Connect with us

POLITICA

A 40 años del alegato del “Nunca Más”: del abrazo de Strassera y Moreno Ocampo a la reacción de los militares

Published

on


Apenas Julio César Strassera dijo “Nunca más” sucedió algo inédito luego de cinco meses del Juicio a las Juntas Militares: la sala explotó. Una ovación conmovedora surgió desde las tribunas superiores y se extendió a la planta de abajo y a los palcos de los periodistas.

Fue un gesto espontáneo y colectivo, esos fenómenos que surgen y son imposibles de replicar de manera artificial. Difícil no emocionarse cada vez que nos enfrentamos a esa explosión pese a que la hayamos visto decenas de veces. Hay abrazos, gritos de vivas, llantos desconsolados.

Advertisement

Leé también: “Siento que he salido del infierno”: datos desconocidos del día en que Borges presenció el Juicio a las Juntas

Después de siete jornadas había finalizado el alegato de la fiscalía. Con esas palabras finales se consolidó la intervención judicial más célebre, más relevante y sobrecogedora de nuestra historia.

Desde su sitial, León Arslanián, presidente del tribunal, pidió silencio en la sala. Pero al ver que cualquier intentó sería infructuoso ordenó, con energía, desalojarla.

Advertisement

Mientras los aplausos no se apagaban, los comandantes se pusieron de pie y salieron por la puerta del costado. Videla con su carpeta bajo el brazo miró desafiante a las tribunas. Viola moviendo los labios teatralmente para que nadie dejara de entender, modulando sílaba por sílaba, les dijo repetidas veces Hijos de puta a los que seguían celebrando el alegato del fiscal.

En simultáneo a la salida de los acusados, Strassera y Moreno Ocampo se pusieron de pie, como siempre. Apenas se miraron de frente y con las ovaciones de fondo, se fundieron en un abrazo emocionado. Un abrazo que tuvo más de afectuoso y de alivio que de celebración. La foto que lo registra muestra cómo cada uno con un brazo caído y el otro detrás de la espalda de su compañero, esconde la cabeza en el hombro ajeno: no querían que los vieran llorar. Habían llegado al final del camino. Habían superado la incertidumbre, las amenazas, la falta de apoyo de los colegas, las sospechas, las presiones, el trabajo que en algún momento pareció imposible.

Hay una foto sacada desde uno de los palcos del primer piso que retrata el momento a la perfección: los comandantes saliendo abatidos, y Strassera y Moreno Ocampo dándose su propio abrazo del alma. En los días siguientes hubo editoriales en matutinos muy importantes y notas de opinión criticando el abrazo. Decían que se trató de un gesto casi de ostentación, que afectaba el decoro que debe mantenerse en una sala.

Advertisement

El abrazo fue pudoroso y no tuvo nada de festivo y mucho menos de provocación. Da la impresión que los columnistas estaban molestos por otra cuestión más dolorosa y con mayores consecuencias que ese abrazo inicuo y noble.

El fiscal y su adjunto salieron de la sala juntos. Querían llegar a la fiscalía para escuchar los comentarios de los chicos que trabajaron con ellos, para compartir la alegría, para poder celebrar en la intimidad. Pero al llegar al hall principal del Palacio se encontraron con una sorpresa inesperada. La gente desalojada de la sala y varios empleados de tribunales los esperaban para seguir aplaudiéndolos. Una pequeña multitud los saludaba. Se acercaban, los abrazaban, les agradecían, los tomaban de las manos. Atravesaron el amplio hall sin que los aplausos se desvanecieran.

Esa escena podría ser un gran final de película.

Advertisement
Se cumplen 40 años del histórico alegato de Julio César Strassera en el Juicio a las Juntas. (Foto: Archivo Télam/lz)

El 18 de septiembre de 1985 Julio César Strassera cumplía 53 años. Pero no era eso lo que lo desvelaba ese día. Después de siete jornadas, finalizaba el alegato de la fiscalía en el Juicio a las Juntas. Sabía que la atención de todo el país estaría, una vez más, puesta sobre él.

