INTERNACIONAL
El insólito motivo por el que cayó el filósofo que encerró a sus hijos por cuatro años y la sospecha de una vecina

Los detalles de “La casa de los horrores” en Oviedo siguen surgiendo con el correr de las horas. Todo comenzó con la denuncia de una vecina, pero fue la “compra desaforada” de pañales lo que encendió las alarmas.
Christian Steffen, un filósofo que se presentaba como “cazatalentos” y gestor de recursos humanos “independiente”, aseguraba que vivía solo en el chalet 15B de la calle Toleo.
Sin embargo, Silvia, una profesora universitaria, vio desde su ventana, en el chalet 15A, a alguien que parecía una nena que jugaba en el jardín donde vivía el hombre “solitario y extremadamente discreto”. En el reportaje publicado por el periodista Quico Salcedo de El Mundo, se cuenta que esta fue una de las primeras señales de que algo ocurría en esa casa.
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Desde que Steffen alquiló el chalet, en octubre de 2021, la vecina pudo comprobar que el lugar estaba vacío y casi abandonado. Solo veía que él se asomaba, siempre con barbijo, a retirar la comida y las compras que entregaban en la puerta.
El interés de Silvia aumentó hasta el punto de observar toda la actividad en ese chalet. Y un día, vio cómo subía y bajaba una persiana en el segundo piso o se movía una cortina al mismo tiempo que el vecino salía. Incluso, la mujer creía escuchar voces de chicos. Dos de los tres chicos rescatados por la policía en Oviedo. (Foto: gentileza El Español).
Después de estar segura de que sus sospechas no eran infundadas, la vecina radicó la denuncia en el servicio de Infancia y Familia del Ayuntamiento de Oviedo el 14 de abril. Inmediatamente, la policía local activó la “operación jaula”.
Solo había una persona empadronada desde febrero de 2022. Era Christian Steffen, de nacionalidad alemana, un aparente nómade digital que únicamente salía de su vivienda para retirar los pedidos habituales. Por esto, decidieron indagar en su lista de compras.
“Y esa fue la pista que lo detonó todo. Aquello era la compra de una familia, no de una persona, y había algo que no cuadraba en absoluto: un consumo desaforado, o al menos llamativo, de pañales. No se oían bebés, se suponía que había al menos una niña de unos siete u ocho años, pero compraba pañales», explicó la Policía Local al diario español. Christian S., el doctor en filosofía que encerró a sus tres hijos durante cuatro años en una casa de Oviedo, España. (Foto: gentileza El Español).
Además, la profesora comenzó a fotografiar lo que veía para recabar más pruebas y sostener su palabra. En sus imágenes, se “veían bultos tras los cristales de las ventanas” y estaba “convencida de que eran los niños”, a pesar de que la policía no coincidía con ella.
De todas formas, el jefe de la Policía Judicial, que estaba encargado del caso, decidió allanar el chalet el 28 de abril, exactamente dos semanas después de que se radicara la denuncia.
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Fue entonces cuando la policía y dos trabajadoras sociales descubrieron el horror que conmocionó al mundo. Los agentes encontraron al hombre “descalzo y desaliñado”, y este admitió que había nenes en la casa. También vieron a la esposa Melissa Ann Steffen, quien dijo que sus hijos estaban “muy enfermos”.
Los mellizos de 8 años y el nene de 10 tenían pañales y usaban barbijos en el momento en que los rescataron.
Un entorno de control y la obsesión por el COVID-19
La casa, que alguna vez fue hogar del futbolista Markel Susaeta, se convirtió en una prisión. Los chicos vivían en un entorno controlado y obsesionado con la salud. “Había máquinas de ozono para purificar el aire y los niños llevaban mascarillas triples”, detallaron los investigadores.
“Los padres aseguraban que sus hijos no sabían controlar sus esfínteres, pero se ha demostrado que eso es falso en el informe del pediatra”, indicaron. Tampoco sufrían las “graves cardiopatías” a las que aludieron los padres. “Estaban obsesionados con que sus hijos tenían patologías graves y se iban a morir por la pandemia», dijeron las fuentes a El Español.
El consumo de agua en la casa era desproporcionado, pero no para tomarla, sino posiblemente para ducharse compulsivamente. “Gastaban tres veces más de lo habitual en una familia convencional, hasta el punto de que la dueña de la casa llegó a pensar que tenía una avería en la red de abastecimiento”, aseguraron.
“Solo bebían agua embotellada” y la casa estaba llena de bidones vacíos, mientras que el baño de invitados se usaba como vertedero de pañales.
Según los investigadores, todas las persianas de la casa estaban cerradas, excepto las de las dos habitaciones de los nenes “que podían estar abiertas exactamente hasta la mitad de la ventana”. Pero Christian había decretado un toque de queda: «A las cinco y diez de la tarde, todos los días, los niños debían bajar las persianas de sus cuartos“.
Nadie en el barrio los había visto jamás. “No sabíamos ni que la casa estaba habitada”, resumió una vecina. “Nunca les vimos o escuchamos. Ni con niños ni sin ellos”, agregó.
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El Juzgado de Instrucción número 3 de Oviedo, junto al Ministerio Fiscal, decretó prisión preventiva sin fianza para los padres, acusado de maltratos, abandono y detención ilegal. Además, les sacaron la patria potestad y la custodia de los menores, ahora bajo el cuidado del Principado de Asturias.
Ahora, los niños serán evaluados psicológicamente para determinar el impacto de este encierro en su salud mental.
España, oviedo
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Una «bomba meteorológica» amenaza a Francia y deja a París en estado de emergencia

