El Liverpool logró avanzar a la cuarta ronda de la Carabao Cup con un triunfo 2-1 sobre Southampton en Anfield, pero la clasificación quedó en segundo plano por una polémica acción de uno de los millonarios fichajes Reds.

Hugo Ekitiké, que atraviesa un gran inicio de temporada con cinco goles en ocho partidos, fue protagonista de una jugada tan llamativa como insólita: tras hacer el gol decisivo a los 86 minutos, se sacó la camiseta para festejar, olvidando que ya estaba amonestado.

La segunda amarilla fue automática y el equipo de Arne Slot terminó jugando con diez, un detalle que desató la furia del entrenador a pesar de que el partido estaba casi ganado.

Lejos de suavizar la situación, el técnico neerlandés fue lapidario en conferencia de prensa: «Lo de Ekitiké fue innecesario, poco inteligente, estúpido. La primera amarilla ya era evitable, hay que controlar las emociones. Y si encima te autoexpulsás por celebrar un gol así, es aún más grave«.

Slot incluso ironizó sobre la magnitud del tanto: «Si hubiese sido un gol en la final de la Champions, después de gambetear a tres rivales, quizá lo entendería. Soy anticuado, tengo 47 años, soy viejo y no he jugado a este nivel, pero marqué algunos goles y, si hubiera marcado un gol como este, me habría dado la vuelta, habría ido hacia Federico Chiesa y le habría dicho: ‘¡Este gol es todo tuyo, no mío!’».

«La primera amarilla ya era innecesaria y, en cierta medida, estúpida, porque hay que controlar las emociones. Sé lo difícil que es jugar de número 9 en la Premier League o en cualquier liga del mundo. El defensa puede hacer casi todo lo que quiera y, cuando le tirás un poco de la camiseta o le empujás un poco, te pitan falta. Siempre es mejor controlar tus emociones y, si no puedes, hazlo de forma que no te saquen tarjeta amarilla«, soltó sin pelos en la lengua. «Tú lo llamas estúpido, yo también lo llamo estúpido», cerró con un periodista.

El delantero francés se disculpó en redes sociales por la roja con un posteo en Instagram. «Estaba muy emocionado esta noche por ayudar al equipo a lograr otra victoria en nuestra casa en mi primer partido de la Carabao Cup… La emoción me superó. Mis disculpas a toda la familia Red, gracias a los hinchas que siempre nos apoyan y a mis compañeros por asegurar esta victoria», dice el mensaje.

No todo fue malo para los delanteros del Liverpool. El sueco Isak, ex Newcastle, empezó a pagar con goles la inversión de 150 millones de euros. A partir de una buena presión en el área rival, Alexander recibió una asistencia del italiano Chiesa y la mandó a guardar para el 1-0. Primer gol en tres partidos jugados.

Líder con puntaje ideal de la Premier, el sábado visitará a Crystal Palace y el martes 30 jugará en Turquía ante Galatasaray por la Champions League.