El Pocho Lavezzi se dio un gustazo: fue hasta el estadio Brigadier López de Santa Fe, por el partido que Unión perdió 1 a 0 ante Mushuc Runa, de Ecuador por la Copa Sudamericana, y vio debutar a su hijo Tomás, de 19 años. El delantero estuvo en el banco e ingresó a los 39 minutos del segundo tiempo, en lugar de Lucas Gamba.

El ex Paris Saint Germain y mundialista con la Selección Argentina en 2014 ingresó vestido con una campera holgada, gorro con visera y anteojos. Un periodista de un medio local le pidió salir al aire y le respondió: «No, perdoname, no hablo».

Tomás, con la camiseta 33, mostró buena actitud al encarar, supo descargar en sus compañeros y hasta tuvo un enganche en la punta derecha. Claro, con poco tiempo, no le alcanzó. Aunque dejó algunas señales de algún parecido con el estilo de su papá.

Más allá de que su padre no había querido hablar en la previa, sí se dejó ver a la salida del estadio claramente emocionado por el debut de su hijo, con quien se reencontró en el playón de la cancha. Allí, Tomás se saludó con todos sus familiares entre lágrimas, asimilando el hecho de que cumplió su sueño, ese por el que tantos pibes luchan por alcanzar.

De hecho, y una vez finalizado el partido, el volante ofensivo declaró en ESPN que «este es el momento que soñé desde chico y me preparé toda mi vida para esto». Además no dudó en darle su agradecimiento a Madelón y se refirió a la presencia de su papá en el estadio: «Tiene un sabor especial que haya estado él, sabe que me esforcé mucho para esto y está muy contento y seguramente esté muy orgulloso». Además, el hijo del Pocho ya piensa en lo que viene: «Seguir para adelante y afianzarme en Primera», cerró.

Por otra parte, Ezequiel Lavezzi mostró su alegría por el debut de su hijo Tomás. Cuando se disponía a ingresar a la cancha, el Pocho escribió en sus redes: «¡Felicitaciones hijo! Orgulloso de vos. TE AMO».

Tomás, de 19 años, es fruto de la relación de Ezequiel con Débora, una chica que había sido su novia desde la adolescencia. El delantero fue parte de las Inferiores de Rosario Central hasta que el club lo dejó libre.