Los océanos están llenos de plástico. Los animales los consumen al igual que los microorganismos químicos que se desprenden de ellos. No se sabe aún el impacto que tienen en la salud de los mamíferos marinos, pero las redes de plástico de la pesca los convierten en víctimas.

Sustancias químicas tóxicas están presentes en plásticos en juguetes infantiles y productos de uso diario. Estas sustancias químicas pueden filtrarse y están relacionadas con graves daños para la salud.

Un Tratado Global sobre Plásticos para proteger la salud de futuras generaciones y brindar certeza a la industria será debatido esta semana en la Cumbre los Océanos en Niza. Para salvar a los niños y a los mares que los plásticos contaminan.

El oceanógrafo Simon Van Gennig (PhD) es un experto en la salud de los mares y los plásticos que los contaminan. Vive en Toulouse y trabaja en desarrollo en GLONET, un sistema global de predicción oceánica basado en redes neuronales, desarrollado por Mercator Ocean International.

“Trabajo en Mercator Ocean y estoy a cargo de un equipo que se encarga del monitoreo oceánico. Este equipo analiza nuestros sistemas. Producimos y generamos diariamente información sobre el estado del océano”, explicó a Clarín, en la conferencia de Niza.

-¿Cuál es el rol del sistema que ustedes utilizan?

– Diariamente, analizamos la temperatura, la superficie, las corrientes y el nivel del mar. Nos aseguramos de que los productos que generamos sean de buena calidad y los usamos para monitorear el océano. También creamos aplicaciones con estos productos. Utilizamos las corrientes de nuestro modelo para, por ejemplo, rastrear plásticos. Creamos aplicaciones que rastrean plásticos o que analizan los remolinos en los océanos, cómo se propagan.

-¿Cómo llega el plástico a los océanos y en qué cantidad actualmente?

-El plástico entra al océano debido a la actividad humana. La actividad humana se concentra principalmente en la tierra y una pequeña parte en el océano. Según la literatura, el 80 % proviene de la tierra y el 20 % de lo que llega al océano proviene de la pesca y la acuicultura. Por lo tanto, lo que llega desde la tierra entra al océano a través de los ríos y también, a lo largo de la costa, donde hay una alta densidad de población, como las grandes ciudades costeras.

-¿Cuánto absorbe el océano de ese plástico?

-En total, se estima que unos 8 millones de toneladas de plástico entran al océano cada año.

-¿Cuál es el impacto en algunos océanos? ¿Es mayor en el Atlántico o en el Pacífico?

-A grandes rasgos, existen diferentes cuencas. Si tomamos el Pacífico, tenemos el Pacífico Norte, el Pacífico Sur, el Atlántico, el Norte, el Sur y el Océano Índico. Encontramos mucho plástico en el Atlántico Norte. Pero también en el Océano Índico y en el Pacífico Occidental, porque también en Asia Oriental se produce mucho plástico y se recicla de forma deficiente. ¿Podemos decir que los océanos están totalmente contaminados o podemos rescatarlos? Bueno, nunca es tarde para salvar los océanos, pero es hora de actuar.

-¿El plástico se instala en un río o en un océano?

-Generalmente, en toda la costa que rodea una cuenca, el plástico generado se queda en ella. Por lo tanto, el país o la cuenca o el océano con mayor población a su alrededor tiene mucho plástico.

– ¿Qué pasa con esas 8 toneladas en los mares?

-La pregunta es ¿cuánto afecta esto a nuestros ecosistemas? ¿Qué viaja en los plásticos o en qué se convierte el plástico una vez que llega al fondo del océano? La comunidad científica está trabajando arduamente para comprender todos estos aspectos.

-¿Qué impacto tiene ese plástico en los peces y en su alimentación?

-El plástico puede venir en botellas grandes. Pero luego se fragmenta y puede convertirse en partículas diminutas. Así que existe un gran temor en la comunidad por el plástico porque es tan pequeño que, ya sea un pez o algo mucho más pequeño, hay algo para cada uno de ellos, de su tamaño, que es un poco de plástico del tamaño de lo que comen.

