POLITICA
Elecciones en Misiones: el Frente Renovador busca sostener su larga hegemonía y LLA pone a prueba la potencia de su marca

Desde las 8 de la mañana, 1.002.188 electores estarán habilitados para participar en las elecciones provinciales en Misiones. Son 503.594 mujeres, 498.572 varones y 22 no binarios. Además de 20 lugares en la Cámara de representantes, se renovarán parcialmente Concejos Deliberantes en varias ciudades. Posadas, la capital, es el distrito más importante. Para la renovación de las legislaturas locales, rige la ley de lemas.
Uno de los factores determinantes será el nivel de participación. A menor cantidad de votantes, crecerá el peso y la influencia de los aparatos electorales. El esquema más fuerte y aceitado lo tiene la Renovación, que gobierna la tierra colorada desde hace más de 20 años. Según estimaciones del oficialismo y de las principales fuerzas opositoras, la concurrencia a las urnas podría estar entre el 55 y el 65%.
El grueso del padrón se agolpa en Posadas y su zona de influencia. Estarán habilitados a votar 237.940 personas. De ese total, 130.284 son mujeres, 107.644 son varones y 12 se identifican como no binarios. Pegado a la capital está la localidad de Garupá. Allí se registran 58 mil electores más.
El clima también será un elemento a tener en cuenta. En la elección de cargos provinciales de 2023, la lluvia complicó el voto rural. Para este domingo, el pronóstico anticipa un cielo nublado pero sin precipitaciones en la mayor parte del territorio. Los 8° grados de temperatura mínima y los 19° de máxima que se pronostican son considerados valores invernales para esta zona, ubicada en una área subtropical.
El silencio de la veda electoral en medios tradicionales contrasta con el estruendo que se vive en las redes sociales misioneras. Allí, los candidatos buscan convencer a los últimos indecisos. En las calles posadeñas la campaña está ausente. La Renovación ocupa en proporción 5 a 1 los espacios de cartelería en vía pública. Las demás fuerzas prefirieron YouTube e Instagram para volcar sus propuestas. El ciudadano de a pie sabe que se vota, pero los que irán no demuestran demasiado entusiasmo.
Lo que está en juego
El Frente Renovador de la Concordia pondrá en juego las 11 bancas que ganó en los comicios intermedios de 2021. En esa elección se impuso con comodidad. Obtuvo el 43,3% de los votos y venció con claridad a Juntos por el Cambio (25,7%).
La alianza PRO-UCR logró 6 lugares en aquella votación: dos para los amarillos y tres para los boina blanca. El restante fue del Partido Activar, pero terminó en 2024 en poder del radicalismo. Fue tras la expulsión de Germán Kiczka por su vinculación con una causa de pedofilia, crimen por el que resultó condenado a 15 años de cárcel.
Las tres bancas restantes fueron para dos fuerzas que reivindican su origen agrario.
Propuestas de campaña
En la elección de este domingo habrá 12 boletas impresas en blanco y negro en el cuarto oscuro.
La del FRC estará encabezada por Sebastián Macías, titular de Vialidad provincial. El resto de la lista está integrada por jóvenes, exponentes de lo que se llama “Renovación Neo”, y por referentes libertarios, en un mix que se presentó como “Renovación Blend”.
Con el gobernador Hugo Passalacqua corrido de la escena por algunos problemas de salud, la jefatura de campaña estuvo en manos de Oscar Herrera Ahuad, ex mandatario y actual presidente de la Legislatura.
LLA tendrá su boleta propia, construida a contrarreloj. El partido recibió la autorización para participar seis días después del llamado a elecciones, con la campaña en marcha. La propuesta, que encabezan el ex tenista Diego Hartfield y el presidente de la fuerza en Misiones, Adrián Núñez, se forjó con criterios específicos establecidos por Karina Milei y Martín y Eduardo “Lule” Menem. Debía incorporar figuras nuevas, no podía haber dirigencia de otros partidos y menos que busquen reelecciones y debían estar 100% comprometidos con LLA.
