«Estoy muy feliz de estar aquí, es un lindo paso y desafío en mi carrera futbolística. Espero poder aprovecharlo de la mejor manera». Adam Bareiro ya cambió el chip. Sin lugar en la consideración de Marcelo Gallardo por no encajar en sus gustos futbolísticos -tal como explicó-, ya está en el Norte de Brasil para ser presentado oficialmente en Fortaleza, el nuevo club en el que intentará recuperar aquel nivel de San Lorenzo que llevó a River a poner u$s 4,5 milllones (un millón más que su cláusula).

La operación, que tiene un monto final de u$s 3,5 millones (u$s 1,8 millones iniciales más u$s 1,7 millones en objetivos alcanzables) por el 70% del pase, le permite a River recuperar la totalidad de la inversión hecha por su pase (hay que sumar el millón de dólares que pagó el Al Rayyan por su préstamo) y liberar un cupo de extranjero clave para usar en lo inmediato en este mercado de pases: además de Juanfer Quintero, el otro apuntado es el chileno Lucas Cepeda, por quien en la dirigencia del club de Núñez esperan llegar a un acuerdo con Colo Colo en el transcurso de esta semana.

Sin goles en los 567′ que estuvo en cancha repartidos en 16 partidos y presente el jueves pasado en el Camp para despedirse de Gallardo y el plantel, el entrenador argentino Juan Pablo Vojvoda lo pidió expresamente en medio de la preparación del cruce por Copa Libertadores contra Vélez en agosto y un Brasileirao en el que debe recuperarse urgentemente para salir de un 18° lugar (10 puntos en 12 fechas) que le estaría significando el descenso.

«Estoy con muchas ganas de conocer al cuerpo técnico y a mis compañeros y obviamente de ponerme la camiseta de Fortaleza», agregó Bareiro, en un diálogo con Bora Leão cuando recién arribaba a Brasil. Ahí, compartirá plantel con los argentinos Gastón Ávila (cedido desde el Ajax hasta fin de año), Emanuel Brítez, Eros Mancuso, Tomás Pochettino, Emmanuel Martínez y Juan Martín Lucero. En la delantera, justamente, competirá contra este último y Deyverson.