El Papa Francisco aclaró que el documento sobre bendición a personas homosexuales, que ha producido un gran debate interno en la Iglesia, establece que “cuando una persona se acerca espontáneamente a pedirla (el sacerdote) no bendice la unión sino simplemente a las personas que la han solicitado juntas”.

En un encuentro con los miembros del dicasterio de la Doctrina de la Fe, encabezados por el prefecto, el cardenal argentino Víctor Fernández -autor del texto-, Francisco también aclaró que “estas bendiciones, fuera de cualquier contexto y forma litúrgia, no requieren perfeción moral par ser recibidas”.

“La intención de las bendiciones pastorales y espontáneas es es mostrar concretamente la cercanía el Señor y de la Iglesia a todos aquellos que, encontrándose en situaciones diferentes, piden ayuda para continuar y a veces para iniciar un camino de fe”, afirmó el Papa argentino.

El documento “Fiducia suplicans” señala que las bendiciones pastorales y no litúrgicas, no tienen nada que ver con una bendición sagrada, matrimonial.

No es la primera vez que el Papa, o el propio Víctor «Tucho» Fernández salen a aclarar los alcances de las bendiciones a las parejas del mismo sexo, una decisión que desató una feroz tormenta dentro de la Iglesia católica.

Los reformistas de la Iglesia alemana celebraron el documento, mientras en África, por ejemplo, los 781 obispos de diferentes países del continente rechazaron en conjunto el texto del Vaticano.

En varios países de América Latina también hubo voces de rechazo, y en especial entre los conservadores de la Iglesia católica de Estados Unidos, donde muchos obispos también están enfrentados con el Papa por su línea reformista y de apertura.

El Papa Francisco anunció por otra parte que el Dicasterio para la Doctrina de la Fe está trabajando en un nuevo documento sobre la dignidad humana.

“El primado de la persona humano y la defensa de su dignidad más allá de cualquiér circunstancia” resume el contenido del nuevo documento doctrinario.

El pontífice argentino auspició que este texto “pueda ayudarnos como Iglesia a estar siempre cerca de todos aquellos que, sin proclamas, en la vida concreta de todos los días, luchan y pagan de persona para defender los derechos de los que no cuentan”.

Francisco dijo que “también es necesrio hacer que “frente a diversos modes actuales de eliminar o ignorar a los otros, estamos en grado de reaccionar, con un nuevo sueño de fraternidad y de amistad social, que no se limite a las palabras”.

Aunque el debate polémico sobre las bendiciones pastorales a homosexuales del documento “Fiduccia Suplicans” ha producido un estallido polémico en la Iglesia, las discrepancias se mantienen en un nivel de un conflicto de baja intensidad y bajo control del Vaticano.

Pese al documento de los 781 obispos africanos en oposición a las bendiciones pastorales a los homosexuales, las críticas están encarriladas.

De hecho estos y otros temas irán a engrosar los debates que tendrán lugar en la segunda parte del Sínodo de los Sínodos, cuya primera parte se realizó en octubre pasado y la segunda y decisiva se realizará en el Vaticano en octubre próximo.