El oficialismo nacional jugó fuerte en Misiones. Martín Menem vino dos veces en 15 días. Karina Milei y Patricia Bullrich se sumaron en la última. El cierre de campaña tuvo la participación de Iñaki Gutiérrez y de Bertie Benegas Lynch.
Que las papeletas de votación no tengan color impedirá que el violeta de LLA se destaque en el cuarto oscuro y sea un llamador para el votante libertario, ese que en 2023 le dio un amplio triunfo al presidente Javier Milei.
Esto no es un dato menor. Que el FRC tenga una composición libertaria, que haya una boleta del Partido Libertario (PL) y que en el Partido Por la vida y los Valores también lleve referentes que identifican con el proyecto mileista puede dispersar el voto.
En el Partido Libertario se recluyeron los “radicales con peluca”, expulsados de la UCR por acompañar iniciativas de la Casa Rosada en el Congreso. La lista la encabeza Martín Arjol, actual diputado nacional. Su compañero de bancada, el tucumano Mariano Campero, llegó a Posadas en las últimas horas para acompañarlo.
Por la Vida y los Valores es un espacio que encabeza un ex policía que está preso. Se trata de Ramón Amarilla, líder de la revuelta policial de 2024. En su lista está Rita Flores, actual pareja de Alejandro Javornicky, referente identificado con el ideario libertario.
El abanico de alternativas se completa con el Frente Unidos por el Futuro, alianza del PRO, la UCR y la Coalición Cívica y Confluencia Popular por la Patria. El espacio lo encabezan dos dirigentes sindicales, Mónica Gurina (CTA) y Eduardo Sánchez (Smata). Esta lista tendrá el apoyo del Justicialismo, intervenido, corrido del FRC y sin candidatos propios. Gurina también enfrenta un proceso penal por las protestas de 2024. Será juzgada en octubre por los cargos de “desobediencia judicial y entorpecimiento del normal funcionamiento del transporte en concurso ideal”.
Además estarán el Movimiento Positivo; el Partido Agrario y Social; Tierra, Techo y Trabajo, Partido del Obrero; Partido Demócrata e Integración y Militancia.
POLITICA
Círculo rojo: hermetismo de campaña, apuntes cordobeses y un “turco” candidato

No les avisaron a dónde iban ni el slogan provocador de la bandera que terminarían por sostener ese día, en Villa Celina, La Matanza. “Lo vi cuando estaba ahí”, se sinceró uno de los participantes de la foto con la que Javier Milei y su hermana Karina inauguraron la campaña bonaerense junto a los candidatos seccionales y los ex dirigentes del PRO que se mostraron públicamente, por primera vez, disfrazados de violeta, el color insignia de La Libertad Avanza.
Los candidatos, dirigentes y funcionarios que asistieron a la inauguración de la campaña, en el corazón de la tercera sección, se enteraron recién esa mañana, la del jueves, de la movida. “Nos dijeron que teníamos que estar a una hora en Casa Rosada, y nada más”, le dijo uno de ellos a su entorno la noche anterior. La presentación se realizaría primero el martes, después se pasó para el miércoles y al final los citaron al jueves, sin mayores explicaciones. Pensaron que podía ser en Tres de Febrero, en los pagos de Diego Valenzuela, el primer candidato a senador de la primera sección que el Gobierno prevé fatigar durante este mes para intentar apuntalar una elección que, en los papeles, en LLA saben de antemano que será cuesta arriba, en particular en la tercera sección, en la que se pronostica una diferencia holgada para el peronismo. Es la estrategia que desplegó María Eugenia Vidal en el 2015 y en el 2017, en ambos casos de manera exitosa. “Se supone que la Provincia está dividida en tres tercios: la tercera sección se compensa con el interior, y define siempre la primera”, explica uno de los máximos estrategas de esa campaña. “La diferencia con el Gobierno es que en ese momento el interior era todo nuestro, ahora no”, agregó.
El hermetismo de la puesta en marcha de la campaña libertaria en el conurbano tiene nombre y apellido: Karina Milei, la hermanísima que se ha transformado en la dueña de los secretos presidenciales, que maneja a gusto el partido, la estrategia política y la confección de listas, y que es cada vez más celosa de sus movimientos y del armado partidario. Ella ejerce, según el jefe del PRO, una “posición dominante”.