Inundaciones y vientos huracanados
Transportes y rutas afectados
«¿Bomba meteorológica?»
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Fox News Politics Newsletter: Adams to back Cuomo in NYC mayoral race

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–Red state university student caught on video threatening lives of Charlie Kirk supporters: ‘Watch your neck’
-Curtis Sliwa vows to be Zohran Mamdani’s ‘worst nightmare’ if the Democratic socialist wins NYC mayoral race
-Undercover video exposes what Spanberger’s campaign organizer really thinks of her: ‘What the f—‘
NYC Mayor Adams to endorse Cuomo in race against Mamdani
New York City Mayor Eric Adams will endorse former New York Gov. Andrew Cuomo in the city’s mayoral race as he faces off against Democratic nominee Zohran Mamdani.
«As spokesman for Mayor Eric Adams, I can confirm that the Mayor will endorse former Governor Andrew M. Cuomo for mayor and intends to campaign alongside him,» Adams’ spokesman, Todd Shapiro, said in a statement to Fox News. «The time and locations for their joint appearances are currently being finalized.»
Adams declined to answer questions about Cuomo at an unrelated press conference Thursday morning…READ MORE.
New York Mayor Eric Adams poses with Independent candidate former New York Gov. Andrew Cuomo after Cuomo participated in the second debate for the upcoming mayoral election on Wednesday evening. (Al Bello/Getty Images)
White House
HOMEGROWN POWER: Apple building American-made AI servers ahead of schedule in new Houston facility, answering Trump call
NEW DETAILS: SCOOP: Trump’s Memphis crime crackdown locates dozens of missing kids, removes 109 gangbangers from streets

National Guard members began patrolling Memphis, Tennessee, in October as part of a federal task force established by President Donald Trump to combat what the administration says is violent crime in the city. (Brett Carlsen/Getty Images)
NO PEACE TALKS: Trump ‘not interested’ in de-escalation with ‘unhinged’ leader of Colombia, White House says
ON PAUSE: Trump freezes out Putin for lack of ‘enough action’ toward peace — future talks uncertain
BLUNT DIPLOMACY: Inside Trump’s ultimatum that forced Netanyahu to the table: ‘You can’t fight the world’

Israeli Prime Minister Benjamin, left, talks to President Donald Trump during a meeting in the Oval Office of the White House April 7, 2025, in Washington. (Kevin Dietsch/Getty Images)
World Stage
SKY VIOLATIONS: Russia violates NATO airspace in Lithuania amid Putin warning on long-range missiles
‘AMAZING BLESSING’: Vance visits church where Christians believe Jesus was crucified, resurrected amid Israel-Hamas ceasefire

Vice President JD Vance tours The Church of the Holy Sepulchre in the Old City of Jerusalem Oct. 23, 2025. (Nathan Howard/Pool/AFP via Getty Images)
NO MORE GAMES: After waffling between Russia and Ukraine, Trump slaps Kremlin with oil sanctions
Capitol Hill
SNAP OUT OF IT: Democrats under fire as food stamp funds run dry: 42 million Americans caught in shutdown fight
NO PAY FOR YOU: Essential workers left unpaid after Senate Democrats kill pay bill

Republican Study Committee Chairman August Pfluger is criticizing House Minority Whip Katherine Clark’s comments in a recent interview on the government shutdown. (Tom Williams/CQ-Roll Call, Inc via Getty Images; Eric Lee/Bloomberg via Getty Images)
HOSTAGE POLITICS: Top Republican slams Katherine Clark for admitting suffering families are «leverage» in shutdown battle
SOCIAL-IST STANDING: Bernie Sanders defends Maine Senate candidate under fire for wild Reddit comments

Senator Bernie Sanders, an Independent from Vermont and ranking member of the Senate Health, Education, Labor, and Pensions Committee, arrives for a confirmation hearing in Washington, July 16, 2025. (Valerie Plesch/Bloomberg via Getty Images)
Across America
HALF IN, HALF OUT: Trump yet to endorse in VA governor’s race — but also kept Youngkin at arm’s length

