Connect with us

INTERNACIONAL

Sofia Piñeiro, enfermera argentina en la Franja de Gaza: «Lo que he visto en Rafah es verdaderamente desesperante»

Published

on


Desde el 2017, la enfermera argentina Sofia Piñeiro trabaja para la organización humanitaria francesa Médicos sin Fronteras como manager de enfermería y recorre los conflictos del mundo. Desde Yemen, Guinea Bisau, Mozambique a Bangladesh y ahora Gaza, exactamente en el distrito de Rafah, en el sur de la Franja, de donde acaba de regresar.

Educada y graduada en la Universidad Austral, para esta porteña de 31 años su experiencia humanitaria en la Franja se volvió inolvidable y extremadamente peligrosa porque los trabajadores humanitarios se convirtieron en un objetivo en el conflicto.

Este es su testimonio a Clarín, tras su salida de Gaza.

-¿Esta es una guerra distinta a otras que viviste?

-Este es una guerra distinta a otras porque absolutamente creo que es algo muy importante para recalcar. Es justamente lo distinto, y que no sé si todo el mundo tal vez sabe pero no tiene tanta conciencia, de que la Franja de Gaza tiene 40 km de largo de norte a sur y desde la costa hasta el punto más más ancho son 10 kilómetros. Estamos hablando de un territorio verdaderamente chico, con todas las fronteras cerradas, en donde el hostigamiento de Israel es constante y muy determinante. Y la gente no puede salir de este mismo lugar, que es bombardeado. En ese momento el mismo refugiado que está dentro de Gaza, el desplazado, al mismo tiempo sigue escuchando las bombas de fondo, sigue escuchando cómo continúa la ofensiva y cómo la línea de guerra incluso se va acercando, kilómetro a kilómetro, hasta donde están desplazados ahora, buscando refugio, que es el sur de Gaza, que se llama Rafah. Ellos están escuchando cómo la ofensiva está a 5 o 7 km de donde están. Eso hace que tiemble la ventana del edificio o el plástico de la carpa.

-¿Y cuáles son las condiciones en las que se desarrolla tu trabajo allí?

Advertisement

-Médicos Sin Fronteras tiene diferentes proyectos dentro de Gaza, que aún así están muy lejos de ser una respuesta humanitaria. La respuesta de Médicos sin Fronteras está absolutamente limitada por la cantidad de suministros que podemos entrar, por la cantidad de personal que se puede tener en el terreno y por la cantidad de sitios que se pueden visitar y llegar a la población.

Yo estaba en uno de esos proyectos en el sur, en la parte donde están todos los desplazados ahora, con dos centros de salud. Y teníamos un centro de salud, que era una estructura previa de Gaza , que había sido cerrada durante el conflicto. Médicos Sin Fronteras lo que hizo fue rehabilitarla y volver a ponerla a funcionar. Y después, una segunda estructura fue encontrar un lote vacío , en donde se había armado un campo de refugiado y construirlo de cero. Fue poner piso de cemento, los primeros pilares de madera y una tela de plástico para usar de paredes. En pocos días uno puede tener una estructura en donde tener consultorios para atender. Entonces contratamos a los médicos de Gaza y enfermeros, que son de altísimo nivel y de muchísima experiencia, para ponerlos dentro del centro de salud y generar nuevos puntos de atención para los desplazados.

-¿En qué condiciones llegaban los enfermos?

-He estado en diferentes lugares de emergencias humanitarias a esta altura y lo que he visto en Rafah es verdaderamente desesperante. Por la cantidad de gente que hay y el hecho de tener un campo de refugiados adentro de una ciudad.

Sofía Piñeiro. Foto: MSFSofía Piñeiro. Foto: MSF

Lo que se ve en el sur son calles despobladas de autos y totalmente tomadas por peatones. Se ven carpas en donde mires.Las personas que se fueron desplazando hacia el sur, algunos se instalaron en los edificios que ya existían. Otras tomaron escuelas y lugares para hacerlos también refugios. Y hay muchas otras que tuvieron que montarse su propia carpa para tener en donde dormir, para cubrirse del viento y de la lluvia. Venimos de unos meses de invierno también en esa latitud. Entonces fue de verdad muy duro también para ellos pasar todo el invierno en una carpa, totalmente hacinados.

Y cuando estás por el sur de Rafah ahora hay gente por todos lados. Por donde mires vas a encontrar gente:una familia, una carpa, en las veredas, en la calle, en cualquier pedazo de lote que hubiera quedado sin edificar. Ahora también hay carpas en toda la parte de la costa, sobre la playa. Las carpas llegan hasta realmente muy cerca del agua. Realmente no hay espacio, no hay lugar y la gente está muy desesperada. La tensión que hay en el aire es muy grande.