La Secretaria General buscó preservar, bajo secreto, el encuentro que el miércoles por la noche compartió tarde en Olivos junto a Mauricio Macri, que la visitó por segunda vez tras aquella reunión infructuosa que tuvieron en los inicios de la gestión, en tiempos de Nicolás Posse como ministro coordinador, cuando el ex presidente todavía fantaseaba con la posibilidad de manejar uno de los joysticks de la consola de videojuegos. Karina Milei, según colaboradores de Macri, habría intentado tener el miércoles una foto junto al jefe del PRO, que se habría negado. Un modus operandi que la funcionaria había querido ejecutar, por ejemplo, en su momento con Néstor Grindetti, el ex jefe de Gabinete de la capital que negoció con ella su pase a La Libertad Avanza y que se frustró finalmente, en parte, por el apuro que la secretaria General de la Presidencia exhibió para tener una foto con el ex funcionario.
El inicio de la campaña porteña, en la carrera para las legislativas locales de mayo en las que el PRO empezó a coronar su debacle, tuvo la misma praxis que la puesta en escena del jueves: los candidatos fueron citados una mañana, bien temprano, en una esquina cercana a la sede del Gobierno de la capital de la calle Uspallata, sin saber qué harían ni dónde. Hasta que en un momento apareció la Secretaria General con su principal colaboradora, y Manuel Adorni con una motosierra. Al rato, todos se mostrarían juntos en la esquina de la sede del gobierno porteño, se harían la foto y se irían a los pocos minutos.
Full hermetismo. Después de esa campaña en la que los hermanos Milei se impusieron sobre los primos Macri, el vocero presidencial nunca más preguntó por la capital, no volvió a participar de ninguna reunión y en el seno de La Libertad Avanza aún insisten con que, después del verano, y una vez asumido en su banca, podría tener un premio mayor en el Ejecutivo. Ya circuló, también se desmintió, que Karina Milei lo había pensado como reemplazo de Guillermo Francos, un rumor que en el corazón de la Casa Rosada admiten como cierto. El plan se frustró luego por la crisis interna en el triángulo de hierro que obligó al Presidente a mediar a través del jefe de Gabinete, que, más allá de sus atribuciones reales, cosechó con Milei un vínculo de confianza aceitado: el jefe de ministros suele subir al primer piso a conversar a solas con el jefe de Estado, y por ahora no tiene intenciones de irse. De esos diálogos salieron varias declaraciones de Francos que, puertas adentro, adjudican directamente al mandatario. ¿Los dichos del ministro coordinador, que se mostró interesado en sumar a Nicolás Pino, el presidente de la Sociedad Rural, al gabinete, pueden tener que ver con esas charlas? En el entorno presidencial dicen que sí.
Las posibles modificaciones que se barajan para después de las elecciones en el elenco ministerial también maduran con total hermetismo, en línea con los deseos de “El jefe”, como el presidente apodó, con razón, a su hermana. La mayor de las incógnitas sigue centrada en el reemplazo de Patricia Bullrich, la ministra de Seguridad que, de no mediar imprevistos, encabezará la lista de senadores nacionales de la Ciudad, y que posó el jueves en Villa Celina con buzo violeta a un metro de Valenzuela, el intendente que quiere sucederla. Hay dirigentes cercanos al candidato que empezaron a prepararse para la opción de ser, a partir del 10 de diciembre, un honorable senador provincial. Algo similar podría ocurrir con Guillermo Montenegro, que también debutó de violeta al igual que Cristian Ritondo. Hasta ahora, nadie tiene asegurado más que una banca provincial.
