del 13% respecto al año anterior, consolidando a Ecuador como el tercer destino regional de las exportaciones peruanas. El 87% de esos envíos correspondió a productos no tradicionales, lo que refleja la diversificación de la oferta.

Los sectores con mayor dinamismo han sido el químico, el agropecuario y el cerámico, además de exportaciones de pesca tradicional y productos siderúrgicos. Perú se mantiene como el tercer proveedor de frutas al mercado ecuatoriano y el segundo en toda América Latina, lo que da cuenta de su competitividad en alimentos frescos. Para Silvia Lama, gerente de Desarrollo de Negocios de Perucámaras, la misión institucional refleja el compromiso con un comercio sostenible y con la construcción de lazos empresariales duraderos entre países vecinos .

La proximidad del aniversario de la firma del Acta de Brasilia, en octubre de 1998, da a estas iniciativas un valor simbólico adicional. Aquel tratado cerró definitivamente un largo ciclo de disputas territoriales y abrió paso a una agenda de cooperación binacional. Casi tres décadas después, esa paz se sostiene en la consolidación de la cooperación entre Quito y Lima.

Advertisement
Continue Reading

INTERNACIONAL

Socialist candidate Mamdani meets with NY Dems as they withhold endorsements

Published

on


NEWYou can now listen to Fox News articles!

New York City Democratic mayoral nominee Zohran Mamdani met with House Minority Leader Hakeem Jeffries, D-N.Y., and Rep. Yvette Clarke, D-N.Y., on Tuesday, as New York Democrats continue to withhold their endorsements ahead of the November election. 

Advertisement

«Zohran joined Congresswoman Clarke and Congressman Jeffries today to meet with Black clergy leaders from across central Brooklyn,» Mamdani campaign spokesperson Dora Pekec told Fox News. 

Jeffries and Clarke are among the Democratic leaders, including Gov. Kathy Hochul and Senate Minority Leader Sen. Chuck Schumer, who have yet to endorse Mamdani following his primary win in June. 

«They engaged in a wide-ranging discussion on a number of issues, including the urgent affordability crisis and the exodus of Black New Yorkers from the five boroughs—and Zohran shared his agenda to make sure every New Yorker can afford to continue to call this city home and live a life of dignity,» Mamdani’s campaign said. 

Advertisement

JEFFRIES DECLINES TO ENDORSE MAMDANI, SAYS THEY WILL MEET AFTER UGANDA TRIP

Zohran Mamdani during an election night event on Wednesday, June 25, 2025.  (Christian Monterrosa/Bloomberg via Getty Images)

Tuesday’s meeting was held at a church in Beford-Stuyvesant, Brooklyn, which is in the heart of Jeffries’ congressional district. Clarke, who also represents parts of Brooklyn, is chair of the Black Congressional Caucus. 

Advertisement

JEFFRIES GIVES ANSWER FOR NOT YET ENDORSING MAMDANI FOR NYC MAYOR

«I think there was a very meaningful exchange,» Clarke told NY1 after the meeting. «Assemblyman Mamdani has a platform that he’s been running on, and they wanted to know how that’s applicable to the communities they reside in.»

Clarke said the pastors «wanted an intimate setting where they could really speak to their lived experiences, the lived experiences of their congregants.»

Advertisement

She told the same outlet last month that she wanted to ask Mamdani about his past refusal to condemn the term «globalize the intifada,» a term he has since said he would discourage others from using. 

«I think that it’s best that I have this conversation so that my credibility among my constituents is, you know, intact,» she told NY1, referencing the large Jewish community in her Brooklyn district. 

Jeffries at Capitol presser

House Minority Leader Hakeem Jeffries, D-N.Y., conducts his weekly news conference in the Capitol Visitor Center on May 23, 2024. (Tom Williams/CQ-Roll Call, Inc via Getty Images)

Jeffries met with Mamdani earlier this summer, but the House minority leader has stopped short of endorsing the self-described democratic socialist candidate. 

Advertisement

Jeffries confirmed to CNN’s «State of the Union» on Sunday his plan to meet with Mamdani this week, while reiterating that his first meeting with Mamdani in July was «very candid and constructive and community-centered.»

«I don’t think we’ve withheld an endorsement,» Jeffries said. «We are engaging in a conversation about the future of New York City, about the issues that need to be addressed.»

AOC Bernie Sanders at rally

Rep. Alexandria Ocasio-Cortez and Sen. Bernie Sanders participate in a stop on the «Fighting Oligarchy» tour at the Dignity Health Arena, Theater in Bakersfield, California, on April 15, 2025. (Reuters/Aude Guerrucci)

While both Democrats stopped short of endorsing Mamdani after their meeting on Tuesday, other New York Democrats, including Reps. Alexandria Ocasio-Cortez, Nydia Velázquez, Jerry Nadler and Adriano Espaillat have thrown their political weight behind the 33-year-old candidate. 

Advertisement

Mamdani also traveled to Washington, D.C., earlier this summer, where the mayoral hopeful and Ocasio-Cortez hosted a breakfast with national Democrats. Mamdani met with several progressive leaders, including Sen. Bernie Sanders, an early endorser of his campaign. 

CLICK HERE TO GET THE FOX NEWS APP

Still, New York Democratic Reps. Tom Suozzi, Dan Goldman, Gregory Meeks, Ritchie Torres, George Latimer and Grace Meng have yet to endorse Mamdani. 

Advertisement

Fox News Digital reached out to Jeffries and Clarke for comment but did not immediately receive a response. 

zohran mamdani,2025 2026 elections coverage,new york city,elections,socialism,politics

Continue Reading

Tendencias