Strassera era, hasta principios de ese año, un funcionario judicial gris aunque capaz, conocido en su mundillo por algunas excentricidades y calenturas, que le valieron el mote de Loco. Pero enfrentado a un desafío profesional ciclópeo, estuvo a la altura. Dio la talla. La misión era muy difícil. En la Argentina no se sustanciaban juicios orales, la presión era demencial y estaba representando a miles que ya no estaban y a sus familiares. En Estados Unidos, las causas judiciales que impulsa la fiscalía llevan en la carátula “El Pueblo Vs. …” Y en el Juicio a las Juntas, casi como en ningún otro, el fiscal cargaba con el peso de representar, literalmente al pueblo.

La labor de la fiscalía fue notable. Valiente, profesionalmente irreprochable, técnicamente inteligente y pedagógica. Y extraordinariamente convincente.

Advertisement

Antes de comenzar el juicio, una encuesta demostró que menos del 20% de los argentinos estaba a favor de que se llevara a cabo. En la semana posterior al alegato, el 83% se mostraban a favor y pedían condena dura para los acusados.

El alegato de siete días y el cierre histórico que trascendió fronteras: “Señores jueces, Nunca Más”

El alegato empezó a las 15.13 hs del miércoles 11 de septiembre. Era la primera vez que los acusados ingresaban a la Sala. Había expectativas, rumores y, también, absurdas suposiciones. Algunos hasta soñaban (los diarios utilizaban el potencial para informar) algún tipo de pequeña revuelta que mostrara la dignidad de los comandantes.

Lo cierto es que entre trajes a medida y uniformes militares, los nueve que eran juzgados entraron en fila y se acomodaron en los bancos de madera. Algunos mostraron enojo, otros estaban serios y también estuvieron los que simularon desinterés.

Advertisement

Videla leía un libro religioso que sacó de un portafolio de cuero marrón que tenía sus iniciales en dorado: Las siete palabras de Cristo de Charles Journet. Leía por espacios breves y muchas veces se quedaba en una página muchos más minutos que los que requería su lectura habitual: hacía que leía para que pasaran las horas. El resto del tiempo miraba el techo o posaba sus ojos por encima de la cabeza de los jueces, en el crucifijo colgado en la pared que debajo tenía la inscripción: Afianzar la Justicia.

El alegato final del Juicio a las Juntas describió -entre otras cosas- el plan sistemático instrumentado por la Dictadura.(Foto: archivo Telam)
El alegato final del Juicio a las Juntas describió -entre otras cosas- el plan sistemático instrumentado por la Dictadura.(Foto: archivo Telam)

Una digresión: el episodio hace recordar otro juicio célebre. Mientras se preparaba el juicio en su contra, el Estado de Israel puso a un oficial del ejército para resguardar el bienestar físico y mental de Adolf Eichmann: no querían juzgar a alguien demasiado demacrado ni que alucinara. Deseaban que pareciera lo más normal, sano e íntegro posible para que el juicio tuviera más impacto. El detenido no creaba problemas: tenía apetito, se mostraba dispuesto a colaborar, respondía todo tipo de preguntas, su trato era amable y siempre parecía de buen ánimo.

El oficial israelí que lo cuidaba le acercó el libro del momento para que lo leyera, para que se distrajera un rato. Dos días después cuando el militar pasó por la celda, encontró a Eichmann de mal humor, renuente al diálogo. En el piso de la celda, contra la puerta estaba el ejemplar de Lolita de Vladimir Nabokov que le había entregado. Eichmann, indignado, le dijo: “Lléveselo. Es un libro completamente malsano”.

Y Eichmann en esta historia tiene su importancia. No sólo por los argumentos jurídicos que se plantearon en los diferentes alegatos y el antecedente de lo que decidieron los jueces en Jerusalén y cómo la doctrina lo interpretó. La imagen que preocupaba era la de Eichmann en esa jaula de vidrio blindado, asistiendo a cada instancia del juicio. Por eso los pedidos de las defensas para que los acusados no estuvieran en la sala fueron aceptados hasta esta instancia. Procesalmente era imposible que no escucharan la acusación. También cada uno estaría –con la excepción de Videla- en sus propios alegatos y hasta harían uso de la palabra.