Sucede que Bullrich, exultante con el acuerdo sellado con el PRO, insiste en dejar a Alejandra Monteoliva, su segunda, como reemplazo. Monteoliva, con poca experiencia mediática, conoció a la ministra cuando corrió a Vicente Ventura Barreiro, destinado a Uruguay. Monteoliva trabaja en Colombia, y Bullrich supo de ella en un viaje a El Salvador, después de una entrevista con el autócrata Nayib Bukele que fascinó a la funcionaria. Enseguida tomaron confianza, a tal punto que la ministra habló incluso con el Presidente y su hermana para tratar de reservarle el ministerio una vez que pasen las elecciones. Excusada, según argumentaron, por algunos sondeos que dan cuenta de que buena parte de los encuestados no quieren que Bullrich deje el ministerio. “Dejar a Monteoliva es retener el control de Seguridad, y que se instale que Patricia sigue teniendo influencia en el área”, justificaron puertas adentro.
De perfil bajo -apenas se le conoce la voz y la cara-, la Secretaría de Seguridad Nacional no es el primer cargo público de Monteoliva. En septiembre del 2013 había asumido en el Ministerio de Seguridad cordobés para ordenar el área tras el escándalo por la detención de media docena de agentes del departamento de lucha contra el narcotráfico. Tres meses después, se alejó tras los saqueos en la capital por el acuartelamiento de la policía provincial, en medio de una disputa política sin precedentes con la administración kirchnerista y una crisis de seguridad que no registró antecedentes.
Fernet con cola. Mientras se empieza a confirmar, como se anticipó en esta sección, que Karina Milei está a punto de bendecir que diputados de su confianza con dos años más de mandato encabecen en octubre las boletas en algunas de sus provincias, como el caso de Romina Diez en Santa Fe y Gabriel Bornoroni en Córdoba, en este último distrito comienzan a esclarecerse algunos interrogantes en la previa del cierre de listas del próximo domingo.
Uno de ellos es que el vínculo entre Luis Juez, ex habitué de Olivos, y el presidente se deterioró cuando el senador apoyó el paquete de leyes impulsados por la oposición y los gobernadores en la Cámara alta que enfurecieron a la Casa Rosada y que, según Milei, golpean el programa fiscal del gobierno. Otro es que el ofrecimiento a Rodrigo de Loredo como tercer candidato a diputado en La Libertad Avanza entró en estado de alerta por el voto positivo del legislador a la ley de financiamiento universitario y recomposición del salario docente, en la sesión de esta semana que, en palabras de Francos, fue un verdadero golpe para el Ejecutivo: “Perdimos todas”, dijo el jefe de ministros. No alcanzaron, es evidente, los mensajes de WhatsApp enviados por Federico Sturzenegger a algunos legisladores con los que tiene buen vínculo, a quienes les explicó, en detalle, de las bondades de los decretos que firmó con facultades delegadas y que ahora fueron rechazados por la Cámara baja junto a un paquete de proyectos. Un verdadero dolor de cabeza para el Gobierno, en momento de turbulencias del programa económico. Desde alguna casa matriz de Estados Unidos se comunicaron con la sede local para preguntar por los alcances de la derrota.
La tercera incógnita que empezó a despejarse es por la candidatura de Natalia de la Sota, que quiere renovar su banca. ¿Podría ser verdad, como instalaron algunos en las últimas semanas, que Martín Llaryora no vería con tan malos ojos esa postulación que puede restarle votos a Juan Schiaretti? A propósito: ¿Podría ser que algún emisario del ex mandatario cordobés, líder de la nueva alianza de gobernadores de centro, se contactó con Diana Mondino, la ex canciller que acaba de ser noticia por sus declaraciones sobre el caso $LIBRA, para ofrecerle una candidatura? Tienen relaciones cruzadas por la Fundación Mediterránea. Versiones del fernet con cola provincial que regó hasta la madrugada la cena de la Fundación Faro del pasado lunes, con Milei como orador central y el cordobés Agustín Laje como anfitrión estelar, atravesada de punta a punta por los coletazos de la interna en la cúspide del poder tras el traumático cierre de listas bonaerense que todavía da que hablar. Agustín Romo, por ejemplo, no fue de la partida. Sí Santiago Caputo y su hermano Francisco, que se fueron bien pasada la medianoche.
