El París Saint Germain (PSG) está muy descontento con el hecho de que el entrenador de la selección de Francia, Didier Deschamps, no tuviera en cuenta sus advertencias sobre el estado de forma, delicados, de algunos jugadores y quiere que la federación cambie los protocolos tras las lesiones este viernes de Ousmane Dembélé y Désiré Doué.

A Dembélé le diagnosticaron una grave lesión en el isquiotibial derecho y se espera que esté de baja durante 45 días, mientras que Doué sufrió una lesión en el gemelo derecho y se perderá cuatro semanas.

En un comunicado publicado este domingo, el PSG señala que quiere que «esos acontecimientos lamentables», en referencia a la lesión de sus jugadores, den paso a «un nuevo marco formalizado de coordinación médica que garantice intercambios sistemáticos, documentados y recíprocos» entre los médicos de los clubes y de la selección.

El club de la capital francesa, que envió una carta a la Federación Francesa de Fútbol (FFF), también le pide que se respete «un principio de precaución reforzado» cuando la selección hace una convocatoria y si el entrenador decide utilizar a jugadores, «en particular cuando presentan una patología que se está tratando».

El PSG señala que las lesiones de Dembélé y Doué en el partido de la selección del pasado viernes frente a Ucrania para la clasificación del Mundial del año próximo van a tener «consecuencias deportivas importantes para los jugadores y para el club». Por eso reclama «urgentemente» lo que llama «un nuevo protocolo de coordinación médico-deportiva» para «hacer de la salud de los jugadores y de su acompañamiento médico una prioridad absoluta».

El último campeón francés y de la Champions League hace hincapié en que sigue desde el punto de vista médico a sus jugadores «durante todo el año» y de esa forma «dispone de informaciones precisas y circunstanciadas». Cuenta que ya antes de la concentración de la selección había comunicado a la FFF «elementos médicos concretos» sobre «la carga de trabajo soportable y los riesgos de lesión de sus jugadores». Por eso «lamenta que esas recomendaciones médicas no las haya tenido en cuenta el equipo médico de la selección» y que tampoco hubiera «concertación» con sus propios médicos.

Dembélé sólo disputó 30 minutos frente a Ucrania (partido que concluyó con la victoria de Francia por 2-0 en Varsovia) antes de lesionarse y tener que ser sustituido por Hugo Ekitike. Se sabe que no podrá jugar durante las próximas semanas y que no podrá disputar el primer partido de la fase de liga de la Champions frente al Atalanta.

El seleccionador se ha defendido de las acusaciones de haber sido imprudente y ha insistido en que Dembélé estaba en condiciones de saltar al terreno de juego frente a Ucrania. Deschamps ha hecho notar que la lesión del viernes se produjo no en la pierna que le había dado problemas últimamente, sino en la otra.

«Estaba en buena disposición. Le ocurrió desgraciadamente a él, pero le podría haber sucedido a otro jugador», ha subrayado antes de concluir que desde el punto de vista médico «no había problemas».

«Siempre hemos actuado con gran seriedad y profesionalismo. Entiendo el enfado del París: en su lugar, yo pensaría lo mismo. No estoy aquí para arriesgarme, pero desde el momento en que un jugador entra en el campo, ¡el riesgo cero no existe! Tomemos un ejemplo: Cherki y Saliba se lesionaron y no se presentaron. Actuamos con gran seriedad y diligencia, preguntando siempre a los jugadores cómo se sentían en cada entrenamiento. Las sensaciones del jugador son muy importantes para mí, son esenciales. El deseo de jugar a veces prevalece sobre muchas cosas», declaró Deschamps