Advertisement

Galtieri se veía abatido: un par de años atrás se imaginaba en bustos y hasta debe haber soñado con alguna estatua ecuestre en plazas céntricas de todo el país y ahora las revistas lo dibujaban con traje a rayas y bolas de acero atadas a sus tobillos.

Massera hacía saber, a través de sus periodistas amigos, que llevaba un riguroso archivo de todo lo publicado sobre el Juicio. Una amenaza. Como si nada hubiera cambiado. También disfrutaba que publicaran que él participaba activamente en sus estrategias de defensa.

En los estrados de los acusados, los empleados de la Cámara habían dejado varios ceniceros y nueve blocks de hojas y biromes sobre cada uno de ellos. Sólo Agosti, Viola y Massera tomaron algún apunte durante las intervenciones de los fiscales.

Advertisement

Massera sonreía con sarcasmo cada vez que se le adjudicaba a la Marina algún asesinato, asentía con un leve sacudón de la cabeza cuando surgía su nombre.

Todos se veían más viejos.

El primer incidente se produjo en el primer cuarto intermedio. Los comandantes salieron en fila de la sala y pasaron por al lado de Moreno Ocampo que se había puesto de pie y los miraba con ojos encendidos, socarrones. Galtieri, con los músculos de la cara tensos, le dijo algo al pasar. Se presume que lo insultó. Moreno Ocampo rio con algo de estruendo. Cuando los periodistas corrieron a preguntarle qué le había dicho Galtieri, el fiscal adjunto minimizó la cuestión y se lamentó de no haber escuchado: “Es una lástima. Seguro la historia se perdió una frase célebre”, dijo.

Advertisement

Esa primera jornada se extendió hasta más de las nueve de la noche. Strassera y Moreno Ocampo se alternaban en el uso de la palabra. El fiscal comenzó parafraseando a su colega Hausner, el del juicio a Eichmann y siguió hablando de la violencia del país hasta llegar a los años setenta. Luego describió en líneas generales el plan sistemático instrumentado por la Dictadura. Moreno Ocampo, en su turno, les pidió a los jueces que no se dejaran convencer por el aspecto de gente decente de los acusados. Eran criminales y habían sumido a la Argentina en un infierno, habían cometido la peor masacre de la historia.

Esa introducción conceptual provocó una gran conmoción. Era una pieza con profundidad y claridad, que no se enroscaba en el lenguaje jurídico ni en esas frases carentes de sentido pero altisonantes que los abogados suelen utilizar mientras creen que escriben bien. El alegato a esa altura ya era una pieza excepcional.

Luego ingresaron en el análisis caso por caso, las imputaciones específicas de homicidios, secuestro, torturas y delitos contra la propiedad.

Advertisement

Aun en las secciones más farragosas, en las que predominaba la información y la descripción somera de los casos, el alegato del fiscal mantenía un estilo impecable y tenaz. En cada jornada de exposición del alegato, pocas veces decayó el interés, casi nunca se descuidó el estilo.

Los chicos de la fiscalía habían hecho un trabajo cotidiano que resultó de gran utilidad en el momento de preparar el alegato. Apenas recibían las copias de las declaraciones de los testigos, unos días después de presentarse ante el tribunal, las leían en profundidad, las marcaban en los márgenes y las identificaban con números y siglas para ir catalogando y sistematizando la información.

Strassera aclaró que esos pocos más de setecientos casos que había utilizado no agotaban el número escalofriante de víctimas. Lo siguiente que dijo fue recibido sin escándalo en la época: “Me acompaña el reclamo de más de 9000 desaparecidos que han dejado, a través de los que pudieron volver de las sombras, su mudo pero no por ello menos elocuente testimonio acusador”. (Aunque en los días posteriores y hablando de la destrucción de la documentación por parte de las autoridades militares en los días previos a las elecciones del 83, dijo que a raíz de esa actitud y de la falta de información “no se sabe con certeza cuántas fueron las víctimas: si fueron 5000, 9000 o 30.000”).