“Turco” y candidato. También se comentó en esta sección que Facundo Manes analizaba un plan alternativo en la capital, como pareciera confirmarse, y que para eso Juan Manuel Olmos, el jefe del PJ porteño, le había pedido una reunión, para conocer esa hoja de ruta. Se reveló, además, que Milei pensaba en un economista como Agustín Monteverde para el Senado, y que se empezó a pensar en Alejandro Fargosi, un tuitero fanático de LLA, como eventual postulante.
Con el diputado neurocientífico como posible postulante en la capital, para la Cámara alta, en las próximas horas se conocerá otra candidatura que dará que hablar pero por otros motivos. Se trata de Claudio “El Turco” García, ex futbolista, con pasado de gloria en Racing Club y una vida agitada en las últimas décadas, que está por imitar a Ricardo Caruso Lombardi. A punto de inscribirse, en ese sentido, de tercer postulante a diputado en la lista que prevé encabezar, en soledad, Daniel Amoroso, un ex legislador porteño muy vinculado al círculo rojo, ex PRO con pasado sindical, también en Racing y una incursión actual en el mundo de la publicidad, que vuelve a la actividad electoral después de apostar en los últimos años por dirigentes como Francisco de Narváez o Graciela Ocaña, y más próximo en el tiempo Horacio Rodríguez Larreta.
POLITICA
Preocupado por la apatía, el Gobierno apela a los golpes de efecto y modera el exitismo para promover la participación en PBA

En la provincia de Buenos Aires no todo marcha acorde al plan, como reza el lema que los libertarios suelen plasmar en las redes sociales con las siglas TMAP. A las recientes derrotas en el Congreso y los vaivenes en la economía se le suma la preocupación por el nivel de participación ciudadana proyectado para las próximas elecciones legislativas.
En el laboratorio electoral violeta estiman que tanto en los comicios locales como en los nacionales, la tendencia a la apatía podría perjudicar al frente de LLA y PRO, en tanto fuerza opositora con músculo territorial inferior en comparación al poderoso PJ -K oficialista.
La alarma sobre la no concurrencia se disparó después del cierre de listas, mientras en Las Fuerzas del Cielo se relamían las heridas por la exclusión a la que los sometieron y el grupo de Karina Milei acudía a Santiago Caputo, por orden de “el Jefe”, para empezar a diseñar una estrategia electoral.
Hasta entonces no había planes delineados en el campamento violeta, que se había dedicado principalmente a la designación de candidatos.
Los primeros estudios de opinión pública les confirmaron lo que esperaban: que en la Provincia las intenciones de asistencia a sufragar son bajas y que los ciudadanos están desinteresados en la política. Factores que a la alianza violeta y amarilla podría jugarle particularmente en contra desde que se encuentran en desventaja frente a sus rivales en términos de llegada al territorio.
Desde entonces, en on contadas veces, y repetidamente en off, funcionarios y dirigentes libertarios empezar a advertir sobre el peligro de perder en el distrito más poblado en la próxima batalla. Saben que podrán apoyarse en el PRO para mover las boletas entre los vecinos, hacer campaña en la calle y animar a que vayan a las escuelas asignadas el 7 de septiembre, además de fiscalizar. Pero temen que no sea suficiente.
Sebastián Pareja, el titular de LLA en la Provincia y mano derecha de Karina Milei expuso sin anestesia inquietud sobre los resultados en la Provincia. ”Podemos perder, es un territorio hostil”, dijo en una entrevista con la señal LN+.
Días después, parado en un pasillo de la Casa Rosada, un importante miembro del círculo de Karina Milei insistió con las señales de inquietud. “En la Provincia no hay que confiarse, puede estar complicado”, dijo el viernes por la tarde, mientras los técnicos de grabación se preparaban para la grabación de la cadena nacional de Javier Milei. Unas horas después, rodeado de parte del equipo económico, el Presidente brindó un mensaje para defender sus vetos con carga proselitista, donde llamó a «elegir entre la responsabilidad o el realismo mágico, entre hacer lo correcto aunque implique tener paciencia, o tomar el atajo e inevitablemente volver a chocar».
