Después del rey Carlos III, Kate, la futura reina británica, reveló finalmente que tiene cáncer y ha estado recibiendo una “quimioterapia preventiva”. No se sabe qué clase de cáncer tiene pero no regresará a sus actividades hasta que se recupere completamente.

En un emotivo video, grabado en un banco del parque de Windsor el miércoles, cuando las presiones para que se revelara ”la verdad” se habían vuelto insoportables para ella y William, heredero al trono, la más popular miembro de la familia real decidió contar su enfermedad y solidarizarse con los que la padecen.

En el video se la ve serena, vestida con jeans y su favorita camiseta marinera azul y blanca. Apenas dura 2 minutos y 15 segundos. Se grabó en una sola toma y fue un secreto hasta ayer, cuando dio la noticia.

Su voz se quiebra ligeramente cuando, tras contar su operación abdominal y revelar que posteriores estudios descubrieron que había células cancerosas.

Fue un “shock”. Explica que el tiempo transcurrido fue para poder explicarles a sus tres hijos, George, el futuro rey, Charlotte y al pequeño Louis su estado de salud.

La princesa, de 42 años, agregó que les ha dicho a sus hijos: “Estoy bien y cada día me hago más fuerte centrándome en las cosas que me ayudarán a sanar; en mi mente, cuerpo y espíritu”.

Una de las principales razones para mantener la condición en privado hasta ahora fue el deseo abrumador de proteger a los niños, que iniciaron las vacaciones de Pascua a las 4 de la tarde de este viernes. La pareja los lleva y los trae del colegio.

En el conmovedor mensaje, filmado por los estudios de la BBC en Windsor, se ve a la princesa agradeciendo por “todos los maravillosos mensajes de apoyo”. Continúa diciendo que “han sido un par de meses increíblemente difíciles para toda nuestra familia”.

“En enero me sometí a una cirugía abdominal importante en Londres y en ese momento se pensaba que mi condición no era cancerosa. La cirugía fue exitosa” continuó. “Sin embargo, las pruebas realizadas después de la operación revelaron que había cáncer. Por lo tanto, mi equipo médico me recomendó que me sometiera a un tratamiento de quimioterapia preventiva y ahora me encuentro en las primeras etapas” admitió.

“Esto, por supuesto, fue un gran shock. William y yo hemos estado haciendo todo lo posible para procesar y gestionar esto de forma privada por el bien de nuestra joven familia. Como pueden imaginar, esto ha llevado tiempo. Me ha tomado tiempo recuperarme de una cirugía mayor para poder iniciar mi tratamiento”, dijo.

“Pero, lo más importante, nos ha tomado tiempo explicarles todo a George, Charlotte y Louis de una manera apropiada para ellos, y asegurarles que voy a estar bien”, continuó.

“Como les he dicho: estoy bien y me estoy fortaleciendo cada día , al concentrarme en las cosas que me ayudarán a sanar; en mi mente, cuerpo y espíritu. Tener a William a mi lado también es una gran fuente de consuelo y tranquilidad. Al igual que el amor, el apoyo y la amabilidad que muchos de ustedes han mostrado. Significa mucho para ambos”.

Dijo que también estaba pensando en otras personas, “cuyas vidas se han visto afectadas por el cáncer”. Les pidió “que no pierdan la fe ni la esperanza”. “No están solos”, agregó.

El rey y la reina han dicho que están “muy orgullosos” de la princesa de Gales. En un comunicado, el Palacio de Buckingham dijo que los monarcas deseaban rendir homenaje a la “valentía de Kate al hablar como lo hizo”.

Harry y Meghan, duques de Sussex, que no tienen vínculo con William y Kate, emitieron un comunicado deseándole salud y curación desde California.

BBC Studios grabó el video y aclaró que no tuvo participación editorial. Una operación fluida para grabar y publicar el video habría sido particularmente importante, dada la brutal y escandalosa reacción a la foto editada de Kate del Día de la Madre, que fue retirada por agencias internacionales por manipulación.

La futura reina británica ha decidido no revelar qué clase de cáncer tiene. La privacidad es su derecho. Su video revela que está recibiendo un tratamiento de “quimioterapia preventiva”, que comenzó a fines de febrero. Está en su más temprana etapa.

