Una de las principales preocupaciones de Asociación Docente de la Ciudad de Buenos Aires (ADEMYS) es la falta de condiciones adecuadas en las escuelas para recibir a los estudiantes en un contexto de calor extremo. «Las estructuras escolares no están preparadas para enfrentar temperaturas extremas. No hay aire acondicionado, los ventiladores no funcionan y no hay agua fresca», señaló Mariana Scayola, refiriéndose a los problemas que ya se vivieron en ocasiones anteriores, como el colapso por un pico de calor en marzo de hace dos años. A pesar de estos antecedentes, no se han realizado mejoras significativas en la infraestructura escolar, algo que la Asociación Docente considera fundamental para garantizar un entorno educativo saludable.

En cuanto a las condiciones laborales de los docentes, Scayola fue tajante al señalar que, en los últimos años, el salario docente ha perdido poder adquisitivo, con una caída del 40 por ciento el año pasado respecto a la inflación. Esta pérdida se ve agudizada por el aumento de los alquileres y los servicios, que afectan directamente al bolsillo de los trabajadores. «El gobierno autoriza que los docentes trabajen más horas, pero no aumenta los salarios para mejorar las condiciones», expresó. Esto ha generado una carga extra para los profesores de nivel medio y superior, quienes deben acumular más horas de trabajo sin una mejora salarial significativa.

Además, la secretaria general de Ademys destacó que las condiciones de trabajo no solo impactan en la salud física de los docentes, sino también en su salud mental, ya que el desgaste por la cantidad de horas es considerable. «Esto tiene un impacto directo en el aprendizaje, porque no es lo mismo un docente que trabaja de 8 de la mañana a 10 de la noche, que uno que tiene tiempo para prepararse y descansar», argumentó.

A pesar de los reclamos, la situación salarial aún no ha sido resuelta. Scayola recordó que, a pesar de las solicitudes de un bono de emergencia y la convocatoria a paritarias, el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires no ha respondido. «El gobierno de Jorge Macri sigue aplicando la ‘motosierra’ de la gestión de Milei, lo que afecta tanto a las condiciones laborales como a la inversión en las escuelas», afirmó.

Otro tema que preocupa a Ademys son los cambios en las políticas educativas del gobierno porteño, en particular en relación con la Educación Sexual Integral. Scayola expresó su preocupación por la retirada de materiales de ESI de las plataformas oficiales del gobierno porteño. «Esto está en sintonía con lo que pasa a nivel nacional, con un gobierno que promueve un discurso anti-derechos y misógino», dijo, destacando la importancia de defender estos contenidos que consideran fundamentales en la formación integral de los estudiantes.

Finalmente, la dirigente sindical recordó que las discusiones sobre el inicio del ciclo lectivo no deben centrarse exclusivamente en la cantidad de días de clases, sino en las condiciones en las que se desarrollarán. «Es fundamental que se garanticen condiciones adecuadas para que los docentes y los estudiantes puedan desempeñarse en un entorno seguro y saludable», concluyó. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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