Casi en simultáneo con la fallida votación en el Congreso nacional, la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires tenía previsto tratar en el recinto el proyecto de Ficha Limpia, pero tampoco prosperó porque la sesión se terminó levantando debido a incidentes que se provocaron afuera del edificio, a raíz de una protesta de enfermeros disconformes con la sanción de la nueva ley que rige a la actividad, que sí fue aprobada.

No obstante, se preveía que la iniciativa espejo de la nacional no iba a lograr los dos tercios de los votos necesarios. Si bien el PRO y La Libertad Avanza estaban alineados, el peronismo y la izquierda podían bloquear el texto surgido desde el radicalismo, que necesita 40 votos afirmativos. Sí avanzó la citada Ley de Enfermería, tratada previamente por mayoría simple, con 27 votos a favor, 26 en contra y 7 abstenciones.

El proyecto de ley de Ficha Limpia para el ámbito porteño fue presentado por legisladora Aldana Crucitta (UCR) y prevé que aquellas personas que tenían una condena con penas privativas de libertad no podránser precandidatas a cargos electivos en ninguna de las categorías electivas. Y agrega el apartado más controvertido, que rechaza la oposición y que tiene que ver con que la limitación regía incluso en aquellos casos en los que la sentencia no estaba firme.

Los delitos planteados en el texto abarcan el cohecho y tráfico de influencias, la malversación de caudales públicos, las negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas, las exacciones ilegales, el enriquecimiento ilícito de funcionarios y empleados, el encubrimiento y el delito de fraude en perjuicio de la administración pública.

También comprende a delitos contra la seguridad de la nación, delitos contra la integridad sexual, delitos contra el estado civil de las personas, los delitos contra la libertad y deudores alimentarios incorporados en el Registro previsto en la Ley 269. E incluye además aquellas infracciones que se incorporen a futuro en el Código Penal de la Nación o por leyes especiales.

Además de Ficha Limpia, en la Legislatura se votó la nueva Ley de Enfermería, impulsada por el oficialismo a partir de un proyecto del legislador Facundo del Gaiso, de la Coalición Cívica. La iniciativa, que motivó protestas afuera de la Legislativa, salió aprobada después de una votación reñida, por mayoría simple, que terminó con 27 votos positivos y 26 negativos, además de 7 abstenciones.

El debate del tema motivó varios cruces, especialmente cuando expusieron los legisladores de izquierda Celeste Fierro (MST) y Gabriel Solano (FIT), la dirigente de Unión por la Patria Victoria Montenegro o cuando el propio Del Gaiso cerró como orador. El proyecto oficialista, convertido en Ley, propone la creación de Régimen de Empleo y Desarrollo Profesional de la Enfermería del Sector Público en el ámbito del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Pero esa propuesta no cuenta con el apoyo de la Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE).

También hubo cuestionamientos al radicalismo, expresados desde la izquierda y el peronismo, porque plantearon que Daniel Angelici, referente del partido en el ámbito porteño, mandó a abstenerse a sus legisladores para acompañar de esa manera el proyecto que apuntalaba todo el oficialismo para la nueva Ley de Enfermería.

Desde la oposición, en cambio, piden que reconozcan a la carrera de enfermería dentro de la Ley 6.035 sobre Profesionales de la Salud y llevaron la cuestión hasta la Comisión de Salud. El propósito, argumentan, es que se equiparen los derechos laborales y salariales de los enfermeros a los de otros profesionales de la salud. Se trata de una iniciativa firmada por María Rosa Muiños, defensora del Pueblo de la Ciudad y ex legisladora porteña.

Al término de la votación, se dispuso un cuarto intermedio, que se extendió por casi dos horas. Se esperaba que se siguiera con el normal tratamiento de Ficha Limpia, pero a la vuelta, tras intervenir el legislador del PRO Darío Nieto, la titular de la Legislatura, Clara Muzzio, decidió levantar la sesión. Fuentes consultadas por Clarín aseguraron que la decisión se tomó porque afuera del edificio había enfrentamientos entre los manifestantes, enojados por la sanción de la ley de Enfermería, y la Policía. Desde la izquierda denunciaron en redes sociales que hubo represión policial y que al menos dos personas fueron detenidas.