Se sometió a una cirugía abdominal mayor el 16 de enero, que inicialmente se pensó que era por una afección “no cancerosa”. Naturalmente en una operación de esas características se hace una biopsia. Al menos tardan 10 días los resultados. Allí se detectó la enfermedad en la London Clinic, la más exclusiva de Londres.

Una destacada oncóloga dio una idea de lo que implica la quimioterapia preventiva. La profesora Pat Price, presidenta de Radioterapia de Reino Unido, dijo que la cirugía parecía haber eliminado el cáncer. “A veces, en algunos tumores, existe un poco de preocupación sobre si queda algo o si hay riesgo de que regrese”, explicó. Los médicos suelen utilizar quimioterapia preventiva, generalmente, en forma de tabletas o inyecciones. “Esto a menudo se administra por un período de cuatro o seis meses y luego se termina” dijo, y “con suerte, todo estará bien entonces”.

La llegada de esta biopsia habría sido la razón por la que el príncipe William anuló -“por razones personales”- su presencia en la ceremonia de memoria de su padrino, el rey Constantino de Grecia, que presidió finalmente la reina Camilla en la capilla de Windsor.

Los hijos han sido la mayor preocupación de los príncipes de Gales y su vulnerabilidad cuando estaban en el colegio, expuestos. Ahora, si la salud lo permite, irán a su casa de campo en Norfolk. George ha cumplido 10 años, la princesa Charlotte tiene 8 y el príncipe Louis, 5.

Los príncipes de Gales han decidido retirarse del ojo público. No asistirán al tradicional servicio de Pascua en la capilla St. George en Windsor y William retomará sus actividades después de esta festividad.

La monarquía “Slim” que planificaba Carlos III tras la coronación se ha vuelto una realidad por las enfermedades. Él sufre cáncer y está en tratamiento. Es sobre la reina Camilla y sobre el príncipe William sobre los que recae todo el peso, junto a Anne, la princesa royal. El padre rechazó la oferta del príncipe Harry de ayudarlo.

El reino está conmovido ante la noticia, luego de una histeria mediática y en las redes donde se sugería que la princesa sufría cáncer y se estaba separando de William, que tenía una amante: Rosie, una marquesa.

Así como los políticos británicos y el arzobispo de Canterbury habían pedido ayer dejar a Kate en paz, hoy la acompañan con declaraciones de solidaridad.

El arzobispo de Canterbury elogió el “espíritu de optimismo de Kate ante noticias tan difíciles”.

“Mis oraciones están con la princesa de Gales, el príncipe de Gales y sus hijos en este momento tremendamente difícil. Me uno a todo el país y al mundo en oración por su total recuperación”, escribió en Twitter/X.

Justin Welby agregó que estaba “complacido de saber que ella se siente más fuerte cada día”. “Su valentía al compartir de esta manera y su compromiso continuo de apoyar a los demás habla de su compasión y sentido de servicio. Únase a mí para orar por la Familia Real mientras se ocupa de este asunto privado e insto a las personas a respetar su privacidad en este momento”, pidió la máxima autoridad de la iglesia anglicana.

La Casa Blanca deseó a Kate una recuperación total. «Obviamente todos escuchamos la terrible noticia», dijo Karine Jean-Pierre, la secretaria de prensa. «Nuestros pensamientos están con la duquesa de Cambridge y sus familiares y amigos durante este momento increíblemente difícil y ciertamente, le deseamos una recuperación completa».

Kate ostentaba el título de duquesa de Cambridge antes de que el rey subiera al trono.

“Ciertamente le deseamos una recuperación completa. Y creo que es importante que respetemos su privacidad, especialmente en este momento. Sé que la gente preguntará si el presidente ha hablado con ella o con la familia. Puedo decir ahora mismo que no tenemos nada que compartir en este momento… Estamos increíblemente tristes al escuchar la noticia” dijo la vocera de la Casa Blanca.

El mundo saluda el coraje de Kate. Nadie reconoce públicamente que hoy la Familia Real británica enfrenta una de sus más profundas e inesperadas crisis de sobrevivencia.Será Anne, la princesa Royal, la reina Camilla, y Edward y Sophie, los duques de Edimburgo, los que deberán defender y mantener ,en estos duros tiempos, el estandarte real.