Virginia Lt. Gov. Winsome Sears, left; President Trump, right. (Al Drago/Getty Images; Anna Moneymaker/Getty Images)
MIXED BAG: New poll in key showdown for Virginia governor indicates single-digit race
FOOD FIGHT: Youngkin declares state of emergency over «Democrat Shutdown» depleting food stamp benefits for nearly 1M Virginians
AI ATTACK: Andrew Cuomo campaign walks back controversial attack ad targeting Mamdani voters

Democratic candidate Zohran Mamdani, right, Republican candidate Curtis Sliwa, left, and Independent candidate and former New York Governor Andrew Cuomo. (Hiroko Masiuke/POOL/AFP via Getty Images)
CAMPAIGN CLASH: Social media erupts after Cuomo, Mamdani rip each other during final debate: ‘Unmasked’
‘CALL TO ACTION’: NYC rabbis sound off on «unprecedented risk» Mamdani poses as hundreds of leaders sign «call to action»

Rabbi Ammiel Hirsch accused New York City mayoral candidate Zohran Mamdani of «fanning the flames of intolerance» with two weeks until Election Day. (Shahar Azran)
SECOND GUESSING: NYC socialist mayoral candidate Mamdani’s 911 plan called «worst idea» by former NYPD sergeant
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INTERNACIONAL
Lecturas para el fin de semana: cómo radicalizar el dolor

Habitar el dolor ajeno. ¿Es posible? Tomarlo con las manos, acobijarlo en el pecho, compungirse hasta el llanto, concentrarse en su textura, no dejarlo ir. La empatía trafica esa idea, pero, como escribió Alexandra Kohan, “no podemos entrar los dos en los zapatos de uno”. El otro es el otro y, en tanto otredad, es inquietante, imposible. En ese sentido, la literatura abre una posibilidad en el espacio, la de sumergirse en una narración ficcional que, al ser un artificio, radicaliza al extremo la emoción.
En algún punto, la lectura es un vacío. Un lugar sin notificaciones ni publicidad ni imágenes identificables. Esa zona donde el lenguaje imagina la pureza. Y si entendemos que la ficción no es un sinónimo de la mentira, sino una forma de contar la verdad, el lector se permite algo imposible: habitar el dolor ajeno. Porque el dolor está en el pecho de los personajes, en la atmósfera de las escenas, en la prosa, en la trama, pero no en él, que está del otro lado, ¿a salvo? Quizás ocurra exactamente lo contrario.
“Fijate, ¿lo llegás a ver? Casi no se ve, pero ¿no te parece asombroso ese alerce solo ahí, altísimo, resaltado en la llanura? Hasta tiene el tupé de competirle el protagonismo al horizonte». Un padre con una enfermedad avanzada y su hija viajan en auto hasta Buenos Aires: se tiene que hacer un estudio. Pero se detienen en un pueblo, en una casa, alguien familiar. Él fuma, ella lo reta. “¿Cómo no fotografiarlo?“, dice mirando el árbol, él que es fotógrafo. “¿Sin luz?”, pregunta ella. “Mañana, si se despeja (…) Es la última”.

La luz queda se llama la novela que acaba de publicar Diotima. Su autor es Alejandro Pereyra, escritor, guionista, director de cine. Es brevísima y la narración se agolpa en las páginas, no con apuro, sino con intensidad. “Voy a dejar la fotografía, Romina, antes de que ella me deje a mí“. Cuando ella le pide ”no te pongas trágico», que “va a salir todo bien”, él le dice: “No entendés, Romina. No es por mi cuerpo, por esa mierda que tengo. Solo que esta foto es el punto final perfecto. La vengo pensando hace tiempo”.
Después la literatura hace su trabajo: aparecen otras voces, el paisaje se vuelve una inundación, los pensamientos flotan y las intenciones vuelan. De pronto, “todo es de verdad, hasta la dulzura de mierda”. Y Arturo, el padre, el fotógrafo, sueña con otra foto, pero no es tan fácil. “Los días son todos diferentes” pero “la noche es siempre la misma”. Y la historia va cerrándose, la enfermedad no cesa, y “ya casi no se aguanta el dolor. Pero estate tranquilo, que siempre se trató de amor. Aunque no lo entiendan”.
Cuando Marie-Pier Lafontaine entendió que solo había dos opciones, escribir o prender fuego la casa familiar, escupió Perra. Son ochenta y pico de páginas intensas que narran una dura historia de abuso. Cuando estuvo fuera de esa cárcel de anhelos reventados, el testimonio se hizo literatura. Pero lo novedoso de este libro de 2020 y traducido el año pasado por Agustina Blanco para Ediciones Godot no es este acontecimiento —¿cuántos víctimas han podido narrar sus tragedias en libros?—, sino la mirada.
“Entre todas las leyes del padre, había una de índole fundamental: no contar”, comienza Perra. “De niña, disimulaba mis deseos en textos de ficción. Dos hermanas en fuga. Perseguidas por un monstruo de dos cabezas. Huían por sombríos bosques. Se armaban con ramas, palos. Hoy ya no escondo mis deseos. Quisiera que este texto diezmara a mi familia toda”, escribe esta canadiense nacida en 1988 en Montreal, dentro de “la parte francesa”, autora también de Armas para la rabia.

