Es muy variable la edad de la aparición del primer diente del bebé. Alrededor de los tres meses, empiezan a explorar el mundo con su boca, tienen más saliva y comienzan a ponerse las manos en la boca. Muchos se preguntan si esto significa o no que comenzó la dentición; sin embargo, el primer diente suele aparecer a los seis meses.

Por lo general, los primeros en salir son casi siempre los frontales inferiores y la mayoría suelen tener todos sus dientes de leche a los tres años de edad. Su aparición no provoca fiebre ni diarrea, pero sí cierto malestar, normal y pasajero. Estas son algunas dudas frecuentes.

1. ¿Hay que cepillarlos?

Una vez que tu hijo tenga dientes debés cepillarlos dos veces al día con muy poca cantidad de dentífrico, especialmente después de la última bebida o comida del día. Recordá no acostarlo con una mamadera, ya que esto podría producir caries.

Una vez que cumpla tres años, se recomienda que se use una cantidad de dentífrico con flúor del tamaño de una arveja. Cuando tu hijo pueda hacerlo, enseñale a escupir el exceso de pasa. Lo mejor es que vos la pongas en el cepillo hasta que tenga unos seis años.

2. ¿Cómo ayudar a aliviar el dolor de la dentición?

Masajear las encías inflamadas con los dedos limpios puede colaborar a reducir las molestias, así como ofrecerle algo frío o darle paracetamol -previa consulta con el pediatra- en una noche que sea muy difícil.

Los bebés pueden mostrar signos de malestar donde le está saliendo el diente, puede ser que veas que babea mucho más de lo habitual y sus encías de alrededor pueden estar inflamadas y sensibles. Otra manera es ofreciéndole un paño limpio húmedo o congelado.

3. ¿Hay que hacer una cita por la aparición de sus primeros dientes?

Sí, lo recomendable es acudir al dentista después de que le salga su primer diente y también al cumplir un año. El profesional se asegurará de que todas las piezas se desarrollen con normalidad y no haya problemas. Además, te dará más consejos sobre la higiene adecuada.

4. ¿Qué cosas no debo hacer en esta etapa?

No uses tabletas para la dentición, geles con benzocaína, geles o tabletas de dentición homeopáticas ni collares de ámbar para la dentición. La belladona y la benzocaína se comercializan como analgésicos para niños, pero la Administración de Alimentos y Medicamentos ha emitido advertencias sobre ambas debido a sus posibles efectos secundarios.

Aunque los dientes de leche están destinados a caerse y ser sustituidos por los definitivos, de ellos depende la correcta coordinación de las arcadas superior e inferior en el futuro. Mientras permanecen en la boca, les están guardando el sitio a los permanentes. Por eso, cuando una pieza se cae antes de tiempo, se pone un aparato que ocupa su espacio. La falta de cuidados puede repercutir negativamente en los que vendrán después.

Fuente: Padres e hijos