-¿Y la reacción de los pacientes?

-Muchas veces me pasó de ver pacientes que llegan al consultorio. En cuanto se los mira a los ojos, se los escucha y se les dice que se los va a ayudar… un colapso emocional de ponerse a llorar y agradecer. Quieren contarte su historia y que realmente ya no saben qué hacer. La gente está realmente muy sobrepasada. Es muy desesperante verlos en ese estado.

Advertisement

-¿Y qué hacían con los pacientes con enfermedades terminales, , con diálisis, con cáncer, con quimioterapia?

-Es una respuesta muy triste, que tuve que dar muchas veces durante la misión. De decir : “lo siento mucho, no tengo tratamiento disponible para vos ahora”. Es una realidad. Hay muchísimos pacientes que han quedado sin un lugar de atención. Hay hospitales dentro de Rafah que siguen funcionando. Pero no todos tienen la capacidad médica para absorber el total de todos estos pacientes de la Franja. Además de que hay muchísimos servicios que se tuvieron que desarrollar en servicios de trauma para atender a los heridos.

-Hemos visto a muchos hospitales rearmarse y reorganizarse para poder dar prioridad a la atención de los heridos. Hemos visto quirófanos ,que antes eran de maternidad , y hoy se usan para cirugías. Hemos visto salas de espera convertirse en salas de internación. Hemos visto sacar las camas para poder poner heridos en el piso, para que entren más cantidad de personas en una sala . Eso hace que el sistema esté absolutamente colapsado. Entonces un paciente con diálisis- no sé si había una ONG que tenía alguna posibilidad de tener una máquina de diálisis- pero si no, no la tienen. Ni hablar de la quimioterapia y ni hablar de muchísima medicación de pacientes crónicos, que hoy no está disponible. Están todas las farmacias cerradas y los suministros no entran. Entonces es realmente muy difícil para esa misma gente, que muchas veces llegaron al centro de salud a pedir ayuda y lamentablemente no pudimos ayudarlos.

-El secretario general de Médicos Sin Fronteras dijo el viernes que “hay armas nuevas en este conflicto”, que producen heridas fatales, que no se pueden curar y que no se habían usado jamás antes ¿Qué clase de heridas son?

Un desplazado palestino en la ciudad de Rafah. Foto ReutersUn desplazado palestino en la ciudad de Rafah. Foto Reuters

-Yo creo que en algún punto Christopher Lockyear se refiere un poco a dos tipos de heridas. Hay heridas de un tipo de explosivo y de quemaduras , que son muy difíciles de curar. Son curaciones de heridas que hubieran llevado en un sistema de salud normal, probablemente, varias cirugías para reconstruir la piel. Muchas veces necesita varias intervenciones, quedarse internado en un hospital o recibir curaciones todos los días. Hay amputaciones que en otros momentos, en un sistema de salud normal, se hubiera podido optar por poner un yeso, ver cómo evoluciona la fractura, o se pueden poner unos fijadores externos por fuera de la pierna. Hoy, en estas condiciones de salud en Gaza , no sabemos si ese paciente va a poder volver la semana que viene. No sabemos si el hospital va a estar abierto la semana que viene, con lo cual, la amputación hoy es el camino más seguro para que esa persona ,al menos, pueda seguir con vida. Y también hay otras armas que se están usando en esta guerra, no tan literales por así decirlo, que es la hambruna y la falta de ayuda humanitaria. Directamente están afectando a la población de ese otro lado.

-¿Hay una política para eliminar a los trabajadores humanitarios? ¿Y qué política tienen ustedes para salvarse en medio de este clima? Y especialmente los que quedaron en Gaza, porque muchas de las ONG ya se retiraron.

-El tema de seguridad, qué política se está usando sobre la ayuda humanitaria no te las sabría contestar exactamente, porque realmente no sé qué palabras usar. Pero se siente todos los días el rechazo hacia la ayuda humanitaria. Te lo puedo garantizar. Por los problemas que hay en la frontera, por los problemas que hay en los transportes, por el problema que hay para traer el personal adentro de Gaza, por las limitaciones que se nos dan para en donde trabajar, en dónde vivir. Sin duda te puedo garantizar que es un rechazo y el ataque ahora al World Central Kitchen.