Advertisement

Hoy a nadie se le ocurriría decir eso en ninguna instancia judicial ni en ningún foro público. Pasados 40 años, en algunas cuestiones, nos hemos vuelto un poco menos libres.

Jorge Luis Borges con Julio César Strassera, fiscal en el histórico Juicio a las Juntas Militares, minutos antes de participar de una de las audiencias públicas del proceso judicial. (Foto: Juan Carlos Piovano - Agencia Télam)
Jorge Luis Borges con Julio César Strassera, fiscal en el histórico Juicio a las Juntas Militares, minutos antes de participar de una de las audiencias públicas del proceso judicial. (Foto: Juan Carlos Piovano – Agencia Télam)

Después de describir la irrupción de la Triple A –violencia desde el estado, también- entró de lleno en la represión desatada por la dictadura tras el golpe del 24 de marzo. La describió, en la cara de los comandantes, con tres palabras precisas y contundentes: feroz, clandestina y cobarde. Y explicó que decidieron responder a la guerrilla con los mismos métodos ilegales y bárbaros.

En ese momento fija algo que había repetido en cada entrevista. Al preguntarse cuántos de los que fueron desaparecidos y asesinados eran culpables y cuántos inocentes, responde que nunca lo sabremos porque no les dieron la posibilidad de un juicio y de defenderse. Por lo tanto para la ley todos eran inocentes porque ninguno había sido juzgado. “Al suprimirse el juicio, se produjo una verdadera subversión jurídica. Se sustituyó la denuncia por la delación, el interrogatorio por la tortura, y la sentencia razonada por el gesto neroniano del pulgar para abajo”.

Moreno Ocampo en su turno recordó las palabras de la señora Corbin de Capisano en esa misma sala. La mujer mientras se levantaba de la silla destinada a los testigos dijo: “Mi hijo también merecía un juicio como este”.

Advertisement

En otro cuarto intermedio fue Videla el que se hizo notar. Cuando quiso salir por el pasillo estrecho, se cruzó con Strassera que estaba de espaldas y obstaculizaba el paso. El dictador lo pechó por la espalda y siguió su camino sin pedir perdón ni permiso. El fiscal supo contenerse. Supo también que estaba haciendo un buen trabajo.

Luego los casos. Divididos por junta, por campo clandestino, por zonas. Esa información fue más tediosa y uniforme. Pero ese catálogo además de ser monstruoso y de demostrar que a pesar de que hacía meses que escuchaban esos relatos, nadie se habituaba a tanto horror, además de todo eso, demostraba lo que era la democracia. Un lugar en el que se cumplían las reglas, en el que a veces lo monótono era la norma, en el que se respetaban los pasos institucionales y en el que la fiscalía debía exponer sus acusaciones ante los acusados para que tuvieran pleno acceso a su derecho de defensa. Cada secuestro, tortura, asesinato, sustracción de bebés y robo era un caso individual atroz. Y al mismo tiempo un mosaico del plan sistemático montado por el Proceso, de la instauración del terrorismo de estado.

Carlos Somigliana: trabajó en el poder judicial y participó del equipo que trabajo con los fiscales en el alegato del Juicio a las Juntas. (Foto: EAAF)
Carlos Somigliana: trabajó en el poder judicial y participó del equipo que trabajo con los fiscales en el alegato del Juicio a las Juntas. (Foto: EAAF)

Los siguientes días los abogados defensores empezaron a decir que el alegato había sido escrito por Carlos Somigliana. Lo afirmaban como si se tratara de un demérito. Pero en el mismo gesto reconocían que estaba muy bien escrito. Moreno Ocampo aclaró que Somigliana era empleado del Poder Judicial desde hacía tres décadas, que colaboraba desde hacía meses con ellos y que sí, que por supuesto escribía bien. También quisieron impugnar lo dicho porque los fiscales leían y el Código decía que los alegatos debían ser orales y que sólo se podía recurrir a apuntes. Una idea para una posible investigación: la influencia de Teatro Abierto y sus dramaturgos en los albores de la Democracia. No sólo el eco de Teatro Abierto, la bomba, los textos valientes, el boom de público, el quiebre de la censura. También Carlos Somigliana escribiendo el alegato con Strassera y Gerardo Taratuto dándole forma al Nunca Más a pedido de Sábato. Intelectuales que no opinaban obviedades por las redes (en ese tiempo no existían pero sí los medios) y que actuaban virtuosamente sobre la realidad.

