Luego de su especial última doble fecha de Eliminatorias Sudamericanas con la Selección Argentina, que no finalizó de la mejor manera para él tras su expulsión ante Ecuador, Nicolás Otamendi regresó a Portugal para continuar con la temporada en el Benfica. Y este viernes fue titular y capitán ante Santa Clara, por la quinta fecha de la Primeira Liga (torneo portugués), pero con un desenlace inesperado: cometió un error justo sobre el final del partido que dejó sin triunfo a su equipo y que decretó el empate final por 1-1.

¿Qué sucedió? Ya en tiempo adicional, Otamendi intentó pasarle de cabeza a su arquero una pelota que rebotaba cerca del área y que intentaba capturar el delantero Vinicius Lopes, de un Santa Clara que jugaba con uno menos desde los 37 tras la expulsión de Paulo Victor. Sin embargo, el General falló y no impactó el balón, lo que dejó a Lopes solo frente al arco para poner el 1-1 que sentenció las tablas en el Estádio da Luz.

De hecho, luego de que suene el pitazo final, el defensor de 37 años levantó su mano derecha y le pidió disculpas a todos los hinchas del Benfica, sosteniéndose el pecho con la izquierda para reconocer su error.

«Fue un juego complicado. No pudimos entrar, crear situaciones y lamentablemente asumo toda la responsabilidad por el gol. La verdad que el equipo estaba tranquilo, y en una jugada de mierda que acontece se dio el empate. Pero inmerecido porque intentamos dar siempre todos el ejemplo. Cometí un error y lo asumo. Hay que seguir al siguiente paso», dijo Ota tras el encuentro.

«Siempre estoy agradecido, al club, a la institución, a los adeptos (hinchas), porque me brindan el cariño constantemente, pero me da bronca. Era un juego controlado, donde no habíamos cometido errores y lamentablemente por un error mío no conseguimos obtener los tres puntos», completó.

Además de él, en este partido tuvieron minutos los argentinos Enzo Barrenechea (fue titular y completó todo el partido) y Gianluca Prestianni (ingresó desde el banco en el inicio de la segunda mitad).

El empate imposibilitó que el Benfica, escolta con 10 unidades, lograra las cuatro victorias al hilo (adeuda un partido) y que compartiera la punta con el Porto, que es líder con 12 puntos producto de ganar sus cuatro encuentros (también debe un duelo).