Detrás de esa serie de declaraciones subyace la necesidad. “Nuestro desafío principal es básicamente lograr que la gente vaya a votar. Y para eso tenemos que generar ganas”, dijeron desde el búnker de campaña libertaria. “La bajada de línea es dejar de lado el exitismo. No mueve a nadie decir que vamos a ganar. Promover la participación es un objetivo, sí”, dijo un estratega. Y agregó: “Todo depende de eso. Literalmente, los números van a depender de eso”.
Es una elección inédita, por primera vez desdoblada. Y a todos los partidos les cuesta hacer predicciones. “No hay referencias, es una elección donde todo puede pasar”, dijo un armador libertario. Y el oficialismo, que ya decidió apelar a la figura de Milei y la nacionalización de la campaña bonaerense, insistirá con las advertencias y apelará a los golpes de efecto.
El arranque de la campaña de Milei con el uso de la frase “Nunca Más” estuvo orientada en ese sentido, y lo logró. La comparación entre el kirchnerismo y el golpe militar generó controversia, más allá de la foto. Los libertarios, criticados por doquier, lejos de arrepentirse, estaban más que satisfechos. En su balance, lograron unificar “la conversación” en torno a la foto del Presidente con los candidatos bonaerenses y la pancarta con el lema de la CONADEP sobre el terrorismo de Estado.
En las filas de los más fieles mileistas algunos no dejan de resaltar su desconfianza en los candidatos, que fueron elegidos, todos, por Karina Milei. Creen que es un factor de base, inamovible, que podría jugarles en contra a la hora de promover la asistencia a las urnas. “Vamos a jugar el segundo tiempo con lo mejor que tenemos, pero es importante destacar que la mitad está jugada. Tenemos que hacer que la gente salga de su casa a votar a Pablo Morillo”, dijo un cabizbajo militante, en alusión al candidato a diputado provincial en la Segunda Sección que hasta 2023 ocupó cargos en el gobierno peronista y, como trascendió en un video, militaba a Axel Kicillof.
Fue un esbozo de otros tiempos: desde el caos interno desatado en el cierre de listas bonaerenses, los libertarios de la esfera de la militancia virtual procuran mantener activado el “modo tolerancia”. Lo mismo ocurre del lado de los Menem, donde hicieron la vista gorda sobre temas molestos -como las críticas de referentes del ala digital al islam-. Nadie quiere sulfurar al “Jefe” con más internas, al menos durante la campaña.
South America / Central America,Government / Politics,Elections / Voting,BUENOS AIRES
POLITICA
Polémica en el Senado por un mail que presionaba por jubilaciones anticipadas y luego pidieron descartar

Victoria Villarruel avanza con sus nuevos asesores en las distintas esferas del Senado -algunas designaciones, más que polémicas y sensibles- y se apresta a finalizar con la ventana abierta para el retiro voluntario previo a la jubilación informada en junio pasado. El jueves último, un mail de Recursos Humanos de la Cámara alta generó consternación y decepción a potenciales candidatos que prefieran continuar con su labor habitual, a través de una más que cariñosa frase reforzada con letras oscuras: “En caso de no adherir al mismo, no podemos garantizarle la permanencia en su puesto actual”.
Para contextualizar la situación. Villarruel imitó una acción realizada por la gestión macrista de Gabriela Michetti y activó un retiro voluntario para el “personal de planta permanente o temporaria -esto último, un regalo del cielo- al que le faltaren hasta cinco años para acceder a la edad mínima exigible en el régimen jubilatorio general vigente”, de 65 años en hombres y 60 en mujeres. Según el decreto presidencial 362/25 que rubricó la titular del Senado, los agentes deberán “contar con los años de servicios con aportes requeridos para iniciar el trámite” en cuestión.
Lo más llamativo de la propuesta aparece en el tercer punto del artículo primero del régimen, que aclara: “El personal de planta temporaria deberá estar afectado a alguna de las estructuras orgánicas estables aprobadas por las autoridades competentes del H. Senado de la Nación, con una antigüedad mayor a DOS (2) años”. Quien cumpla con dicho requerimiento -tan sólo más de 24 meses de trabajo efectivo allí- tendrá una chance más que amistosa para sumarse.