En el penúltimo día de presentación, Strassera brindó los fundamentos doctrinarios en especial las teorías de responsabilidad del jurista alemán –al que leía en el idioma original- Claus Roxin.

Advertisement

El 18 de septiembre fue la última jornada.

En el momento previo a pedir las condenas, Strassera hace un gesto que pasó desapercibido. Con las dos manos se toma del apoyabrazos de su silla y se levanta un poco, como acomodándose para el gran momento. Después pidió condenas durísimas para todos los comandantes, incluyendo varias reclusiones perpetuas. Pero todavía faltaba algo más.

El párrafo final es célebre y tiene varios méritos. Su contundencia, la facilidad con que se fijó en la memoria colectiva y el haber utilizado una frase que ya tenía peso, que no era propia, que era un tótem de la lucha de los organismos de DD.HH. Ese cierre es el otro rezo laico de los albores democráticos junto al recitado del preámbulo de la Constitución con el que Alfonsín cerraba sus discursos: “Señores jueces, quiero renunciar expresamente a toda pretensión de originalidad para cerrar esta requisitoria. Quiero utilizar una frase que no me pertenece, porque pertenece ya a todo el pueblo argentino. Señores jueces: ‘Nunca más’.”

Advertisement

Ese gran final, inolvidable, con su enorme impacto, logra tapar un párrafo dicho unos minutos antes y que debiera haberse convertido en el lema de nuestra democracia. “Hemos tratado de buscar la paz por la vía de la violencia y el exterminio del adversario, y fracasamos: me remito al período que acabamos de describir. A partir de este juicio y de la condena que propugno, nos cabe la responsabilidad de fundar una paz basada no en el olvido sino en la memoria; no en la violencia sino en la justicia. Ésta es nuestra oportunidad: quizá sea la última”.

Allí, en ese párrafo, Strassera siembra su legado y muestra el camino. Memoria, paz y justicia. Todavía estamos a tiempo de escuchar ese mensaje.

Ojalá se haya equivocado y no haya sido la última. Ojalá tengamos aún una nueva oportunidad.

Advertisement

Julio Cesar Strassera, Luis Moreno Ocampo, Jorge Rafael Videla, Emilio Massera, Leopoldo Fortunato Galtieri, Terrorismo de Estado

POLITICA

El debate por el Presupuesto y endeudamiento bonaerense reaviva la interna entre Kicillof y La Cámpora

Published

on


En medio de la interna del peronismo, los esfuerzos del gobernador bonaerense, Axel Kicillof, están enfocados en lograr la aprobación del Presupuesto 2026. El mandatario no pudo conseguir este objetivo en los años anteriores, por lo que las negociaciones están cargadas de tensiones, con propios y ajenos. Ahora, la intención es aprobarlo en la Legislatura bonaerense el próximo miércoles 26 de noviembre, en ambas cámaras.

La última vez que el gobernador contó con Presupuesto aprobado por la Legislatura fue en 2023. Desde entonces, fue prorrogado por la falta de acuerdos entre el ala dura K y el mandatario provincial. “Ante la situación económica de emergencia por las políticas económicas del Gobierno nacional, es indispensable que se sancione”, sostuvieron desde Provincia a TN. El caso es que no es el único proyecto clave para el Ejecutivo: necesita aprobar el endeudamiento.

Advertisement

Leé también: La reforma laboral que prepara Milei se centrará en el empleo privado y escala la tensión con los gremios

Dejen la rosca de lado y trabajen en defensa de la provincia de Buenos Aires”, reclamaron este viernes organizaciones sociales nucleadas en “La Patria es el Otro”, una corriente peronista liderada por Andrés “Cuervo” Larroque, ex Cámpora y hoy ladero de Kicillof.

