El ataque con cuchillo perpetrado la noche del lunes por un adolescente en una iglesia cristiana en Sidney, en el que resultaron heridos un sacerdote y varios feligreses, fue «un acto terrorista», según declararon este martes fuentes de la Policía de Australia.

«Después de considerar todo el material, declaré que fue un incidente terrorista«, indicó en conferencia de prensa la comisaria policial del estado de Nueva Gales del Sur, Karen Webb. En paralelo, precisó que se trató de un acto de «extremismo» con motivaciones religiosas y que las víctimas «tienen suerte de estar vivas».

La jefa policial agregó que el atacante se dirigió «con cierto grado de premeditación» a la iglesia asiria del Buen Pastor del distrito Wakeley, unos 30 kilómetros al suroeste del centro de Sídney, para realizar este ataque con cuchillo.

Webb también aclaró que el atacante, un adolescente de 16 años que no fue identificado, no figuraba en ninguna lista de vigilancia terrorista.

Más tarde, Mike Burgess, jefe de la agencia de inteligencia doméstica australiana (ASIO, siglas en inglés), afirmó que el sospechoso parece haber actuado por su cuenta y que no hay motivo para elevar el nivel de amenaza terrorista. «En este punto parece que fueron acciones de un individuo», afirmó.

También declaró hoy en una rueda de prensa en Canberra que las autoridades de su país investigarán si el atacante tenía conexiones con otros extremistas.

«En este momento, no tenemos indicios de ello. Pero es prudente que lo hagamos para determinar que no hay amenazas o peligros inmediatos para la seguridad», precisó Burgess, junto al primer ministro australiano, Anthony Albanese, quien remarcó que este ataque es «perturbador» y que en su país no hay lugar «para la violencia extremista».

Según la cadena pública australiana ABC, el adolescente, quien también sufrió heridas en los dedos, estuvo en libertad bajo fianza hasta su última comparecencia ante un tribunal en enero pasado por buena conducta tras haber sido acusado de una serie de delitos, incluida la posesión de un cuchillo, a raíz de un incidente en una estación de trenes en Sídney en noviembre pasado.

El ataque, que sucedió alrededor de las 19:00 hora local (9:00 GMT) del lunes en la Iglesia asiria del Buen Pastor del distrito Wakeley, fue perpetrado mientras la ceremonia religiosa era retransmitida en directo a través de las redes sociales.

En el vídeo se observa como este adolescente vestido de negro se acerca al altar donde el obispo Mar Mari Emmanuel -de 53 años y miembro de una secta ultraconservadora de la Iglesia Ortodoxa asiria que ha criticado el Islam en sermones públicos divulgados en las redes- daba su sermón.

Allí, el joven aparece apuñalando al obispo en repetidas ocasiones, incluso cuando se encontraba en el suelo, en un incidente en el que salieron heridos el sacerdote Isaac Royel y otros feligreses más que dieron auxilio al religioso y detuvieron al agresor.

La comisionada de la Policía de Nueva Gales del Sur explicó esta mañana que el obispo y el sacerdote, que sufrieron laceraciones en la cabeza y el otro en el hombro, «tienen suerte de estar vivos», al reducir el número de heridos de consideración de cuatro a dos que se calculaban inicialmente.

A raíz del incidente se han producido disturbios alrededor de la iglesia, ubicada en una multicultural comunidad del suroeste de Sídney, entre las autoridades y centenares de pobladores que pedían que les entregaran al responsable del ataque, según se aprecia en vídeo publicados en las redes sociales.

Estos disturbios dejaron a varios agentes heridos, así como daños a las propiedades del vecindario y vehículos policiales. Este apuñalamiento se produce unas 48 horas después de otro incidente con arma blanca registrado en un centro comercial de la ciudad australiana, que se saldó con siete muertos -incluido el agresor-.

La Policía descartó que el ataque del sábado fuera terrorista e investiga este lunes si se debe a un feminicidio.

Australia -en donde la mayoría de los ataques han sido perpetrados por yihadistas armados con cuchillos o armas de fuego en las ciudades de Melbourne y Sídney- rebajó en 2022 la alerta terrorista de «probable», nivel que regía desde 2014, a «posible» (del cuarto al tercer nivel más alto sobre una escala de cinco).

Al menos seis personas murieron apuñaladas y otras resultaron heridas el último sábado en un shopping de Sidney. Entre las víctimas fatales había una bebé de 9 meses.

El atacante se paseó por el popular centro comercial Westfield Bondi Junction, al este de Australia, amenazando a cualquier persona que se le cruzaba por el camino hasta que una mujer policía lo enfrentó y lo mató de un disparo. Las autoridades investigaban si se trató de un ataque terrorista.

El agresor, de unos 40 años, ingresó al shopping a las 15:10 hora local -sobre la madrugada argentina- salió al poco tiempo y regresó unos diez minutos después cuando se enfrentó a varias personas que recorrían el lugar.

«Seis personas fueron mortalmente apuñaladas y un hombre fue abatido», indicó la Policía de Nueva Gales del Sur en un comunicado. Cinco de ellas murieron en el acto, mientras que la restante falleció mientras era atendida en un hospital.

Con información de EFE y AFP.