De nuevo al correo, que generó -durante la mañana del viernes- un océano de llanto en diversos despachos por quienes están cerca de los límites del régimen, pero no llegan adherirse. En el enternecedor texto se enfatizó: “Tenga en cuenta que, debido al proceso de reestructuración y redimensionamiento en el cual se encuentra el Senado para responder a la realidad del país, en el caso de no adherir al mismo, no podemos garantizarle la permanencia en su puesto actual. Esta oportunidad consiste en el cobro de una suma equivalente a una remuneración bruta, mensual, normal, habitual y permanente, más un adicional del 10%. Durante el período que dure el programa, los montos percibidos se actualizarán conforme a los aumentos acordados en paritarias para el personal”.
La cima del papelón se logró pasado el mediodía del viernes, con un nuevo email aclaratorio. Allí se resaltó: “Debido a una posible mala expresión del correo anteriormente enviado, la Dirección General de Recursos Humanos desea llevar tranquilidad, aclarando que la referencia de la movilidad en los cargos corresponde a la movilidad normal y habitual del Senado, y no a una situación personal de quienes no opten por el Retiro Previo a la Jubilación. Solicitamos descartar el correo anterior y tomar en consideración el presente texto”.
Mientras este canal sigue su recorrido, en paralelo continúan más acciones serpenteantes de la vicepresidenta. Por caso, volvió a firmar un decreto para recategorizaciones a ciegas, es decir, sin el anexo con los nombres o legajos correspondientes. Lo que convierte en penoso a todo esto, además del paso hacia atrás en cuanto a transparencia -la Cámara alta siempre estuvo a años luz de Diputados, que parece estar aún en otro siglo-, es la explicación que dieron desde el entorno de Villarruel.
Para la visión de las personas que se ocupan de la administración de la caja y de las cuestiones más alejadas de lo parlamentario -Recursos Humanos, etcétera-, los anexos requeridos en su momento por Infobae no podían otorgarse por confidencialidad. Lo más gracioso: en la misma página oficial del Senado hay decenas de resoluciones similares que detallan nombre y apellido, legajo y todos los “chiches”. La diferencia radica en que son de a uno o dos. Al exceder dicho límite, pasa al mundo de lo reservado y, por supuesto, alucinante.
El 20 de julio pasado, este medio enumeró dos decretos con recategorizaciones que Villarruel firmó, publicó y luego hizo desaparecer. Dicho embrollo incluía también el adiós, por ahora, de toda la nómina de la planta permanente, la temporaria, y de los contratos de locación. La pestaña aún existe, aunque al querer revisar los datos aparece el mensaje “página web en mantenimiento”. A la semana siguiente de lo escrito por este medio, las dos resoluciones de la vicepresidenta recuperaron vigor y se cargaron en el sitio oficial. No la parte de los agentes, donde podría hallarse a la jefa de Recursos Humanos, Alejandra Laura Figini, o a su amiga Carola María Yacon, destinada a la dirección general con la categoría A-1, la más alta en la Cámara alta. Son las expertas y responsables de los mails de la discordia.
Las fuentes consultadas hablan de una “limpieza”, hasta el momento, que llegaría al 13% desde que Villarruel inició su gestión. Su “sueño” es que esa cifra alcance el 25%. ¿En qué piensa? En un retiro voluntario plata en mano. El famoso “taca taca y adiós”. En el Senado recuerdan el de la época de Carlos Menem. Para ello, necesitará que Economía le habilite los fondos. Mientras tanto, la titular de la Cámara alta extiende un festival de designaciones y armados de “raviolones” en su gestión para saldar diversos compromisos que arrastra desde la campaña 2023.
- POLITICA3 días ago
La foto de Javier Milei con los candidatos de La Libertad Avanza en Buenos Aires: “Kirchnerismo nunca más”
- POLITICA2 días ago
Lilia Lemoine reaccionó a las declaraciones de Diana Mondino y dijo que “atentó” contra el Presidente: “Está armado”
- POLITICA2 días ago
Milei grabará la cadena nacional con un mensaje sobre los vetos orientado a “amurallar el déficit cero y la política monetaria”