En el entorno de Kicillof apuntan contra La Cámpora como responsable de la demora en las negociaciones para sacar adelante el Preuspuesto, el endeudamiento y la fiscal impositiva. (Foto: PJ)

Dejen de especular con las necesidades del pueblo y aprueben la ley de financiamiento que envió el gobernador”, agregaron a través de un comunicado. Cerca de Kicillof aseguran que La Cámpora está trabando el refinanciamiento del endeudamiento.

Advertisement

Leé también: A días de que se debata el Presupuesto 2026, Zamora recibió a Santilli y le pidió consensos

Aprueban presupuesto y la fiscal Impositiva solamente”, confió a TN un dirigente del círculo íntimo del Gobernador. Además, manifestaron que ante las desaveniencias propias del peronismo, la oposición ni se sienta a discutir. “Quieren más financiamiento, presupuesto para ellos. El tema es que hoy no hay margen”, indicaron.

Por supuesto, en la fuerza que conduce Máximo Kirchner desconocen tales acusaciones. “El año pasado dijeron lo mismo, pero eran los intendentes radicales que no aceptaban la propuesta, si no repartía una parte”, apuntaron a este medio.

Advertisement

Las críticas entre los propios hacen referencia a negociaciones deficitarias con los intendentes. Según pudo saber este medio, los jefes comunales exigen un reparto más igualitario de recursos de coparticipación y luego en obras, que también sostienen que la distribución es desigual. Allí se encuentra otra de las trabas al tratamiento de Presupuesto, ley tributaria y endeudamiento

La Legislatura bonaerense debate la este miércoles el Presupueso. (Foto: X
@HCDiputadosBA)
La Legislatura bonaerense debate la este miércoles el Presupueso. (Foto: X
@HCDiputadosBA)

“Axel está en una posición muy dura, si reparte un poco lo destraba”, confió un dirigente con diálogo con distintos sectores. De momento, hay intransigencia en todos los actores de la discusión y no se registran avances significativos en las negociaciones.

El derrotero legislativo

Esta semana se dio el primer paso para que Kicillof tenga su Presupuesto, tras prorrogarlo por falta de acuerdos. La comisión de Presupuesto e Impuestos de la Cámara de Diputados dio dictamen para el Presupuesto 2026 y la Ley Fiscal Impositiva.

Sin embargo, el endeudamiento que necesita Kicillof quedó trabado por falta de acuerdos y deberá ser tratado nuevamente el próximo martes 25 de noviembre en comisión. Este proyecto necesita los dos tercios de los votos para su aprobación.

Advertisement
Máximo Kirchner y Axel Kicillof. (Foto: Prensa Congreso)
Máximo Kirchner y Axel Kicillof. (Foto: Prensa Congreso)

Al respecto, el reclamo fundamental de los opositores es que el fondo para los municipios sea de libre disponibilidad y no esté atado al Financiamiento que solicita el Gobierno de Kicillof. Además, piden que se cubran los cargos que quedan vacantes en la Suprema Corte de Justicia bonaerense y en el directorio del Banco Provincia. Los cargos esperan nombramientos hace meses. También pidieron que se salden deudas que la Provincia mantiene con los municipios con IOMA y el Instituto de Pevisión Social.

Ese mismo miércoles 26 está previsto que tanto en Diputados como en el Senado bonaerense también se debata el Presupuesto y los otros proyectos que necesita el Ejecutivo. Los encargados de llevar adelante las negociaciones son la vicegobernadora Verónica Magario, el ministro de Infraestructura, Gabriel Katopodis, y el intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares.

Si bien confían en que la propuesta del Ejecutivo provincial “contará con los consensos necesarios con la oposición”, las diferencias con La Cámpora no están saldadas y nadie se atreve a asegurar que el oficialismo sumará esos votos. Y si no los hay, impactará de lleno en el futuro del PJ bonaerense.

Kicillof, La Cámpora, Peronismo

Advertisement
Continue Reading

POLITICA

Carlos Presti dijo que las FF.AA. deben estar a la altura del “nuevo rol protagónico” del país

Published

on


El jefe del Estado Mayor General del Ejército, Carlos Presti, designado este sábado como reemplazante de Luis Petri al frente del Ministerio de Defensa, publicó su primer mensaje tras haber sido elegido por el Gobierno para dicho cargo.