Por momentos, la hoja se pone de un negro completo con frases así: “Al padre le encanta hacernos saber que piensa en nosotras cuando eyacula. Se las arregla siempre para que lo oigamos”. O también: “Los alaridos se detienen. El padre sale del cuarto de mi hermana. Carraspea. Sus pasos resuenan hasta la otra punta del pasillo. Va al encuentro de la madre”. O: “Mi hermana y yo solo con tomarnos de la mano sabemos con certeza que sobreviviremos al padre”. O: “¿Nuestros vecinos nunca oyeron nada?”
Los recuerdos no se eligen, aparecen como un relámpago en la noche, pero elegimos qué contar. Desde las primeras páginas de Corazón de león de Monika Helfer, que acaba de ser traducido por Gabriela Adamo para Edhasa, sabemos que el hermano de la narradora está muerto. Lo que sigue es una novela en retrospectiva: un personaje que ya no existe, pero que aparece, intrépido y subversivo, en las escenas ahora narradas. Las historias son delirantes y divertidas, pero tienen la inocultable pátina de la tristeza.
Entre esos recuerdos aparece el día en que su hermano conoció a su actual marido, entonces su amante. Su marido estaba de viaje, sus hijos con los abuelos; la casa y el fin de semana para el romance. Y su hermano, tocó el timbre. “Los presenté, conversamos y tomamos vino y fumamos un poco de la hierba que él cultivaba; cuando se despidió, le dijo que le caía bien y que el hecho de que tuviera una relación conmigo, su hermana, solo podía entusiasmarlo, porque todo lo que me hiciera bien lo entusiasmaba”.

“¡Johnny, acabo de romper bolsa!“ En un pueblo del interior profundo de los Estados Unidos, año 1970 y pico, una mujer está a punto de dar a luz. Vive en el campo, en una cabaña junto a su esposo entre el frío y la soledad. Tienen treinta años y han esperado con mucha ansiedad este momento. Suben a la camioneta en las primeras horas de la mañana y conducen unos cuantos kilómetros hasta el hospital con la esperanza de conocer a su hijo, el primogénito. Sin embargo el bebé nace muerto.
A grandes rasgos, esa es la historia narrada en El nadador en el mar secreto, novela breve, profunda, sensible, que publicó William Kotzwinkle en 1975. Es autobiográfica, porque eso le ocurrió: perdió a su primer hijo ni bien salió de la panza de su esposa. Mientras el dolor se agitaba con violencia dentro de su pecho, se encerró en su estudio y se puso a escribir “con las lágrimas en los ojos desde la primera a la última página”. Una revista norteamericana la publicó en el viejo formato de novela por entregas.

La novela ganó varios premios; luego, el olvido. En 2019 la reeditó el sello argentino China Editora. El nadador en el mar secreto no ahonda en sentimientos, ni siquiera se demora en describirlos. La pareja protagonista atraviesa dos momentos de extremos: el parto y la muerte. En su brevedad, la narración adquiere potencia y genera efectos. ¿Qué efectos? Diría que esta novela convierte al lector, incluso al más insensible, en una criatura más vulnerable. Podría decirse que lo devuelve a la realidad.
En nombre de ser comprensivos, no dejamos de arrasar con el otro poniéndole nuestras suposiciones, nuestras atribuciones, nuestras fantasías. Creemos que el otro necesita lo que nosotros creemos que necesita, lo que nosotros necesitaríamos en su lugar. Y, muchas veces, sin ni siquiera haber escuchado del otro ningún pedido. No es poco frecuente que se diga “te entiendo, a mí me pasa lo mismo” y que se corra entonces la conversación hacia lo que me pasa entonces a mí. ¿Por qué hay que pasar por uno para entender al otro? Porque eso es justamente la comprensión. El asunto es, si resulta soportable acompañar a otro resistiéndose a entenderlo, aún en su incomprensibilidad, aún en su ilegibilidad.
“La empatía supone que entre el yo y el otro no hay nada: no hay fantasías, suposiciones, fantasmas, lenguaje: nada, nada de nada”, escribió Alexandra Kohan. “El otro nos es transparente y absolutamente escrutable del mismo modo en que el sí mismo se advierte transparente y escrutable”.
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