– Eso significa que pueden confundir lo que comen y optar por el plástico, lo que puede causar muchos problemas, en términos del crecimiento de los organismos o su reproducción. Todos estos aspectos se están estudiando.

-¿Cómo influye el alto nivel de vida en ciertos países en la contaminación del océano?

-Consumen más plástico, más basura y más cosas que luego tiran al océano. No sé cuál es el papel de las sociedades ricas. Creo que lo que generalmente se observa es que, si un país tiene una buena infraestructura para recolectar el plástico, sabe cómo reciclarlo y se asegura de que no termine en el medio ambiente, llega mucho menos al océano.

-¿El secreto es reciclar el plástico adecuada mente?

-El gran objetivo a nivel mundial es determinar qué país es bueno en el reciclaje. En general, se trata de los países del norte y los lugares donde no somos tan buenos. Y si tuviéramos que invertir en buenas acciones, sería para construir infraestructura en lugares donde sabemos que consumimos mucho plástico y no somos muy buenos en ello.

-¿De qué tipo de plástico hablamos?

Algunos estudios analizaron todo el plástico recolectado e indicaban que más de la mitad del plástico observado tenía una vida útil inferior a 30 días. Por lo tanto, el plástico de un solo uso es el más problemático.

-¿Dónde se instala el plástico en el océano?

-Hablamos de una o dos piezas por metro cuadrado, o 10 piezas por cada 100 metros cuadrados, en ese orden. Y luego el resto simplemente cae al fondo del océano. El problema es que no somos muy buenos observando el fondo del océano. Así que estábamos creando mucha tecnología nueva para ir a observarlo.

Por ejemplo, los ROV, que son vehículos operados a distancia. Estos son como pequeños submarinos, que toman fotos del fondo del océano. Y empezamos a intentar averiguar dónde está todo este plástico, i está en el fondo del océano, si es malo que esté ahí o si es mejor sacarlo. Intentamos resolver este problema.

-¿Cuánto plástico que hay en el océano?

-Todavía no sabemos. Hemos estimado la cantidad. Hablamos de entre 75 y 200 millones de toneladas de plástico en el océano actualmente. Pero si tuviéramos que decir dónde está todo… Estamos consumiendo plástico a través de los peces.

-¿Son tóxicos los peces ahora?

-Encontramos plástico en las entrañas de los peces. Los científicos han estado abriendo peces para ver qué tenían y encontraron una gran cantidad de plástico. Ahora bien, el temor no es solo el plástico, sino también el uso de muchos aditivos en él.

-Estos son químicos que añadimos al plástico para hacerlo más resistente si queremos crear un objeto fuerte, o aditivos antiincendios, si queremos que el plástico no se queme. Y todos estos componentes están presentes en el plástico cuando entran al agua.

-¿Esos químicos se liberan en el océano?

Existe mucho temor en la comunidad de que todos estos químicos se liberen y no lo sepamos… Así que nos hemos estado envenenando con esta, si le gusta, esta dinámica. Liberamos químicos en el océano. No sabemos si la cantidad de desechos es suficiente para causar daño, pero sabemos que los liberamos. Es algo que se está estudiando.

-En el Atlántico Sur hay al menos una flota de 2000 barcos pescando des China, Taiwán y España sin control. ¿Cuál será el impacto de todo esto en esas aguas?

Sería interesante. No lo sé. Nunca vuelven a casa. Son fábricas, barcos, lo son todo. Sí, sí, sé que este tipo de lugares de acampada de la pesca industrial generan contaminación en la zona de Argentina. No sé si, por ejemplo, encontramos mucho material plástico proveniente de la pesca.

Lo que se puede hacer al respecto es mediante regulaciones. Estamos intentando ratificar un tratado sobre plásticos donde buscamos definir, o también el tratado BB&G, que trata sobre la biodiversidad, más allá de las jurisdicciones nacionales. Necesitamos hacerlo a través del multilateralismo. Necesitamos ponernos de acuerdo sobre cómo nos comportaremos en estas aguas que no pertenecen a nadie.