En una publicación en X, el teniente dijo que las Fuerzas Armadas argentinas “tienen y deben estar a la altura del nuevo rol protagónico que la Argentina tendrá en el mundo de la mano del presidente Javier Milei“.

Advertisement

A su vez, en la misma red social, manifestó su agradecimiento con el mandatario por haberlo elegido como titular de la cartera que todavía ocupa el diputado nacional electo Luis Petri: “Gracias presidente Javier Milei por elegirme para este nuevo desafío y gracias ministro Luis Petri por la confianza en estos dos años”.

Advertisement

El nombramiento de Presti como nuevo ministro de Defensa se dio en conjunto con la designación de Alejandra Monteoliva como nueva titular del Ministerio de Seguridad, ya que Patricia Bullrich, como Luis Petri, asumirán sus bancas legislativas. En el caso de Bullrich, ocupará un escaño en el Senado en representación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Alejandra Monteoliva reemplazará a Bullrich en Seguridad y el teniente Carlos Presti a Luis Petri en Defensa

El caso de Carlos Presti marca un precedente inédito en la historia democrática desde 1983, ya que se trata de la primera vez en la que un militar es nombrado para el cargo de ministro de Defensa desde la reinstauración del sistema político democrático y el final de la última dictadura cívico militar que gobernó Argentina entre 1976 y 1983.

La entrada Carlos Presti dijo que las FF.AA. deben estar a la altura del “nuevo rol protagónico” del país se publicó primero en Nexofin.

Advertisement



Carlos Presti,Gobierno,Javier Milei,Ministro de Defensa

Continue Reading

POLITICA

Nuevo miércoles de protesta piquetera y de jubilados: marcharán desde el Congreso hasta Plaza de Mayo

Published

on



El Congreso de la Nación y Plaza de Mayo serán escenario de una marcha y movilización organizada por agrupaciones de jubilados, a las que se suman piqueteros como el Polo Obrero, partidos de izquierda, trabajadores del Hospital Garrahan, las dos CTA, el gremio ATE, algunos sindicatos como el de neumáticos, el Frente Patriótico por la Justicia Social, la organización Territorios en Lucha y representantes de la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP).

Será este miércoles 19 de noviembre desde las 16. La consigna es “contra el imperialismo”. Desde el Ministerio de Seguridad de la Nación advirtieron que, como la semana pasada, se desplegará un operativo de fuerzas federales para aplicar el protocolo antipiquetes. En esa oportunidad, la protesta frente al Palacio Legislativo derivó en fuertes incidentes entre fuerzas federales, como Gendarmería, y un grupo de manifestantes.

Advertisement

“Comienza la resistencia callejera a la reforma laboral y al acuerdo con los Estados Unidos”, anunció el secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, y recordó que esa organización sindical declaró un paro de 24 horas para facilitar la movilización de sus afiliados.

EL mapa de la marcha

“Tiene que ser un paro que nos permita volver a encender la llamita de la conflictividad y que esta crezca rápidamente”, expresó el dirigente. Recordó que ATE participará de las protestas junto a las organizaciones de jubilados y el Frente de Lucha Piquetero, con quienes desde las 16 confluirán en la Plaza de los Dos Congresos para una hora después marchar hacia Plaza de Mayo.

Aguiar también opinó: “La reforma laboral y el reciente acuerdo con los Estados Unidos están íntimamente vinculados. Trabajar más y por menos plata para abaratar los costos del saqueo. Sin huelga y movilización no la frenamos”, dijo en una velada crítica a la CGT, que no adhiere a la convocatoria.

Advertisement

Los organizadores aclararon: “La marcha tiene claras banderas contra Donald Trump, contra Javier Milei y contra el Fondo Monetario Internacional”, y que por esa razón se decidió realizarla “veinticuatro horas antes del Día de la Soberanía”.

