En medio de una fuerte polémica por su designación como fiscal general de Donald Trump, el ex representante Matt Gaetz anunció este jueves que retira su nombre de la consideración, un fuerte golpe para el presidente electo, que veía a este controvertido político como un “leal” en un cargo clave.

«Tuve excelentes reuniones con los senadores ayer», escribió Gaetz en una publicación en X. «Agradezco sus comentarios reflexivos y el increíble apoyo de tantos. Si bien el impulso fue fuerte, está claro que mi confirmación se estaba convirtiendo injustamente en una distracción para el trabajo crítico de la transición entre Trump y Vance», agregó en una velada referencia a que no tenía el apoyo suficiente de los senadores para su confirmación.

«No hay tiempo que perder en una pelea innecesariamente prolongada en Washington, por lo que retiraré mi nombre de la consideración para servir como Fiscal General. El Departamento de Justicia de Trump debe estar en su lugar y listo el día 1», finalizó.

«Sigo totalmente comprometido a ver que Donald J. Trump sea el presidente más exitoso de la historia. Siempre me sentiré honrado de que el presidente Trump me haya nominado para dirigir el Departamento de Justicia y estoy seguro de que salvará a Estados Unidos», escribió Gaetz, ex representante por Florida.

Gaetz, que había sido nominado por Trump la semana pasada, enfrentó vientos en contra significativos en el proceso de confirmación, sobre todo porque volvieron a salir a la luz acusaciones anteriores contra el ex congresista, quien enfrentó una investigación del Departamento de Justicia que involucró acusaciones de tráfico sexual y sexo con un menor.

Gaetz ha negado vehementemente esas acusaciones y una investigación terminó con el Departamento de Justicia sin acusaciones en su contra. El legislador renunció la semana pasada a su banca, con lo que la investigación que el comité de ética de la Cámara estaba llevando a cabo no pudo concretarse. Sin embargo, había fuertes presiones para que los informes sobre el caso se dieran a conocer al público.

El panorama se complicaba aún más para Gaetz porque, según reveló CNN, la mujer que dice haber tenido relaciones sexuales con el ex legislador cuando ella era menor de edad le dijo al Comité de Ética de la Cámara de Representantes que tuvo dos encuentros sexuales con él en una fiesta en 2017.

La mujer, que tenía 17 años en ese momento, testificó que el segundo encuentro sexual, que no se había reportado anteriormente, incluyó a otra mujer adulta. También testificó sobre ambos encuentros sexuales en una declaración civil como parte de una demanda relacionada, dijeron las fuentes.

Después de que se le pidiera un comentario para este artículo, Gaetz anunció que se retiraba como candidato a fiscal general.

La renuncia de Gaetz es un fuerte golpe para Trump, que esperaba colocar a un hombre incondicional al frente de un cargo estratégico, desde donde se esperaba que hiciera una fuerte reforma en la Justicia, que el presidente electo considera que está sesgada en su contra.

«Aprecio los recientes esfuerzos de Matt Gaetz in buscar la aprobación para ser Fiscal General. Lo estaba haciendo muy bien, pero al mismo tiempo, no quería ser una distracción para el Gobierno, por el que tiene mucho respeto. Matt tiene un gran futuro, y espero ver todas las grandes cosas que puede hacer», escribió Trump en Truth Social.

Considerado un extremista MAGA, Gaetz era un miembro muy resistido dentro del Congreso, incluso por buena parte de los republicanos. Se ganó el odio de muchos cuando encabezó una revuelta radical que terminó expulsando al líder de la cámara, Kevin McCarthy, y seguramente entendió que su designación no sería aprobada en el Senado.

Pero no es el único caso controvertido en las designaciones para su futuro gabinete. El ex presentador de Fox News Pete Hegseth, elegido por Trump para secretario de Defensa, se reunirá con senadores en el Capitolio este jueves después de que los registros policiales revelaran nuevos detalles sobre una acusación de agresión sexual en su contra, algo que él niega.

Otro es Robert F. Kennedy Jr., el teórico de la conspiración y escéptico de las vacunas seleccionado para secretario de Salud y Servicios Humanos. Kennedy ha sido acusado de manosear a una niñera de la familia, algo que ha dicho que no recuerda haber hecho.

Estas controversias desnudan las debilidades del proceso de «vetting» del magnate, que tradicionalmente debe incluir un minucioso proceso de investigación personal de los candidatos. Trump muchas veces se guía por sus instintos, su búsqueda de lealtad y en esa tendencia puede elegir personas que presentan manchas en sus fojas.