La elección del nuevo defensor Ciudadano en La Plata sigue envuelta en controversias políticas. Entre los sesenta y dos postulantes, uno de los nombres que más ha resonado es el de Luciana Bártoli, actual vicepresidenta de la Unión Cívica Radical en la capital bonaerense. A raíz de ello, su postulación ha sido impugnada, lo que despertó críticas por evidentes conflictos de intereses.

Sin embargo, de los datos de la realidad se desprende que esta situación quizás no sea el mayor impedimento para que Bártoli acceda al cargo.

Vínculos que comprometen la imparcialidad

Luciana Bártoli, quien apunta a ocupar el puesto de defensor Ciudadano, trabaja desde hace años en la defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires. Según documentos a los que accedió REALPOLITIK, fue nombrada en el área el 29 de mayo de 2014 por Carlos Bonicatto, entonces titular del organismo y actual jefe de Gabinete de la gestión municipal de Julio Alak.

Su designación, efectiva desde el 1 de junio de ese año, pone en evidencia una estrecha relación política con el oficialismo municipal, que viene a confirmar los rumores desde hace algunas semanas. Esta situación contradice directamente la normativa que regula los requisitos para asumir la defensoría Ciudadana, que exige independencia y neutralidad para quienes aspiren al cargo.

Pero esto no es todo, ya que el desembarco de Bártoli en la defensoría bonaerense no fue mera casualidad.

Ya en 2011, la dirigente radical había sido elegida para coconducir «La hora del defensor» junto a Bonicatto, un magazine radial de actualidad, enfocado en las problemáticas que enfrenta la gente y las distintas vías de solución que ensaya la defensoría para que los habitantes de la provincia tengan a resguardo sus derechos.

Luciana Bártoli junto al titular de la UCR La Plata, Pablo Nicoletti.

Además, su reciente asunción como vicepresidenta de la UCR platense agrava el conflicto, generando dudas razonables sobre su capacidad de actuar con imparcialidad en un rol destinado a supervisar los actos de la administración pública local.

Implicancias políticas y tensiones internas

La postulación de Bártoli ha desatado críticas no solo por sus evidentes vínculos políticos, sino también por su pertenencia activa a la UCR. A pesar de haber pedido licencia en su cargo partidario, voces del ámbito político consideran que su designación contradice el espíritu de la ordenanza 7.854, que regula la defensoría y prohíbe expresamente que los titulares mantengan actividades partidarias.

Te creía más ingenioso para justificar que el bloque que conducís es un apéndice en el @ConcejoLaPlata del kirchnerismo que gobierna @LaPlataMLP. Además, incurrís en un error político, pero eso no es lo importante. https://t.co/hZ7nOYBRZc

— Guillermo Bardón (@guillebardon) December 16, 2024

El concejal Guillermo Bardón, presidente del bloque de La Libertad Avanza, calificó como “grotesco” un supuesto acuerdo entre el oficialismo y el radicalismo para garantizar la llegada de Bártoli a la defensoría Ciudadana. Esta negociación habría estado vinculada a la reciente aprobación de la ordenanza fiscal e impositiva 2025, impulsada por Julio Alak con el apoyo de la UCR.

La sombra de la negociación política

En los pasillos del Concejo Deliberante de La Plata, muchos coinciden en que el próximo defensor Ciudadano será una figura alineada políticamente con el oficialismo o con sectores aliados. Esto ha generado una ola de impugnaciones y cuestionamientos al proceso de selección, que parece estar más orientado en satisfacer acuerdos políticos que a proteger los derechos de los vecinos.

De confirmarse la designación de Bártoli, quedará en evidencia la preocupante politización de un cargo que debería actuar como contralor de la gestión pública, abriendo numerosos interrogantes. Los vecinos de La Plata, mientras tanto, se ven relegados a un segundo plano, ante el avance impasible de las negociaciones de dirigentes políticos más interesados en priorizar sus propios intereses que el bienestar de la ciudadanía. (www.REALPOLITIK.com.ar)

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