La marcha se centra en las críticas a la reforma laboral y los acuerdos entre la Argentina y Estados Unidos

Desde el Ministerio de Seguridad de la Nación y de la jefatura de gobierno de la Ciudad, dejaron en claro que, como cada miércoles, se impondrá el protocolo antipiquetes, se diagramó un vallado para proteger los edificios públicos como el Congreso de la Nación y la Casa de Gobierno y se evitarán cortes de arterias de manera permanente.

Los movimientos sociales, agrupados en la Unión Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), también participarán de la jornada de protesta. Esta vez no lo harán con columnas numerosas, enviarán grupos de representantes en señal de apoyo a los reclamos. Algo similar sucede con las organizaciones que forman parte de Territorios en Lucha, que integran, entre otros, Libres del Sur. El movimiento liderado por Silvia Saravia tampoco lo hará encolumnado. Como la mayoría de los convocados, llegarán desde distintos puntos del AMBA en medios de transporte público.

Advertisement

Desde que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, comenzó a imponer el protocolo antipiquetes, retener a los micros y camionetas mal estacionados y sin la habilitación correspondiente, los piqueteros y organizaciones sindicales de base modificaron la forma de concentración. Ya no se ven columnas que marchan desde Retiro y Constitución e interrumpían el tránsito en arterias claves, como puede ser la Avenida 9 de Julio.

Las políticas sociales de distribución de alimentos y la eliminación de programas sociales como el Potenciar Trabajo, que les daba potestad a los dirigentes sociales sobre los sectores más vulnerables, también hizo menguar la afluencia de asistentes a las marchas y concentraciones.

Sectores gremiales como ATE y las dos CTA también participarán de la marcha de los miércoles que llegará a Plaza de Mayo

Esteban “Gringo” Castro, el ex secretario general de la UTEP y referente del Frente Patriótico por la Justicia Social, confirmó su presencia en el acto que finalizará con algunos discursos de representantes de los trabajadores del Hospital Garrahan, docentes universitarios y representantes sindicales, jubilados y piqueteros de izquierda.

Advertisement

“No hay ninguna posibilidad de salir adelante como pueblo si no nos expresamos pacíficamente en las calles de todo el país. Eso va a suceder porque tenemos un pueblo maravilloso que nunca va a dejar de luchar uniendo la fe y la lucha”, opinó ante una consulta de Infobae.

Castro también expresó: “Nuestro pueblo está hambreado. Tenemos que pelear. No solo Milei, Caputo y Pettovello quitaron la comida a los comedores y merenderos comunitarios, con auditorías nunca realizadas, además nuestra conquista más importante, que fue el Salario Social Complementario, está en la mitad de la mitad de un salario mínimo, vital y móvil”. Y finalizó: “Es indigno que se gane 78 mil pesos al mes trabajando 14 o 12 horas todos los días en las distintas actividades de la economía popular”, aseguró el líder social.

La actividad contra las políticas económicas y sociales de La Libertad Avanza se difundió a través de una conferencia de prensa el lunes 17, en la cual se aclaró: “Se marcha en todo el país con la consigna ‘Contra el ajuste y la entrega. Abajo el pacto de Javier Milei con Donald Trump y el Fondo Monetario Internacional’” y en “reclamo de una huelga general para impedir las reformas laboral, previsional, impositiva y penal”.

Advertisement

A las 16 se concentrarán en las inmediaciones del Congreso para marchar a las 17 a Plaza de Mayo (Gustavo Gavotti)

Desde la organización se difundió un comunicado en el cual se afirma: “Esta marcha se realiza en momentos en que el imperialismo en forma directa interviene en Argentina. Trump y el FMI deciden sobre las elecciones, sobre lo que se resuelve en el Congreso, sobre la economía, sobre la represión, sobre los trabajadores, jubilados, desocupados, sobre el agua y sobre todas las riquezas del suelo y la tierra”.

Antes de marchar a Plaza de Mayo, las organizaciones de jubilados tienen previsto realizar, a las 16 horas, una “radio abierta” sobre Avenida Rivadavia, entre Callao y Combate de los Pozos, y se mostrarán las firmas recogidas que se manifiestan “contra el pacto Milei-Trump-FMI”.

Advertisement
Continue Reading

Tendencias