El hospital al-Salam de Khan Yunis, destruido. Foto AFPEl hospital al-Salam de Khan Yunis, destruido. Foto AFP

No es la primera vez donde hay un ataque directo sobre la ayuda humanitaria. Por ejemplo se han bombardeado casas de Médicos Sin Fronteras que Israel sabía que estaban allí, que tenían las coordenadas, que se avisó que hay familias civiles de Médicos Sin Fronteras viviendo ahí, del personal nacional. Y aún así fueron atacadas dos veces.

-¿Qué hacen ustedes para salvarse en una situación como esa ? ¿Cómo es su seguridad?

Advertisement

-Es un gran equipo encargado de ir moviéndonos, como si fuera una ficha por el tablero, al lugar dentro de Gaza que se queda más seguro. Hay especialistas que se van encargando de leer militarmente el contexto y entender qué significaría una ofensiva por este lado de Gaza y qué significaría una ofensiva por este otro lado de Gaza. Lo que se hace es informar las coordenadas, en donde nosotros tenemos nuestras casas .Y así como había hecho el World Central Kitchen, avisar a las autoridades israelitas, cuando hay un movimiento en el auto, del punto A al punto B, en qué horario y el vehículo tiene que estar identificado para que para que sea reconocible. Y sin embargo para World Central Kitchen- que se movía de noche- esto no fue una garantía de nada. Con lo cual, claramente Israel pone a todas las ONGs que estamos trabajando en el terreno, en una posición muy incómoda, de mucho miedo, para pensar que su mecanismo de seguridad evidentemente no siempre funciona. Sin dudas eso cambia tus reglas de juego: a saber cómo moverte bajo un sistema de seguridad israelita, que no siempre te va a contestar.

-¿Ustedes pueden salir de la base o no?

-Sí, nosotros todos los días salíamos de la base en donde dormíamos, que es Al Mawasi en la zona costera, en autos con identificación en el techo, para que justamente lo vean los drones. Y nos movíamos a dos centros de salud y un Hospital de Maternidad, que también apoyamos en la parte de postparto y post cesáreas. Entonces todos los días salíamos a las 8 de la mañana y estábamos hasta las 4 de la tarde. Y a esa hora es el horario que habíamos definido volver a la base, porque era cuando se acaba la luz del día y no queríamos estar justamente moviéndonos de noche.

-¿Y cómo viven los médicos y enfermeras, en una situación imposible emocionalmente como esta en Gaza ?

-El personal sanitario de Gaza verdaderamente se robó mi corazón. Y no tengo más que mis respetos. Para mí fue un honor estar trabajando con ellos, porque profesionalmente no me había pasado nunca en una emergencia sanitaria, estar trabajando con semejante nivel de experiencia y profesionalismo.

Y por otro lado, humanamente, son justamente las personas que llegaban todos los días, sabiendo que ellos estaban igual de afectados que el paciente. Todos los días al centro de salud, firmes como un mástil, para atender a todas las personas que pudieron. Realmente ya se había convertido más allá de un trabajo para ellos. Verdaderamente era estar presentes, porque la gente los necesita y es su propia población a la que estaban atendiendo, sus propios pacientes.

-Han perdido sus hospitales…

Advertisement

-Y son médicos que han trabajado muchísimos años en hospitales que fueron bombardeados. Su propio lugar, en donde habían trabajado 20 años, hoy se encontraba en ruinas . Entonces ir a trabajar a un centro de salud, hecho de plástico, de chapa y de cemento, yo creo que también les llevó ,como una cierta humildad , para decir : “yo voy a venir a atender acá, por más de que tenga 30 años de experiencia en terapia de Pediatría”. Y realmente se han calzado el estetoscopio y a donde sea que puedan seguir atendiendo, lo van a seguir haciendo.



Source link

INTERNACIONAL

Guerra en Ucrania: afirman que Rusia lanzó por primera vez un misil balístico y escala el conflicto

Published

on



La fuerza aérea de Ucrania dice que Rusia lanzó un misil balístico intercontinental desde su territorio como parte de un ataque el jueves por la mañana.

Es la primera vez que Moscú utiliza un arma de este tipo en la guerra. La declaración de Ucrania no deja claro cuál fue el objetivo del misil balístico intercontinental y si causó algún daño.

Se produce después de que Ucrania disparara por primera vez misiles Storm Shadow de largo alcance suministrados por el Reino Unido contra objetivos dentro de Rusia.

El gobierno del Reino Unido no ha comentado sobre los informes, pero el secretario de Defensa dice que «la acción de Ucrania en el campo de batalla habla por sí sola».

Continue Reading

LO MAS LEIDO

Tendencias

Copyright © 2024 - NDM Noticias del Momento - #Noticias #Chimentos #Politica #Fútbol #Economia #Sociedad